Colombia, entre los que más desplazados tienen en el mundo

Con tres millones de personas desplazadas durante todo lo que lleva el conflicto interno, Colombia es uno de los países que más desarraigados tiene en el mundo. Eso dice la agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) en su informe anual de 2008, lanzado este martes.

En este penoso ranking lo acompañan Irak, con 2,6 millones de desplazados; la región de Darfur, en Sudán, con dos millones; República Democrática de Congo, con 1,5 millones, y Somalia con 1,3 millones de desplazados. El año pasado, “Kenia observó un considerable nuevo desplazamiento interno a comienzos de año, mientras que el conflicto armado en Georgia obligó a otras 135.000 personas a dejar sus hogares. Otros lugares en los que aumentó el número de desplazados internos en 2008 fueron Afganistán, Pakistán, Sri Lanka y Yemen”, de acuerdo con el documento de Acnur.

Según su balance, a finales del año pasado, había en todo el mundo 42 millones de desplazados, de los cuales 26 millones estaban en sus propios países y 16 millones habían viajado al exterior.

De ese total de personas desarraigadas de sus tierras, Acnur atiende a 25 millones. Entre ellos, tiene a cargo “el número sin precedentes de 14,4 millones de desplazados internos frente a 13,7 millones en 2007”, según reseña el informe.

La situación de los desplazados dentro de los países en conflicto es más crítica si se tiene en cuenta que para ellos no hay ninguna agencia internacional que se encargue de atenderlos. Pero la ONU le ha asignado a Acnur entre sus tareas las de brindarles alojamiento y protección ante las amenazas a estos desplazados internos.

Según António Guterres, Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, este año continúan presentándose desplazamientos en países que tienen conflictos internos, entre los que cita a Colombia, Irak, el Congo y Somalia. “Hoy día somos testigos del incesante número de conflictos internos que está generando millones de personas desarraigadas”, comentó Guterres.

Pero la situación trasciende a otros territorios a tal punto, que “cada uno de estos conflictos también ha generado refugiados que huyen cruzando las fronteras de sus propios países”, de acuerdo con este comisionado.

Hasta 2008, Colombia figuraba entre los principales países de origen de desarraigados en el exterior con 374 mil personas en esa situación. Otros países expulsores son Afganistán, con 2,8 millones de desplazados que salieron de ese país; Irak con 1,9 millones, Somalia (561 mil), Sudán (419 mil) y República Democrática del Congo (368 mil). Estas cifras no se produjeron sólo el año pasado, sino que son sumas de varios años atrás.

Lo más grave es que 80 de cada 100 personas que salen de sus países como consecuencia de la guerra se alojan en otros en vía de desarrollo. Según Acnur, esto significa crearles un sobrepeso a países que tienen escasas posibilidades de atenderlos, por lo que se ha hecho tan necesaria la ayuda internacional.

Así, al finalizar 2008, Pakistán sumaba 1,8 millones de refugiados provenientes de otros países; Siria, un poco más de un millón; Irán, 980 mil; Jordania, un poco más de 500 mil, y Kenia un poco más de 320 mil desplazados. En América Latina, aparece como receptor de desplazados Ecuador, con 82.300 sumados hasta el 31 de diciembre pasado. No todos estos desplazados llegaron el año pasado, sino que se habla de totales sumados a lo largo de varios años.

El informe se basa en cifras hasta 2008, que reflejan una disminución de 700 mil desplazados en relación con 2007, pero el informe anota que, según lo percibido durante este año por Acnur, se contrarrestando esa tendencia a la baja. “En 2009 ya hemos observado un importante número de nuevos desplazamientos, concretamente en Pakistán, Sri Lanka y Somalia”.

Lo más grave, y esto ocurre en todas partes, según Acnur, es que muchos desplazamientos se demoran varios años, incluso décadas, en resolverse. Por ejemplo, en 22 países hay por lo menos 25 mil personas que llevan en el exilio por lo menos cinco años “y para ellos no se vislumbra ninguna solución a corto plazo”, de acuerdo con el informe.

Pero que la gente regrese a sus casas no es una tarea imposible, pues el año pasado regresaron a sus hogares 1,4 millones de personas que habían sido víctimas de desplazamiento interno y 604 mil que estaban exiliadas. Sin embargo, según reconoce Acnur, estas cifras son inferiores a las registradas en otros años como consecuencia de las difíciles condiciones de seguridad para el retorno.