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POLÍTICA EXTERIOR

Uribe no se sumó al Consejo de Seguridad de Sur América

Aunque el gobierno colombiano aceptó integrar un grupo de estudio para la creación del Consejo de Seguridad de Unasur, propuesto por el Presidente de Brasil, el presiente Uribe dijo que por el momento Colombia no lo integrará.

23 de mayo de 2008

Con la firma del tratado de creación de la Unión de Naciones Suramericanas, los mandatarios de los 12 países de América del Sur se comprometieron a trabajar para fortalecer la región. A la cita asistieron los mandatarios de Ecuador, Venezuela, Colombia, Perú, Chile, Brasil, Paraguay, Argentina, Guayana y Surinam. Uruguay envió a su vice presidente Rodolfo Nin Novoa.

La reunión se iba a realizar en Cartagena pero con la crisis que se desató entre Colombia, Ecuador y Venezuela por el ataque en territorio ecuatoriano, donde cayó abatido el guerrillero de las Farc, Raúl Reyes, la reunión fue postergada y terminó celebrándose en Brasilia. 

Los mandatarios acudieron al Centro de Convenciones Ulysses Guimarães, y fue el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva el encargado de dar la bienvenida al acto inaugural. En su discurso hizo un llamado a la unidad entre los países del hemisferio y buscando bajarle el tono al conflicto diplomático entre Ecuador, Venezuela y Colombia dijo: "Los gobernantes de la región sabemos que los contenciosos actuales (...) son pasajeros" y que "juntos somos más soberanos".

Michelle Bachelet, presidente de Chile, asumió a partir de hoy y por los próximos seis meses la presidencia del bloque, luego de que el presidente Uribe hubiera declinado esta proposición por la cirsis surgida con sus vecinos. En su discurso la presidenta chilena dijo que era necesaria la integración física de la región como "una herramienta muy fuerte en nuestro desarrollo" a través del intercambio comercial entre los países. Según cifras presentadas por Bachelet, el comercio intrarregional tiene un índice muy bajo, de 17% del total del intercambio de los países, comparado con el de la Unión Europea que es de 66%, y el de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) que es de 28%.

A pesar de que el tratado se firmó, para que entre en vigencia debe ser aprobado por los congresos nacionales. El documento define la estructura del bloque, tres Consejos (de Jefes de Estado, de cancilleres y de delegados) y con sede permanente en Quito. También incluye la propuesta de creación de un Parlamento Sudamericano, cuya sede sería Cochabamba, Bolivia.

Otro de los temas claves que se discutieron en Brasilia fue la idea del presidente Luis Inázio Lula de Silva de crear un Consejo de Seguridad que permitiera el intercambio de miembros de la fuerza pública y acciones militares coordinadas entre los países del bloque.

El presidente colombiano Alvaro Uribe había manifestado desde antes de que empezara el encuentro que el no era partidario de la propuesta, porque Colombia tenía un conflicto armado de más de 40 años y tenía que enfrentar una amenaza permanente del terrorismo.

Luego de que finalizó la reunión el gobierno colombiano emitió un breve comunicado donde expresaba que aunque no podía hacer parte del Consejo de Seguridad Conjunta de Suramérica, no se oponía a la creación de un grupo que estudie le tema en los próximos 90 días, y que nombrará a alguien para esa misión.

Luego de conocer el comunicado del gobierno colombiano, el presidente ecuatoriano Rafel Correa dijo: "yo creo que la integración en todas sus dimensiones no tiene que ir a la velocidad del más lento, del que no quiere la integración, sino a la velocidad de los que queremos la integración".

Por otro lado, antes de finalizar la cumbre, el presidente Chávez le dio la mano a su homólogo colombiano y le expresó su voluntad para que trabajen cooperadamente y se recupere la confianza perdida por la crisis. "Conversamos un rato, hemos ratificado nuestra voluntad de paz, de respetar las diferencias. Fue una conversación de varios minutos, muy distendida, relajada", dijo Chávez.