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El ex congresista Carlos Alberto Oviedo Alfaro dijo que le escuchó a Pablo Escobar que Alberto Santofimio ideó el asesinato de Galán, pero que no tiene pruebas sobre ello.

Oviedo Alfaro testifica contra Santofimio en caso Galán

Según el ex congresista quindiano, Pablo Escobar le dijo que fue Santofimio quien le sugirió matar a Luis Carlos Galán. Los Rodríguez Orejuela dicen que no tienen información contra Santofimio.

28 de junio de 2006

El ex congresista Carlos Alberto Oviedo Alfaro ratificó este miércoles ante el juez primero especializado de Cundinamarca su testimonio contra el ex ministro Alberto Santofimio por el asesinato del ex candidato presidencial Luis Carlos Galán, ocurrido en agosto de 1989.

Oviedo Alfaro -quien está preso por homicidio- fue abogado del extinto narcotraficante Élmer “Pacho” Herrera, en 1989, en un proceso por el primer intento de homicidio contra Galán. Para esa época Oviedo ya conocía a Pablo Escobar Gaviria, a la postre señalado como autor intelectual del magnicidio.

Según Oviedo, los narcotraficantes del Valle del Cauca estaban divididos en dos grupos: los del cartel de Cali (del cual hacían parte los hermanos Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela, Élmer “Pacho” Herrera y José Santacruz) y los del norte del Valle (de alias don Efra, Rasguño y los Grajales). Cuando Escobar Gaviria cazó pelea con “Pacho” Herrera, los del norte del Valle decidieron adoptar una posición neutral para no entrar en confrontación con el cartel de Medellín. Oviedo Alfaro recibió la misión de llevar el mensaje de paz a Escobar y fue en ese encuentro con el capo en donde –según él- tuvo lugar la conversación que compromete a Santofimio con la muerte de Galán.

“Yo le dije que don Orlando, don Efra y los Grajales eran neutrales en su pelea con el cartel de Cali y él me respondió que tranquilo, que les dijera que él no volvía a cometer errores como el que cometió por “el Santo”. Le pregunté que quién era ese y me dijo que Alberto Santofimio. Que mirara cómo se nos vino el Estado encima por la muerte de Galán, que él no volvería a hacerle caso”.

Mientras hacía su declaración, Oviedo se mostró muy preocupado por dejarle claro a Santofimio que su intención no era condenarlo, sino contar lo que pasó en esa conversación, en la que estaban también presentes varios lugartenientes de Escobar como alias Popeye, el Mugre y Otto. “Yo no soy su testigo de cargos, doctor Santofimio. Yo sólo digo lo que oí, porque a mí no me consta nada. No vi nada. Es más, yo llego hasta aquí, porque yo no soy sapo. El día que Carlos Oviedo Alfaro hablare, se conocerían muchas cosas: el cinismo del doctor Samper, la verdad sobre el proceso 8.000, la verdad sobre corrupción en el fútbol colombiano. Pero no voy a hablar porque no soy un sapo”, puntualizó.

Según Oviedo, su decisión de contar lo ocurrido el día de la entrevista con Escobar se debe a que alias “Popeye” (cuyo nombre real es Jhon Jairo Velásquez Vásquez) lo abordó algunas de las veces en que compartieron prisión y le dijo que estaba escribiendo un libro sobre Escobar y que iba a incluir en él el episodio de la reunión.

Popeye” fue escuchado por el juez en la audiencia del martes en la cual acusó a Santofimio de ser el autor intelectual del crimen y de ser el enlace entre los extraditables y la clase política del país. En esa misma sesión Santofimio negó los cargos y los atribuyó a una “versión fabulada de los hechos”. (Ver nota relacionada).

El apoderado de Santofimio, abogado Jorge Arenas, ratificó este miércoles las declaraciones de su defendido y dijo que el testimonio de Oviedo lo dejaba tranquilo, porque enfatizaba en que no había sido testigo de un hecho, sino que escuchó una versión. “El dijo que no sabe nada. Eso fue lo que dijo”, recalcó el abogado.

Horas antes de terminar la sesión el juez del caso fue informado sobre una comunicación de los hermanos Rodríguez Orejuela, quienes desde su prisión en Estados Unidos respondieron un cuestionario sobre el caso Galán. Según los Rodríguez, ellos tenían monitoreadas las conversaciones de Escobar desde 1987. Los Rodríguez dicen que un año antes de la muerte de Galán comenzaron a interceptar comunicaciones en las que se hablaba sobre la intención de matar al dirigente liberal, pero que en ninguna de ellas aparece mencionado Alberto Santofimio.