El presidente de la Federación, Timothy Trautman, mantiene una posición mas positiva que las bailarinas. “Estas mujeres son verdaderas atletas. Tienen una elegancia particular que debería ser representada en los olímpicos”, afirmó.

JUEGOS OLÍMPICOS 2012

Striptease: De los bares a Río 2016

La Federación Internacional de 'pole dancing' presiona al comité olímpico para meterle un toque de sensualidad a los juegos del 2016. Y es que la barra vertical dejó de ser una atracción de los clubes nocturnos y ahora se instaló en los gimnasios.

31 de julio de 2012

La federación internacional de ‘pole dancing’ tiene un objetivo en mente: lograr que el baile en barra sea reconocido como deporte y así ser parte de los juegos olímpicos del 2016.

Con cientos de bailarinas entrenando y compitiendo por todo el mundo, el obstáculo más grande al que se enfrenta la federación, es lograr que el comité olímpico reconozca el baile sobre el tubo como deporte oficial.

A pesar del estado físico, fuerza, y elegancia que se requiere para dominar los movimientos sobre el tubo, muchos de las grandes bailarinas dudan que la federación logre esta meta.

"Siempre he apoyado los esfuerzos de la comunidad para obtener un cupo en los olímpicos. Sin embargo creo que el público en general no esta preparado para el deporte", dijo la campeona nacional de pole dancing, Natasha Wang.

Esta práctica ha sido asociada por años con bares y 'strippers' y por esta razón tiene una dudosa reputación. No obstante, su popularidad ha llevado a sus bailarinas a convertirlo más en un deporte competitivo y menos en un baile para ganar propina.

El presidente de la Federación, Timothy Trautman, mantiene una posición mas positiva que las bailarinas. "Estas mujeres son verdaderas atletas. Tienen una elegancia particular que debería ser representada en los olímpicos", afirmó.

"Estan levantando su propio peso corporal y al mismo tiempo controlando los músculos y el cuerpo para hacer los movimientos y transiciones con total sutileza", afirmó también Samantha Huffman, profesora de ‘pole dancing’.

Aunque una petición en el 2010 para ser parte de los olímpicos del 2012 logró recopilar 6.000 firmas, no fue suficiente. La federación y sus bailarines esperan que para el 2016 se recobren sus esfuerzos.