Crisis en la Fiscalía

El vicefiscal Guillermo Mendoza, el Director Nacional de Fiscalías, Germán Ortega, la directora del CTI, Mariluz Méndez, y los once delegados de la Fiscalía ante la Corte Suprema presentaron su renuncia protocolaria, por un escándalo de filtración.

Como lo reveló un confidencial de la edición de Semana en circulación, al parecer, los  fiscales delegados ante la Corte habían conversado en una reunión cerrada de trabajo acerca de varios procesos de la parapolítica hace unos días. 

Entre los casos que discutieron, mencionaron el del actual gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos. En la reunión uno de los fiscales comentó sobre la conveniencia de revisar la validez del capítulo “La rutas de la expansión paramilitar y la transformación política de Antioquia” de paramilitarismo en Antioquia, que se incluyó en la edición del libro Para Política, de la Corporación Nuevo Arco Iris que salió a la venta en febrero pasado. 

Luego de esta reunión, se cree que otro fiscal delegado filtró información a Luis Alfredo Ramos y a un congresista amigo, de quien no se conoce el nombre, sobre lo que se había discutido en esa reunión, sobre algunas acciones que se tomarían dentro del proceso y sobre quién había dicho qué.
 
La filtración causó gran malestar entre los funcionarios de la Fiscalía, y el fiscal que había hecho el comentario sobre el mencionado libro, pidió respaldo de sus colegas en aras de proteger lo que se comentara en reuniones de trabajo, para que esto no terminara en los corredores del Congreso. 

Como consecuencia, los altos funcionarios de la Fiscalía renunciaron protocolariamente para dejar al Fiscal General, Mario Iguarán en libertad de tomar una decisión al respecto de la presunta filtración.
 
A última hora trascendió que el fiscal Iguarán aceptó la renuncia de una fiscal delegada ante la Corte, Marta Luz Hurtado, quien al percer fue la autora de la filtración. La Fiscalía aceptó su renuncia de la delegada, quien llevaba tres años trabajando en la entidad.