Presidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez. | Foto: AP

SEGUNDA INTERVENCIÓN DE URIBE

“Unasur no debe desvincularse ni ir en contra de la OEA”: Uribe

El Presidente colombiano dijo que, aunque no tenía obligación de discutir el acuerdo militar con Estados Unidos, acepta entregar toda la información sobre el tema a Unasur para que lo analice “sin prescindir de la OEA”.

28 de agosto de 2009

En su segunda intervención en Unasur, el presidente colombiano, Álvaro Uribe, hizo comentarios sobre las intervenciones que hicieron los demás presidentes respecto a la seguridad y el narcotráfico en la región.

Lo primero que dijo fue que “me parece importante que Unasur no se desvincule de la OEA ni vaya en contra. Las deliberaciones, los estudios que se encomienden a los diferentes órganos en proceso de constitución de Unasur deben ir de la mano de la OEA y no en contra de sus sistema interamericano”.

Sobre el documento que leyó el presidente Chávez, donde decía la estrategia militar de los Estados Unidos en Sudamérica, Uribe dijo que “no un descubrimiento. El documento está en una página de internet. Lo que hemos averiguado es que no es adoptado por Estados Unidos, sino una propuesta de un grupo académico”.

Dijo que para leer el documento, hay que tener en cuenta los enfoques de seguridad que tienen los países del vecindario. “Hay países que tienen enfoque armamentista, de preparación para enfrentar ataques provenientes de otro país o para atacar. El enfoque de Colombia es defenderse de un problema interno. No tenemos juegos de hipotéticas guerras con vecinos y eso quiero dejarlo claro”.

Y dijo que sabe que Venezuela sí tiene juegos de guerra y que, aunque en el documento que conoce Uribe no se hace referencia directa a un conflicto con Colombia, “de los mapa se infiere y no puedo ocultar esta preocupación. En varias oportunidades, Chávez ha expresado que en cualquier momento prende los aviones Sucoi y que en cualquier momento están en Colombia. Nosotros nunca hemos hecho una amenaza como esa”. Escuche la respuesta del presidente Álvaro Uribe sobre el tema a su homólogo Hugo Chávez.

Sobre la parte del documento que leyó Chávez en cuanto a que desde Palanquero se harían movilizaciones por toda Sudamérica, Uribe explicó que su gobierno “no permite tránsito de aviones y tropas sin permiso explícito del Senado y del Consejo de Estado. En consecuencia, cualquiera que sea el contenido del documento de los Estados Unidos, el alcance del acuerdo que Colombia ha hecho no puede llevar a Colombia a aceptar allí tránsito de tropa o de naves de guerra”.

Y aceptó que naves de inteligencia norteamericana han ayudado en la lucha contra el narcotráfico y eso ha permitido logros significantes. “Por supuesto, es bien importante entender que el alcance de nuestro acuerdo habla de inteligencia táctica y operativa, no estratégica”. Es decir, según Uribe, sólo se concentra en los problemas internos de Colombia.

Al presidente Evo Morales, de Bolivia, le dijo que su propuesta de prohibir bases militares de Estados Unidos en la región se sabe que apunta directamente al acuerdo que acaba de firmar Colombia. “Por más que digamos, en muchas mentalidades por pasión política, por mucho que digamos que no son bases, hay casos en los cuales no se entenderá. Podemos demostrar que no son bases norteamericanas y seguirá el caballito de batalla. Tampoco nos parece que debamos llamar a cuentas al presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Para eso está el Sistema Interamericano, Naciones Unidas y la OEA. ¿Qué tal que Estados Unidos llame a cuentas a nuestros mandatarios?. Una cosa es pretender dialogar y otra es llamar a cuentas al presidente Obama”.

Y en ese sentido, dijo que la presencia de militares norteamericanos no se ha modificado de lo pactado desde que se inició el Plan Colombia, donde decía que habría 800 soldados y contratistas de Estados Unidos en el país.

A la evidente inquietud que comentaron sus colegas sobre los radares y la tecnología de los militares norteamericanos, Uribe comentó que “creo haberle precisado al presidente García el alcance de los radares. Son restringidos a esta lucha, no estratégicos, son para el tema táctico y operacional”.

