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Luis Guillermo Pardo

7 de septiembre de 2003

Finanzas

Semana.com: ¿Cuál será su estrategia financiera frente a la construcción y mantenimiento de obras que requiere la ciudad?

Luis Guillermo Pardo: Una de las dificultades que enfrenta toda nueva administración es la definición del presupuesto de su primer año de gobierno por parte de su antecesor. Eso estrecha un poco el panorama y restringe la capacidad del mandatario. Casi siempre toca acomodarse a las circunstancias. Sin embargo, en el proceso de empalme puede revisarse lo que le espera al alcalde entrante.

Medellín exige énfasis en la inversión social. En otras palabras, primero el hombre que el cemento.

Lo que no puede perderse de vista es la preservación de lo que tenemos, el rescate del patrimonio, cosa que puede hacerse dando prelación al empleo de mano de obra local, a través de programas que beneficien a las comunidades aledañas a cada obra.

Asumimos que la actual administración deja el presupuesto asignado para la continuación de las obras en marcha. De cualquier manera, la consigna es no paralizar proyectos ya iniciados.

Toda nueva construcción se regirá por el criterio de informar a concertar con las comunidades organizadas, para buscar la opción más económica y eficiente.

Vamos a incorporar el concepto de regeneración urbana.

Desplazamiento

Semana.com: ¿Cómo manejará el tema del desplazamiento en términos de salud, vivienda y educación?

L.G.P.: Medellín ha sido un imán para los desplazados, aunque no tenga soluciones para todos. Las familias que llegan huyendo de la inseguridad en las zonas rurales se asientan en sectores donde las condiciones de vida son precarias.

El volumen del éxodo es tal, que resulta imposible tener siquiera cifras ciertas sobre esa forma de inmigración, que además es un derecho consagrado en la Constitución bajo la figura de la libre movilización. Se calcula que en el año 2000 eran 145.000 en nuestra ciudad.

Medellín cuenta con una oferta educativa amplia y una cobertura casi total en los niveles básicos. El esfuerzo ha sido grande, pero no podemos bajar la guardia. En ese orden de ideas, la estrategia deberá apuntar a brindar a los nacidos aquí y a los que escogieron a Medellín como nuevo hogar, el acceso al estudio y un apoyo nutricional que tenemos planeado.

En materia de vivienda se anunciaron grandes cosas en la administración que expira el 31 de diciembre. El Proyecto Pajarito debió entregar este año más de 2.000 soluciones y no ha construido una sola. Será necesario, entonces, revisar ese plan, complementarlo si es viable y aplicar los mayores esfuerzos a través de estrategias como el subsidio múltiple (Nación, Departamento, Municipio) y la autoconstrucción.

Pero ante todo, creemos necesaria una política de semirretorno, aplicable en zonas rurales o semirrurales de Medellín, donde se desarrollarán proyectos integrales para los diferentes grupos, conservando la relación del desplazado con su elemento natural: la tierra.

En cuanto a la salud, la Ley 100 creó inequidad y abrió la puerta a los oportunistas que han hecho fortuna a expensas de ella y a costa del bienestar del pueblo. Hay que revisar el Sisben, ajustarlo en sus medidas y hacerlo funcional en sus alcances.

Seguridad

Semana.com: ¿Qué estrategia diseñará para el manejo de seguridad en la ciudad?

L.G.P.: La seguridad va ligada a la equidad social. Diseñaremos un plan integral y unos planes sectoriales con los comandantes de la Policía Metropolitana, la IV Brigada y el DAS, para no dejar zonas desprotegidas.

El tema de la seguridad irá ligado a unas estrategias que generen mayor estabilidad y bienestar social.

Semana.com: ¿Qué propuestas nuevas hará frente al tema?

L.G.P.: El elemento educativo tendrá que jugar un papel trascendental en la búsqueda de soluciones. Procuraremos que el orden social se derive de políticas de convivencia orientadas a lograr el respeto mutuo, el ejercicio de los deberes y los derechos, la valoración de lo público y la protección del patrimonio colectivo. La novedad serán los planes sectoriales, con apoyo comunitario.

Semana.com: ¿Ha considerado la idea de aumentar el número de policías en Medellín así como se ha venido planeando en Bogotá?

L.G.P.: Las políticas represivas generan tensión social. El aumento en el pie de fuerza suele hacerse desde instancias distintas a la Administración.

El tema será sometido a evaluación desde la Alcaldía con los oficiales respectivos.

Semana.com: ¿En caso de que su respuesta anterior fuera sí, cómo lo financiaría?

L.G.P.: Aunque no hemos pensado en elevar el número de efectivos en este organismo, creemos que Medellín es quizás el municipio que mayor apoyo económico brinda a la Policía Nacional.

Transporte

Semana.com: ¿Qué hará en torno al problema vial y su atraso de más de 10 años que está ocasionando graves problemas a la ciudad?

L.G.P.: Los intentos por reordenar el tránsito vehicular, sobre todo en el centro de la ciudad, no han rendido los frutos esperados. El Plan Cuadrantes (reubicación de rutas en el centro) desubicó a los usuarios y mortificó a los transportadores. La falta de concertación fue una de las causas.

Los rectángulos antibloqueo en los cruces semaforizados son una urgencia inaplazable.

El centro debe ser transitable, sin la exclusión absoluta del tráfico automotor. Habrá que escuchar a la comunidad, los empresarios, los conductores, los voceros del comercio organizado... Intentar soluciones por decreto puede crear un caos mayor que el existente.

Así mismo, resulta urgente una revisión total del estado de las vías y retomar ideas como la del ex alcalde Juan Gómez Martínez, quien ofreció recompensa a quien hallara un hueco en las calles pavimentadas de Medellín y no tuvo que desembolsar un solo peso.

