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ELECCIONES EN ESTADOS UNIDOS

Hillary Clinton obtiene ligera ventaja sobre Barack Obama en la ruta a la Casa Blanca

El ‘Súper Martes’ no dio un ganador absoluto. Obama venció en 13 estados, cinco más que su rival, pero Hillary se impuso en los territorios con más delegados, como Nueva York y California. Obama sigue en la batalla por la nominación demócrata

AP
6 de febrero de 2008

En las filas de los republicanos la situación está más definida. John McCain aglutinó las aspiraciones de los republicanos para retener la Casa Blanca con una victoria arrolladora sobre sus rivales en las primarias del ‘Súper Martes’, mientras en las toldas demócratas nada está dicho. Hillary Rodham Clinton conquistó el mayor número de los delegados en juego aunque mantiene una contienda reñida con Barack Obama. Clinton ganó el premio mayor de la jornada, California, gracias al apoyo de los votantes hispanos con miras a lograr la candidatura del Partido Demócrata para las elecciones presidenciales de noviembre. Obama venció en Alabama y Georgia mediante el respaldo de los electores negros.
 
McCain también ganó en California, en lo que fue un golpe demoledor a su más cercano perseguidor, el ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney.

“Hemos ganado algunos de los estados más grandes del país”, dijo McCain a los simpatizantes que lo ovacionaban durante una concentración en Phoenix, después de cosechar triunfos de uno a otro lado de Estados Unidos. El también senador por Arizona, quien no fue considerado el favorito durante meses, señaló que ahora lo es para sustituir a George W. Bush luego de dos periodos en la Casa Blanca.
 
En el ‘Súper Martes’ de mayor magnitud en la historia de Estados Unidos, McCain había acumulado en total 570 delegados, casi la mitad de los 1.191 necesarios para conseguir la candidatura presidencial del Partido Republicano con una diferencia abismal sobre sus adversarios.

De acuerdo con los resultados aún incompletos, McCain obtuvo el martes 511 delegados que llegan a 613 con los conseguidos en las votaciones anteriores. Romney tuvo 176 para un total de 269 y el ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee recibió 147 para un total de 190.

No obstante, Romney y Huckabee dijeron que seguían con esperanzas en la contienda.

Los republicanos tenían en juego 1.023 delegados de 21 estados el martes. Su candidato será definido a mediados de año en la convención en Saint Paul, Minnesota.

Clinton sumó 584 delegados y acumuló 845, por encima de los 563 de Obama, que ahora tiene 765. Los demócratas se repartieron 1.681 delegados en 22 estados y el territorio de Samoa Americana.
 
Necesitan 2.025 delegados para conquistar la candidatura en la convención en Denver, también a mediados de año.

Ni Clinton ni Obama se declararon ganadores del ‘Súper Martes’ que abarcó 22 estados, y con razón. Obama ganó 13 estados; Clinton, ocho estados y la Samoa Americana. Pero con los triunfos en Nueva York, Nueva Jersey y Massachusetts, la ex primera dama encabezó por escaso margen los cálculos iniciales de los delegados conferidos hasta la noche del martes.

Obama venció en Misurí. Sin embargo, la votación fue muy reñida y es posible que demore horas saber quién ganó la mayoría de los 72 delegados demócratas del estado.

Así mismo, aún estaban pendientes de conocerse los resultados de las asambleas partidarias demócratas en Nuevo México. Clinton encabezaba la votación con 117 sufragios cuando el partido suspendió el conteo antes de la medianoche para reanudarlo este miércoles.
Clinton dijo que “espero con ansias proseguir nuestra campaña y el debate sobre cómo dejar al país en mejor situación para la próxima generación”.

McCain ganó en Nueva York, Nueva Jersey, Connecticut y Delaware, llevándose los 198 delegados de estos cuatro estados, y sumó a Illinois, Arizona, Misurí y Oklahoma en su columna.

Huckabee ganó las primarias republicanas en estados donde la religión tiene gran peso, en Alabama, Tenesí y Georgia además de Arkansas, donde fue gobernador. “La única manera de no ganar una campaña es abandonarla, y hasta que alguien me gane, saldré con la campana a cada asalto de esta pelea”, dijo.

Romney, ex gobernador de Massachusetts, ganó en su estado, en Colorado y también en Utah, con el apoyo de los mormones, la fe que profesa. Poco antes de imponerse en la asamblea partidaria de Alaska, también se mostró desafiante: “Llegaremos hasta la convención. Ganaremos”.

Clinton, que aspira a ser la primera presidente mujer, ganó en California, Nueva York, al que representa en el Senado, Massachusetts, Nueva Jersey, Oklahoma, Tenesí y Arkansas, del cual fue primera dama durante más de una década. También ganó en el territorio de Samoa.

Obama, que espera ser el primer presidente negro, venció además en Connecticut, Georgia, Delaware, Alabama, Utah e Illinois, estado por el cual es senador. También ganó en las asambleas partidarias de Dakota del Norte, Minnesota, Colorado, Idaho, Kansas y Alaska.
The Associated Press basó sus proyecciones en encuestas de boca de urna.

Después de una serie de primarias en estados individuales, que otorgaban pocos delegados, el ‘Súper Martes’ fue todo lo contrario: un conjunto de elecciones y asambleas que abarcaban casi medio país, en la campaña presidencial menos previsible que se recuerde.
Las encuestas sugirieron algunos cambios sutiles en el panorama político.

McCain tenía una ventaja ligera entre los votantes que se identifican como republicanos, un grupo que no lo había apoyado en ninguna de las contiendas anteriores. Como había ocurrido antes, McCain se mostraba fuerte entre los independientes.

Romney estaba recibiendo los votos de cuatro de cada 10 personas que se identificaban como conservadoras. McCain ganaba un tercio del apoyo en ese grupo, y Mike Huckabee recibía uno de cada cinco de esos votos.

Clinton tenía sólo una ventaja magra entre las mujeres y los votantes blancos, dos grupos que la han apoyado en las primarias anteriores, de acuerdo con encuestas a boca de urna en 16 estados. Obama estaba ganando una mayoría arrolladora del voto de los negros y Clinton recibía el apoyo de casi seis de cada 10 hispanos.