Uribe también dijo que, aunque no tenía por qué estar allí explicando su decisión, le parece que Unasur es un escenario útil para discutir los temas de la región. “Sabemos que la integración de Unasur nos obliga a discutir estos temas. Compartimos el llamamiento que nos han hecho a construcción de confianza y solución pacífica de los problemas. Creemos que a medida que avance un diálogo constructivo, y todo el mundo tiene que aportar, Unasur puede ayudar a solucionar muchos problemas”, dijo, en su opinión sobre la intervención del presidente peruano, Alan García.

En ese sentido, comentó que está de acuerdo con que el Consejo de Defensa de Unasur conozca el acuerdo firmado entre Colombia y Estados Unidos, pero que debe ser analizado todo “sin prescindir de la OEA”. Eso sí, advirtió que el acuerdo ya está firmado. Y sugirió que también se analicen los acuerdos militares hechos por países de la región con terceros e insistió en estudiar las denuncias sobre tráfico de armas y la compra de armamentos en los otros países de Sudamérica.

A la presidenta chilena, Michell Bachelett la felicitó por haber publicado todas las compras de armas que ha hecho su país. “Ese es un buen ejemplo que debe seguir la región en su conjunto. La transparencia es lo único que realmente construye para que opere la legitimidad que requiere el Estado de Derecho. Sin transparencia no hay confianza”.

Uribe explicó que las armas que ha comprado Colombia no tienen como objetivo una guerra entre naciones, sino combatir el narcotráfico y el terrorismo.

Y sobre el comentario de Bachelett sobre entregarle a la Policía la lucha contra las drogas, Uribe explicó que ese sistema no funcionó en Colombia. “No alcanzaba la Policía y el Ejército no se sentía responsable. El problema crecía.

Al presidente ecuatoriano, Rafael Correa, Uribe le dijo que entiende que el problema del conflicto es Colombiano y que está afectando al vecindario. Escuche la intervención del presidente Álvaro Uribe sobre el tema.

Y discrepó de algunas cifras comentadas por Correa. Hemos hecho esfuerzos en la protección de la frontera, presidente Correa. Teníamos 9 mil hombres y hoy tenemos 19 mil en esa zona. Si no, no hubiéramos interceptado a un personal miliar ecuatoriano que cruzó la frontera. Y procedimos con delicadeza”, comentó.

“Creemos que los gobiernos tienen que ser pacientes y que en lugar de ponerle gasolina a los incidentes fronterizos, deben resolverlos. Ecuador reclamaba porque Colombia fumigaba cerca de Ecuador y dijeron que causaba daño. Nosotros decimos que no, pero los respetamos. Aceptamos no volver a fumigar en esos 10 kilómetros de territorio a partir de la frontera. En poco más de un año, las Farc sembró más de 15 mil hectáreas de droga allí”, contó Uribe.

Y sobre la presencia de los grupos armados en otros países, que fue uno de los comentarios de Correa en su primera intervención, Uribe reconoció que “la culpa es nuestra, pero les pedimos ayuda. Le ruego a su intervención agregar otro elemento. Las Farc han ido a Ecuador para sembrar coca.

Correa ha dicho varias veces que su vecino no es el Estado Colombiano sino las Farc. “No le puedo aceptar ese comentario y para construir diálogo hay que ser respetuosos. que usted diga que linda con las Farc, era la vieja tesis, lo que ha hecho Colombia es recuperar esos territorios. Y estamos haciendo un esfuerzo integral en esa zona. Usted habló de que solamente habíamos reducido la coca. Que nos falta mucho, sí, pero hay una gran reducción”, le respondió a Correa el Presidente colombiano.

Sobre las debilidades en la lucha contra las drogas ilícitas, Uribe reconoció que “Colombia todavía aporta el 54 por ciento de la cocaína del mundo”. Sin embargo, resaltó que “ha disminuido la cocaína en las calles de Estados Unidos. Hay disminución de precio y pureza. Las inversiones de colombia en seguridad hay que depurar las cifras que dio correa.

Respecto a los insistentes reclamos del presidente ecuatoriano por el bombardeo al campamento de Raúl Reyes en su territorio, Uribe dijo que asumió toda su responsabilidad y contó que el propio secretario de la OEA, José Miguel Insulza quedó tranquilo cuando el Ministerio de Defensa le mostró toda la información sobre el caso. Y resaltó que ya le había pedido perdón varias veces a Ecuador por haber entrado a su territorio sin permiso.