Solamente se han tomado medidas contra el transporte público y se hace necesario, entonces, diseñar estrategias con respecto al transporte privado.

Los proyectos viales estratégicos para la ciudad y que hoy están en ejecución o en elaboración del proyecto final técnico y financiero, tales como la nueva vía a San Antonio, la doble calzada a Las Palmas, las longitudinales oriental y occidental y los anillos de Palos Verdes y La Aguacatala serán priorizados por la alcaldía de Pardo.

Semana.com: ¿Qué ha pensado acerca del sistema de Metrocable que se está construyendo en la comuna nororiental? ¿Piensa aplicarlo en otros sitios neurálgicos y de gran concentración poblacional?

L.G.P.: Pienso que tenemos otras prioridades. La deuda del Metro quedará diferida a cien años si se concreta la propuesta del presidente Uribe, de continuar amortizándola con la sobretasa a la gasolina y de rebajarla mediante acuerdos como el aprobado por el Concejo de Medellín para retirar la demanda del Municipio contra Isagen por el aprovechamiento de las aguas de la cadena hidroeléctrica del Oriente.

Debemos solucionar primero los asuntos pendientes y pensar luego en la expansión del sistema. ¿Dónde quedó el proyecto del Tren de Cercanías? Ese es más barato, no supone la entrega de recursos a contratistas extranjeros y propicia la integración metropolitana.

Y en lo que respecta a la integración de los barrios con las estaciones del Metro, sigue vivo el proyecto del SIT (Sistema Integrado de Transporte). No veo razón para desplazar a los ciudadanos que sostienen a sus familias a través de las empresas de buses. Cualquier solución al transporte y cualquiera nueva empresa que se cree para ello, deberá constituirse con los empresarios del transporte actual. Pardo, en vez de hacer Metrocable, que cuesta aproximadamente 60 mil millones de pesos, hubiera ensanchado la calle 104 o la 107, incluyendo obras de paisajismo urbano que hacen tanta falta en las comunas más populosas de la ciudad.

Privatización y descentralización

Semana.com: ¿Entre sus métodos para conseguir recursos está la venta de empresas estatales?

L.G.P.: Esa vía no hace parte de mi campaña. No podemos caer en la vieja práctica del campesino que mató el pollito aliviado para darle sopa al pollito enfermo. El patrimonio colectivo no puede entregarse a intereses extranjeros, con alto beneficio para unos pocos intermediarios nacionales. Esa historia no tendrá escenario en Medellín en la administración de Luis Guillermo Pardo. Nuestras empresas funcionan bien y generan utilidades. Impulsaremos un gran pacto de eficiencia y transparencia con los sindicatos de empleados del Municipio y de sus empresas para eliminar la vergonzosa corrupción existente en Medellín, que alcanzaba un 17.4% a octubre de 2002, que colocó a la ciudad como la tercera más corrupta de Colombia.

En la alcaldía de Pardo no caeremos en la tentación de vender a EPM, como ocurrió en 1995.

Parques, clubes y espacio público

Semana.com: ¿Cuál será su postura frente al tema de volver el campo de golf del Club El Campestre, un parque para la zona de El Poblado?

L.G.P.: De cualquier manera, dicho campo de golf es un referente verde en la ciudad y debe continuar siéndolo, independientemente de si se transforma en un parque. Lo que no puede pasar es que dicho campo sea urbanizado.

Semana.com: ¿Qué va a hacer en materia de otros parques que necesita la ciudad teniendo en cuenta las pocas zonas verdes con que cuenta?

L.G.P.: Si bien es cierto que Medellín tiene un déficit en metros cuadrados de zonas verdes por habitante, también es verdad que ha recibido un buen tratamiento en materia de arborización, y, sobre todo, está habitada por gente con sentido ecológico.

Hacen falta parques, pero los existentes están subutilizados. Lo primero será incentivar su buen uso, promover campañas para que sirvan al disfrute colectivo, con planes de seguridad específicos, como uno de los ejes de la reivindicación del espacio público generador de convivencia y encuentro social. El Corredor del Río, por ejemplo, será fuente de ingresos para muchas familias, ya que lo convertiremos en un gran corredor educador urbano y ambiental que contenga una oferta artesanal seria y que sirva de ingreso para muchas familias. Igualmente, el río deberá ser el articulador de parques y zonas verdes en todo su recorrido metropolitano.

Los parques se aprovecharán para hacer muestras de arte y artesanías en los barrios, presentaciones culturales, actos comunitarios.

Semana.com: ¿Cuál su política respecto al tema del espacio público?

L.G.P.: Reivindicaremos el espacio público como la máxima expresión. No lo privatizaremos como sucede actualmente con los parquímetros y con algunas ventas callejeras. Volveremos a recuperar la dignidad de la acera y desarrollaremos una política de regeneración urbana antes que de renovación. Diseñaremos una política de espacio público con alcance metropolitano y de región, en la medida que el Túnel de Occidente y el aeropuerto José María Córdoba nos aproximan al Oriente y al Occidente cercanos.

Toda política con respecto al espacio público será concertada con las comunidades respectivas, evitando el autoritarismo, la injusticia y la antidemocracia.

El sistema de movilidad en Medellín nos permitirá diseñar campañas pedagógicas de buen uso del espacio público y de las señales de tránsito. Concebimos, entonces, el espacio público como el gran espacio de inclusión social y que permita unir en convivencia a toda la ciudad.

Las cañadas y estructuras naturales de mi ciudad serán vistas como oportunidades para el diseño de espacios públicos ecológicos, incluyentes y amables.

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