El intercambio en frases.

"No me pongan a bailar al ritmo de las Farc". Álvaro Uribe Vélez, refiriéndose a la posibilidad de permitir un canje entre secuestrados y guerrilleros de las Farc presos.

"Es el momento para que haya una comunicación bilateral y para que se abran todos los espacios que permitan llegar a un acuerdo humanitario. Creo que el país recibiría bien este tipo de iniciativa para que puedan regresar al seno de la sociedad dirigentes, soldados, policías y ex parlamentarios". Luis Alfredo Ramos, presidente del Senado.

"Desde mi pasado como víctima del secuestro, quiero decirles que ninguna de las experiencias de acuerdos humanitarios ha sido buena para nuestro país. No representaron el fin ni la disminución de los secuestros", Francisco Santos, vicepresidente de la República.

"No existe convención alguna que justifique el intercambio de criminales comunes, como los miembros de las Farc, por ciudadanos inocentes que están secuestrados". Fernando Londoño Hoyos, ministro del Interior y de Justicia.

"El acuerdo humanitario puede ser un hecho con las normas vigentes y a la luz del DIH". Carlos Lemos Simmons, ex presidente de la República.

"Se prohibiría un intercambio humanitario si los guerrilleros beneficiados toman nuevamente el camino de la confrontación armada", Julio César Turbay, ex presidente de la República.

"Soy partidario de que se estudie un acuerdo humanitario que no represente una contribución a fortalecer la capacidad de fuego de la guerrilla". Alfonso López Michelsen, ex presidente de la República.

"Es necesario una medida, dentro de la legislación interna, que le permita al presidente, sin prevaricar, sin pasar por encima de la distinción de poderes, ordenar o sugerir la excarcelación o libertad condicional de personas que están pagando condena en las cárceles. Necesitaríamos, dentro de la legislación interna, un soporte adicional similar a lo que en derecho anglosajón se conoce como un derecho de gracia" Luis Carlos Restrepo, comisionado de paz, en referencia a la posibilidad que el presidente avale un intercambio humanitario.

"El Estado sí debe buscar la libertad de los secuestrados. Es una obligación constitucional proteger la vida y sobre todo de quienes tienen restringida su libertad. Pero, esas acciones de rescate no se oponen a buscar fórmulas y explorar caminos para lograr un acuerdo humanitario. Hay niños y adultos secuestrados desde hace muchos años en condiciones inhumanas". William Vélez, presidente de la Cámara de Representantes.

"En cuanto al acuerdo humanitario, entiendo la preocupación de los familiares. Se impone buscar salidas para secuestrados que llevan muchos años en esa penosa situación. Pero para el Gobierno es un verdadero reto garantizar que, si ese intercambio se llega a presentar, los guerrilleros no sigan secuestrando; que estas organizaciones no adquieran un seguro de libertad para guerrilleros capturados. Por eso es muy difícil en el terreno político, separar el acuerdo humanitario de un proceso de paz". Alfonso Gómez Méndez, ex Fiscal General de la Nación.

"Rechazamos la idea de que es aceptable agarrar civiles inocentes y ponerlos en esas cárceles clandestinas para presionar el intercambio de combatientes. La distinción entre combatiente y civil, para nosotros es absoluta y sagrada". James Lemoyne, delegado especial del Secretario General de las Naciones Unidas para el conflicto interno de Colombia.

"Es urgente abrir puertas para el intercambio humanitario para desactivar la guerra". Eulalia Yagarí, indígena de la etnia embera, ex diputada provincial.

"En medio de las heridas, de los resentimientos, de los odios, tenemos que persistir en el camino del diálogo para construir ese acuerdo humanitario que permita disminuir los niveles de violencia". Angelino Garzón, uno de los tres integrantes de la Comisión Facilitadora para destrabar el tema del acuerdo humanitario.

"Discriminar vuelve al secuestro mucho más negocio y hace que en esa dinámica de exclusión se vea como un problema individual y no colectivo" Olga Lucía Gómez de País Libre.

"Los principios jurídicos y éticos son muy claros y el Estado y el Gobierno del presidente Uribe no pueden cruzarse de brazos: tienen el derecho y la obligación jurídica de conseguir la liberación de los secuestrados. No lo pueden hacer brutalmente. Pero en este caso creo que hay que reivindicar el derecho y el deber desde el punto de vista de orden público que tiene el Estado". José Miguel Vivanco, director Human Rights Watch, División Américas.

"Me consta que el presidente Uribe está a favor del intercambio humanitario. Yo apoyo un intercambio humanitario, pero el Estado no puede parar su accionar". Fabio Valencia Cossio, embajador de Colombia en Italia.

"Esta es una catástrofe para el país y para los familiares de los secuestrados. Sin acuerdo humanitario todos están en riesgo". Yolanda Pulecio, madre de Íngrid Betancourt.

"En el gobierno pasado hubo algo muy parecido. Y más se demoraron los guerrilleros en salir de las cárceles que en estar empuñando un fusil en las manos. Entonces, ¿vamos de nuevo ahora a sacar de las cárceles 600 ó 700 guerrilleros para que vayan a fortalecer a la guerrilla? ¿A conseguir mandos que en estos momentos no tienen? En eso debemos tener una claridad total. Quiero repetir que la guerrilla tiene que responder por los militares desaparecidos". General Jorge Enrique Mora Rangel.