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Al menos 15 muertos por Huracán Isabel

Viernes 19, 8:00 horas. Al menos 13 muertos, cientos de casas averiadas, árboles derrumbados y calles inundadas, es el resultado parcial del Huracán Isabel que ya afectó Carolina del Norte, Virginia y Maryland en Estados Unidos.

15 de septiembre de 2003

Desde hace varios días los estadounidenses esperaban el ataque del huracán de categoría 2 (5 es el más fuerte en la escala). Al medio día de ayer llegó a las costas de Carolina del Norte, donde 100 mil residentes del área tuvieron que ser evacuados. Además, las compañías aéreas se vieron obligadas a cancelar unos 1.500 vuelos, en 20 aeropuertos.

Allí, los vientos de Isabel arrancaron techos, destruyeron muelles y generaron marejadas hasta de 5 metros de altura, que dejaron sumergidas calles en las ciudades costeras de Virginia Beach, Atlantic Beach y Ockacroke.

Un empleado de la empresa de energía de Carolina del Norte murió electrocutado. Dos personas también fallecieron en accidentes de tránsito. Las demás víctimas están por determinarse.

Al final se registraron cientos de casas averiadas, árboles derribados, calles inundadas y más de dos millones de personas sin servicio de energía eléctrica.

En Washington no hubo resultados que lamentar. En la víspera de su llegada, el gobierno federal cerró sus puertas hasta el lunes próximo, el presidente George W. Bush se refugió en Camp David (Maryland) y los 535 legisladores estadounidenses abandonaron la zona desde el miércoles en la noche.

Tanto la empresa de metro de todo el área metropolitana (Virginia, Washington y Maryland), como la de buses clausuraron sus operaciones hacia las 11 de la mañana. Salvo algunas pequeñas tiendas y supermercados, que vendían sus reservas de pilas, agua, linternas y productos no perecederos, todo el comercio permaneció cerrado durante el día.

El prónostico de los servicios Metereológicos indicó ayer que el huracán desaparecería al final de la tarde. Sin embargo en la noche le advirtieron a los ciudadanos que se abstuvieran de salir debido a que muchas veces es el día después del huracán el que trae más complicaciones.