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Un hombre muy ocupado

No contento con ser uno de los músicos más importantes del mundo, Bono es un activista social de las grandes ligas.

Maria Fernanda Moreno
27 de marzo de 2005

Solo hay una persona que puede darse el lujo de decir que ha sido nominado al Óscar, ha ganado un Golden Globe y varios Grammys, se ha sentado al lado de Nelson Mandela, Bill Clinton y Bill Gates, suena como candidato a la presidencia del Banco Mundial, puede ganarse un Nóbel de paz y ya entró en el Hall de la Fama. Su nombre es Paul Hewson, tiene 44 años y todo el mundo lo conoce como Bono, el vocalista del grupo U2.

Su fructífera carrera comenzó a finales de los 70, cuando formó una pequeña banda escolar en su natal Dublín. Pero no se conformó con ser un músico millonario y taquillero. Bono es actualmente el defensor número uno de los países pobres y de las causas sociales.

Bono el activista

Él confiesa que su interés por África y otros países tercermundistas comenzó en 1984, cuando participó en un concierto de beneficencia en Etiopía. En un receso, mientras los demás músicos descansaban en sus camerinos o compraban regalos, él se fue a recorrer las calles con su esposa, Alison Stewart. Allí notaron la pobreza extrema en la que vivía la gente. Al acabar el concierto, ambos viajaron a Wello, en el mismo país, donde trabajaron en un orfanato por seis semanas.

Lo que pudo ser visto como una necesidad extrema de publicidad, se convirtió en la apuesta del músico durante las últimas dos décadas: lograr que los más poderosos se involucren en causas sociales y que los países más ricos no sean ajenos al drama de los pobres.

Dentro de esa cruzada ha abogado frente al Banco Mundial y la Casa Blanca por la condonación de la deuda a las naciones menos desarrolladas. Además ha logrado que Bill Gates, el hombre más rico del mundo, haga multimillonarias donaciones a programas de asistencia y construcción de orfanatos y escuelas. También ha recorrido varias veces África. Él sabe que su poder mediático puede representar atención y movilizaciones en torno a su causa. La última gran gira la hizo al lado de Paul O'Neill, ex secretario del Tesoro estadounidense, quien destacó el poder de convocatoria del cantante, su conocimiento de la situación y sensibilidad.

A principios de 2004 creó, en compañía de otros músicos, 'Debt, Aids, Trade in Africa', un proyecto que busca difundir los tres problemas que azotan con mayor fuerza al continente: la deuda, el libre comercio y el sida. Para combatir esta enfermedad trabaja de la mano con el ex presidente surafricano Nelson Mandela.

Sus logros lo han convertido en un activista reconocido. A finales de enero, Bono estuvo en Davos, Suiza codeándose con los más poderosos en el Foro Económico Mundial. Su conocida arrogancia le permitió regañar en público al premier inglés Tony Blair y a otros mandatarios por su indiferencia con el Tercer Mundo. "Deben actuar para ser recordados por algo más que la guerra contra el terrorismo", lo increpó frente al micrófono.

Bono, sin duda, será recordado por mucho más. Hace dos semanas anunció la creación de una línea de ropa llamada 'Edún'. La noticia no le hubiera dado la vuelta al mundo si fuera la estrategia que repiten una y otra vez los artistas para tener una fuente adicional de dinero o influir a los adolescentes para que se vistan como ellos. Lo novedoso de Edún es que será confeccionada por trabajadores de países como Perú y Túnez. Según Bono, su propósito es generar empleo y promover el comercio.

Por todo esto, Bono fue nominado por segunda vez (la primera fue en el 2002) al Premio Nóbel de Paz. Esta vez compite con 166 candidatos, entre los que se encuentran el papa Juan Pablo II y Collin Powell, ex secretario de Defensa de Estados Unidos. "Ser astro del rock es más que suficiente", respondió el artista con una modestia inusual después de que un periodista le preguntara sobre la posibilidad de ganar el premio.

Además, hace poco el periódico 'Los Angeles Times' lo postuló como el próximo presidente del Banco Mundial. "Bono es un profundo conocedor de los problemas de las naciones menos desarrolladas del mundo", argumentó el diario estadounidense justo dos meses antes de que el presidente del organismo, James Wolfensohn terminara su mandato. Sin embargo, es poco probable que el músico logre ocupar el cargo. El elegido es normalmente un estadounidense con experiencia en Wall Street o en el gobierno. Y Bush ya nombró su candidato.

Bono el músico

Bono fue conocido primero como un talentoso músico que rompe todos los records de ventas desde que su banda U2 fue creada hace 28 años. En ese entonces se llamaron 'Feedback' y luego 'The Hype'. En 1978 optaron por el nombre de 'U2' (Tú también). Un año después ya eran conocidos en Irlanda, cuando lograron posicionar en la radio su primer sencillo sin el apoyo de una disquera. Al poco tiempo lograron el aval y sacaron 'Boy', con el que comenzaron a llenar estadios dentro y fuera de Irlanda. Luego vinieron 'War', 'Joshua tree', 'Achtung baby', 'Zooropa', 'Pop', 'All that you can leave behind' y 'How to dismantle an atomic bomb', lanzado hace 4 meses, con el que demostraron que están más vigentes que nunca.

"El reto es ser más grandes, más atrevidos y mucho mejores, para hacer canciones que todo el mundo escuche", dijo Bono en recientemente, después de saber que 'Vertigo', el primer sencillo de su último álbum, llegó al primer lugar en las carteleras de Estados Unidos y el Reino Unido.

Además, hace dos semanas lograron entrar al Salón de la Fama del rock, un reconocimiento al que aspiran todos los músicos.

Hasta ahora, U2 ha vendido 125 millones de discos en todo el mundo. Ha ganado varios grammys y es catalogada como una de las bandas más poderosas del mundo, al lado de los Rolling Stones, Los Beatles y The Pretenders. La diferencia es que la banda de Bono todavía sigue agotando entradas a conciertos enteros en menos de una hora -como sucedió en febrero en Viena-. Pero no será por eso que Bono, el músico de los pobres, será recordado.