Home

On Line

Artículo

Según el presidente, la verdad que debe saber el país no es sólo sobre los vínculos de políticos con los paramilitares, sino también sobre "lo que pasó con el M-19".

Uribe dice que no hubo fraude en su campaña

El candidato-presidente desestima acusaciones de ex jefe de informática del DAS que asegura que las autodefensas de Magdalena le pusieron 300 mil votos en las elecciones presidenciales de hace cuatro años. Fiscal ordena a fiscal delegado indagar si hay mérito para investigar a Jorge Noguera.

Élber Gutiérrez Roa
4 de abril de 2006

Dos días después de que Semana revelara apartes de la indagatoria de Rafael García -el  ex jefe de informática del DAS que aseguró ante la Fiscalía que la primera campaña presidencial de Álvaro Uribe tuvo alianzas con paramilitares de la Costa-, el ahora candidato presidente le restó importancia al hecho señalando que no se le puede creer a una persona que está investigada.

“La persona que hizo esas denuncias está en la cárcel. Son palabras de alguien que está en la cárcel porque fue denunciado por el anterior director (del DAS)”, dijo este martes Uribe en un foro al que asistió como candidato.

García, quien es procesado por borrar y modificar las bases de datos con las órdenes de captura de seis narcotraficantes cuando se desempeñaba como jefe de informática del DAS, está preso desde el 27 de enero de 2005. Tras ser acusado de seis delitos decidió colaborar con la justicia, acogerse a sentencia anticipada y prender el ventilador sobre los actos de corrupción en la entidad durante el tiempo en el que el DAS estuvo a cargo de Jorge Noguera, hoy cónsul en Milán.

En una de sus declaraciones, García aseguró que la infiltración paramilitar en la administración pública llegó a tal punto que el bloque Norte de las Autodefensas fraguó un fraude electoral “de proporciones gigantescas” para imponer candidatos al Congreso en la Costa Atlántica y para apoyar al presidente Álvaro Uribe durante las elecciones de 2002.  La campaña de Uribe en ese departamento era dirigida por Noguera, quien al asumir la conducción del DAS nombró a García como jefe de informática. Tras los escándalos de corrupción y la detención de García, éste aseguró que le demostrará a la justicia que Noguera es corrupto y que sostiene nexos con alias Jorge 40 y otros paramilitares.

En lo que respecta a las elecciones presidenciales, García sostiene que el fraude se repitió en Magdalena, Cesar, Córdoba y Guajira, “aportándole al candidato Uribe unos 300 mil votos sin los cuales no hubiera ganado en primera vuelta”. 
 
Efectivamente, Uribe logró  5.862.655 votos equivalentes al 53% de la votación para las elecciones presidenciales de 2002, con lo cual accedió al cargo sin necesidad de segunda vuelta. Si a esa votación se le restan los 337.085 votos que sacó en Magdalena, Córdoba, Cesar y Guajira, habría tenido que disputar el cargo en segunda vuelta con Horacio Serpa.

Semana.com consultó con la Casa de Nariño, cuya oficina de prensa dijo que la sede presidencial no emitirá comunicación oficial sobre el tema, pero informó que Uribe sacó 113.812 votos en Magdalena, con lo cual es imposible que haya recibido 300 mil votos en ese departamento. Dicha cifra coincide con los datos de la Registraduría Nacional, en donde aparece además que el candidato liberal Horacio Serpa perdió en Magdalena por estrecho margen, pues obtuvo 105.205 votos.  Sin embargo, la versión de García se refiere a los 300 mil votos de la Costa y no solo a los de Magdalena.

Además, el 66% de los votos de Uribe en Magdalena fueron en los mismos municipios con presencia paramilitar en los que congresistas como Dieb Maloof y Luis Eduardo Vives, expulsados del uribismo por su supuesta relación con autodefensas, lograron concentración de electores. Sólo el 34% restante lo obtuvo en zonas ubicadas por fuera de esos `distritos electorales´. En el caso de Serpa la tendencia fue a la inversa. El 31% de sus votos fueron en las zonas de dominio `para´ y el 69% por fuera de ellas.

Horas después de que la Casa de Nariño dijera que no habría comunicados sobre el particular, Uribe decidió ponerle el pecho a la brisa y aunque no se refirió  específicamente al caso de los supuestos 300 mil votos, descalificó de manera general la declaración de García. El presidente también hizo una defensa de la labor de inteligencia del DAS y dijo que si hubo actos de corrupción durante el periodo de Noguera, hay que colaborar con la justicia para que los investigue.

Noguera, entre tanto, guarda silencio sobre las acusaciones que sobre su proceder como jefe de campaña de Uribe y como director del DAS le hizo su ex amigo García. Según le dijo a la revista Cambio, cree que lo que diga puede ser tergiversado por la prensa.
 
El jueves, el fiscal Mario Iguarán ordenó a un fiscal delegado ante la Corte Suprema iniciar averiguaciones para determinar si había méritos para abrir una investigación contra Jorge Noguera.

Fraude en el Congreso

La descripción que García hace del fraude para las elecciones de Congreso coincide en dos aspectos con los resultados de la investigación adelantada por Claudia López y divulgada por Semana.com desde el año pasado: Compromete a los mismos departamentos (Cesar, Magdalena y Bolívar) y hace énfasis en que los candidatos respaldados por los paramilitares tuvieron votaciones concentradas que en algunos casos van del 80% al 90%.

Según García, el fraude en Magdalena fue planeado con la participación de Noguera, quien se habría entrevistado como jefe de campaña de Uribe en ese departamento con el hoy desmovilizado capo de las autodefensas conocido como `Jorge 40´.  La declaración del ex funcionario señala que los encuentros con capos de las autodefensas e intermediarios de éstas se repitieron en el despacho de la dirección del DAS cuando Noguera fue nombrado en esa entidad.

La investigación de López señala que Magdalena fue repartido por los paramilitares en tres distritos electorales en los cuales parejas de candidatos a Senado y Cámara obtuvieron votaciones exageradas. En el sur arrasaron el representante Jorge Caballero y el senador Salomón Saade; en el occidente el representante Alfonso Campo Escobar y el senador Luis Eduardo Vives lograron concentraciones hasta del 80%; y en el centro el senador Dieb Maloof y el representante José Gamarra tuvieron concentración de votos hasta del 93%.

En el distrito central Uribe barrió a Horacio Serpa al obtener 34.420 votos contra 4.588 del candidato liberal. En el occidental, Uribe también ganó con 20.230 votos frente a 15.271 de Serpa. Y en el distrito sur Uribe obtuvo 20.113 votos contra 12.632 de Horacio Serpa.

Para el senador Dieb Maloof lo que hay detrás de todo es una campaña de estigmatización de personas y de regiones. Maloof logró mantener su curul gracias a un movimiento propio tras ser expulsado del uribismo por supuestos nexos con los paramilitares y distanciarse del gobierno al que inicialmente defendía. “Si los votos que nosotros obtuvimos en la región son malos los del presidente también deben ser malos, porque el mismo trabajo que hicimos nosotros lo hizo él. Estoy seguro de que los nuestros son buenos, lo que pasa es que nos quieren estigmatizar”, respondió en su momento al ser interrogado sobre la relación de sus votos con los del Jefe de Estado.

Aunque el Jefe de Estado le echó agua fría al debate sobre el origen de sus votos en la Costa, la investigación por corrupción en el DAS tiene otras aristas que parecen comprometer a su ex gerente de campaña en Magdalena. García dice estar dispuesto a contar muchas cosas y no se sabe qué curso pueda tomar el proceso, pero ya puso a hablar hasta al presidente sobre el tema.