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Las embajadas de Ecuador y Venezuela permanecen cerradas hasta nueva orden. Foto: Guillermo Torres.

Crisis diplomática

Ecuador y Venezuela cierran sus embajadas en Colombia

Hoy no sólo las sedes diplomáticas de los dos países vecinos amanecieron sin actividad. Los pasos en la frontera con Venezuela están restringidos.

César Paredes
3 de marzo de 2008

El adagio ‘luego de la tempestad viene la calma’, está aún distante de aplicarse en la crisis diplomática que vive Colombia. La escalada de decisiones que comprometen las relaciones con Ecuador y Venezuela va en aumento, luego de que el jefe guerrillero de las Farc ‘Raúl Reyes’, fuera abatido en territorio ecuatoriano.

Semana.com visitó las sedes diplomáticas de ambos países y encontró que en la embajada de Venezuela ya no están, y en la sede diplomática de Ecuador no se permite el ingreso a personal distinto al diplomático. Quienes acudieron a las citas para tramitar documentación en las dos embajadas no fueron atendidos.

Francisco Suéscum Ottat, embajador de Ecuador en Colombia fue retirado el domingo tras desatarse la crisis. En un comunicado la cancillería de ese país explicó sus razones: “Ecuador ha resuelto retirar, de inmediato, a su embajador en Bogotá frente a los graves hechos ocurridos en la zona fronteriza, que constituyen una trasgresión a los principios de soberanía e integridad territorial amparados por el derecho internacional”.

Suéscum en conversación con Radio Quito dijo que el Ministro de Defensa colombiano, Juan Manuel Santos engañaba al presidente Álvaro Uribe: “El ministro de Defensa de Colombia miente y engaña a su presidente. Definitivamente nadie puede creer que no se viola la soberanía del otro país cuando, inclusive sosteniendo la absurda tesis de que se dispara desde el supuesto territorio colombiano a territorio ecuatoriano en donde caen las víctimas”.

El presidente del vecino país, Rafael Correa, calificó la operación militar del Ejército colombiano como un”grave atentado” y “una masacre”, tras la comprobación de que los guerrilleros cayeron en una incursión militar sin que se produjera un enfrentamiento, pues se hallaron cadáveres y sobrevivientes con ropa de dormir. Además amenazó con llevar la situación hasta las últimas consecuencias.

En la noche del domingo, el director de la Policía colombiana, el general Óscar Naranjo, reveló que en la operación militar se recuperaron tres computadores con información que incrimina al Ministro de Seguridad de Ecuador, Gustavo Larrea, y al gobierno del presidente Chávez en la intención de “oficializar” encuentros entre la guerrilla de las Farc y el gobierno de su país.

Funcionarios del gobierno de Ecuador han protestado por las revelaciones aduciendo que se trata de “patrañas” del gobierno colombiano en aras de desviar la atención de la gravedad de la violación a la soberanía nacional de ese país. El Viceministro de Defensa ecuatoriano, Miguel Carvajal, dijo en la mañana a Caracol Radio que era una “maniobra distractiva” que tenía como propósito involucrar a Ecuador en la internacionalización del conflicto y evitar el tema de fondo que era la incursión militar en su territorio.

Con la salida del embajador, Suéscum, sin embargo, la cancillería ecuatoriana aclaró que no se trataba de una ruptura de las relaciones, y que esperaba que el incidente no repercutiera en perjuicios para los dos países.

Entre tanto, Santos, denunció ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU el apoyo que países latinoamericanos brindan a “los grupos terroristas”. Invocó los artículos suscritos por los miembros de la organización, que prohíben ese apoyo e invitó a la comunidad internacional a que se uniera en la lucha contra el terrorismo.

En este momento en Ecuador y Colombia analizan la situación y mantienen consejos de seguridad. Mientras se desarrolla el análisis de la investigación, el general Naranjo en alocuciones intermitentes ha informado a los medios de comunicación acerca del contenido de los computadores de los cuáles hasta ahora se ha escrutado sólo uno.

Por otro lado, las relaciones de Colombia con Venezuela han cobrado un saldo inédito. El presidente Hugo Chávez subió el tono de sus agravios al presidente colombiano al llamarlo “subimperialista, mentiroso, paramilitar, narcotraficante y lacayo del imperio”. A la escalada de agravios se sumó la orden de enviar 10 batallones a la frontera.

En la embajada venezolana en Colombia estuvo hasta el 28 de noviembre su embajador Pavel Rendón, hasta que fue llamado a consultas por Chávez, luego de que Uribe sacara al mandatario venezolano de la mediación por el acuerdo humanitario. Desde entonces la escalada de insultos viene en aumento. Tras conocer la noticia del abatimiento de ‘Reyes’, Chávez ordenó que se retirara todo el personal de la embajada, que a pesar de la salida de Rendón continuaba ejerciendo sus funciones.

Además Chávez, en la mañaa del lunes, mandó a la Guardia Nacional que impidiera el ingreso de carros con placas colombianas en territorio venezolano. Por los pasos de los puentes Simón Bolívar, Francisco de Paula Santander y Boca de Grita no se permite el ingreso de mercancías y hay represados vehículos con caña de azúcar, carbón, cárnicos, entre otros. A los transportistas les piden las cédulas y quien no tenga la venezolana no puede ingresar al vecino país.

En este momento las embajadas de Ecuador y Venezuela en Colombia se encuentran cerradas hasta nueva orden. Nadie sabe en qué puede repercutir toda la crisis diplomática. Lo cierto es que los usuarios de los servicios de las embajadas y los transportadores de mercancías tendrán que seguir esperando a que se normalicen las funciones de las representantes de los gobiernos de los países vecinos. Pero todo parece indicar que la tensión antes de querer menguar va a crecer aún más.