Home

On Line

Artículo

El futuro del proyecto que concede beneficios patrimoniales a los homosexuales depende ahora de la Cámara de Representantes.

SOCIEDAD

Senado aprobó beneficios patrimoniales y sociales para homosexuales

El proyecto pasa ahora a estudio de la Cámara de Representantes, en donde las resistencias las encabeza el presidente de la corporación, Alfredo Cuello. La iniciativa no legaliza el matrimonio gay.

10 de octubre de 2006

En medio de una agitada discusión y con una votación apretada (49-41) el Senado de la República aprobó este martes el proyecto de ley que establece beneficios patrimoniales y sociales para las parejas de homosexuales. La iniciativa, que llevaba cuatro plenarias lista para votación, pasará ahora a estudio de la Cámara de Representantes, en donde el debate promete ser aún más tenso que el del Senado.

El proyecto establece la posibilidad de que los homosexuales que tengan compañero permanente puedan heredar las pensiones o los bienes de su pareja, siempre y cuando los hayan construido conjuntamente. Incluso se faculta a dichas personas para que puedan afiliar a sus compañeros al sistema de seguridad social.

Tales medidas son consideradas por los sectores conservadores y eclesiásticos como un irrespeto a la familia y a los valores tradicionales, razón por la cual lideraron una cadena de manifestaciones que buscaban el hundimiento de la propuesta. Sus estrategias incluyeron marchas pacíficas y argumentadas desde el punto de vista religioso, pero también varias maniobras sucias de sabotaje al proyecto, como la difusión de imágenes fuertes entre parejas del mismo sexo, destinadas a provocar el rechazo de los demás congresistas.

Aún cuando los sondeos previos a las votaciones señalaban que la mayoría del Senado estaba dispuesta a aprobar el proyecto como expresión de respeto por las minorías sexuales y su convicción de que los derechos ciudadanos no dependen de la fe religiosa, algunos congresistas reconocieron que tuvieron que cambiar de opinión por miedo a perder caudal electoral entre los sectores católicos del país.
Luego de que cuatro votaciones anuladas hace una semana (en todas ganaban los defensores del proyecto) y de varios intentos por dilatar su estudio en la sesión de este martes, la corporación votó sin mayores sorpresas, pero con muchas emociones.

“Por el sí 49 votos, por el no, 40”, dijo el secretario general del Senado tras el respectivo conteo. Y el público ubicado en las barras del segundo piso estalló en júbilo. Abajo, en el recinto, los senadores se miraban con la sorpresa que genera el haber dado un paso histórico, así muchos de ellos no lo compartieran. El Partido Liberal, el Polo Democrático, el Partido de la U y Alas Equipo Colombia votaron afirmativamente. Los conservadores encabezaron la oposición pero, cuando se vieron perdidos, su propio presidente, el senador Julio Manzur, dijo que no forzaría más a su bancada para que votara unida en contra de la iniciativa.

El tema de la votación por bancadas no funcionó, porque muchos de los congresistas alegaron la objeción de conciencia para apartarse de las decisiones de su partido. Héctor Helí Rojas (liberal), Jairo Clopatofsky (de la U) y Jesús Bernal Amorocho (Polo Democrático) se separaron de las instrucciones de sus partidos y lideraron el no. Mientras tanto, congresistas como Juan Carlos Restrepo y David Char (Cambio Radical) lo hicieron para respaldar el sí.

Desde el punto de vista formal quedó demostrado que la ventana de la objeción de conciencia creada en la reforma política se convertirá en un obstáculo del cual se pueden valer los congresistas cada vez que deseen desoír las instrucciones de sus partidos. Este precedente puede ser muy grave para el gobierno de cara a los proyectos que tiene pendientes en la agenda legislativa.

En cuanto al contenido propiamente dicho de la iniciativa la enseñanza parece ser que el país está listo para dar cambios drásticos frente a creencias que antes parecían indiscutibles, así siga siendo difícil defenderlas por la relación tan estrecha que tienen con algunos principios religiosos. Queda por ver si la hazaña se reedita en la Cámara o si los opositores se imponen y terminan enterrando el proyecto.