Las Farc les ocultan a las familias las causas de la muerte de los dos militares que tenían en cautiverio

Escenas desgarradoras se vivieron en los dos humildes hogares de los suboficiales del Ejército muertos mientras permanecían secuestrados por parte del grupo armado de las Farc. Los seres queridos de los dos militares exigieron que les entreguen pronto los cadáveres y que no los vayan a someter al suplicio en el que ahora tienen inmersas a los familias de los diputados del Valle del Cauca.

Los dos militares que fueron secuestrados por las Farc hace cuatro meses murieron en cautiverio, confirmaron el miércoles sus familiares, aunque a ninguna de ellas les ha llegado un anuncio directo de parte de la organización armada. Se trata de los sargentos Alexander Cardona y Jesús Sol, quienes fueron secuestrados en el departamento del Valle del Cauca, al suroeste del país.

Ana Lucía Marín, madre de Cardona, dijo en una entrevista radial que el Comité Internacional de la Cruz Roja (Cric) notificó a la familia sobre la muerte de su hijo. Viviana Rocío Garay, esposa de Sol, también confirmó su muerte.

Ambas señalaron que desconocen cómo murieron, pero Garay declaró que lo más probable es que fueron asesinados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).

Barbara Hintermann, jefa de la delegación del Cric, dijo que no tenían información sobre cómo murieron los militares, pero que fueron informados sobre su deceso por las Farc.

Marín suplicó para que la guerrilla “realice un gesto humanitario y nos entreguen los cuerpos”. Los militares no formaban parte de un grupo de 45 personas plagiadas por las Farc que pretende canjear por centenares de guerrilleros secuestrados.

Las muertes de Cardona y Sol se unen a las de 11 ex diputados en junio que, según el gobierno, fueron asesinados por las Farc durante un confuso combate interno entre dos frentes de la guerrilla. Los familiares de los ex diputados han exigido el retorno de los cadáveres, pero las Farc todavía no han acordado cómo se realizará la entrega de los restos.

Las Farc insisten en un despeje militar para negociar un canje humanitario, pero el gobierno rechaza esa opción. El presidente Álvaro Uribe propuso la semana pasada que las Farc liberen a todos los secuestrados en su poder y que después se presenten en una zona desmilitarizada para negociar un acuerdo de paz.

‘Raúl Reyes’, comandante de las Farc, calificó esa propuesta como “una cortina de humo” en respuesta a un cuestionario enviado por el noticiero de televisión Noticias Uno. Al tiempo, que señaló que en el intercambio humanitario deberían estar Simón Trinidad y Sonia, un hecho que el presidente Uribe insiste le queda imposible pues ambos se encuentran en cárceles de Estados Unidos, a donde fueron extraditados.

La Fundación País Libre asegura que las Farc tienen unas 700 personas en cautiverio. Y ya en otros casos, el grupo armado había dado muestras de su indolencia pues no le importa dejar que pasen los días y que la información se diluya antes de entregar pruebas de vida de los secuestrados o de los cadáveres cuando éstos fallecen.

Por esto, el representante de la oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Juan Pablo Corlazolli, anunció que adelanta gestiones en Ginebra para intentar que la comunidad internacional comprenda la responsabilidad que tienen las Farc en la muerte de secuestrados.

Esto porque aun hay sectores, en especial en Europa, que consideran que la agrupación armada de las Farc la mueven ideales románticos y revolucionarios.

Finalmente, el vicepresidente Francisco Santos reaccionó con dureza ante el anuncio de las dos nuevas muertes. “Para las Farc, el procedimiento es más importante que la vida de los secuestrados.
 
Ahora que la Corte Penal Internacional comienza a actuar en Colombia, eso tendrá una responsabilidad sobre guerrilleros como ‘Raúl Reyes’ o ‘Tirofijo’, quienes piensan que algún día andarán libres por Colombia pero que en realidad tendrán que pagar por la muerte de los secuestrados”.

CON INFORMACIÓN DE AP