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Polémica en el Senado por proyectos presentados por el Gobierno

Viernes 31, 8:30 horas. El gobierno presentó un proyecto de reforma constitucional que incluye dos propuestas excluidas del referendo, la penalización de la dosis personal y la eliminación de personerías. Los contradictores no se hicieron esperar.

27 de octubre de 2003

La presentación estuvo a cargo de los ministerios del Interior y Hacienda. Comenzará a ser debatido por la Comisión Primera del Senado en los próximos días.

En cuanto a las personerías, el proyecto establece que a más tardar en diciembre de 2005 quedarían suprimidas todas estas oficinas en municipios y distritos que tengan más de cien mil habitantes, y sus funciones serían ejercidas por la Procuraduría General y la Defensoría del Pueblo con el apoyo de fundaciones, corporaciones, universidades, instituciones de economía solidaria o empresas privadas escogidas en audiencia pública.

También están incluidas otras reformas controversiales como facultar al Presidente de la República para establecer la organización de la administración nacional, y eliminar la Comisión Nacional de Televisión y la Corporación Autónoma del Río Grande de la Magdalena, Cormagdalena.

Frente a la penalización de la droga, el Gobierno propone que ley castigará, además de la siembra, producción, distribución, porte o venta de sustancias alucinógenas, el consumo y porte de esos productos para uso personal.

Las dos propuestas despertaron de inmediato un intenso debate entre los Congresistas. Los senadores Héctor Helí Rojas y Darío Martínez se manifestaron en contra de las facultades que la supresión de personerías le otorgaría al Presidente. "El poder del Congreso se ha minimizado. Perdimos el poder de hacer las leyes, porque nos hemos acostumbrado a que lo que no propone y avala el Gobierno Nacional no es aprobado por el Congreso", dijo el senador Héctor Helí Rojas.

Para el senador Darío Martínez, este proyecto de acto legislativo también hace honor a la costumbre de los "minifundios constitucionales, es decir, de despedazar la Constitución, desconceptualizarla y volverla incoherente, pues se proponen reformas sin responsabilidad alguna".

El debate hasta ahora comienza.