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Costo de carreteras por kilómetro: de 116.000 dólares a 1.2 millones

En México un kilómetro de carretera tiene un costo de dosmillones de dólares, en Perú de 900,000 dólares y de un millón de dólares en Argentina y Bolivia

Giovanni Reyes, Giovanni Reyes
9 de octubre de 2013

En Colombia, la noticia la ha dado Radio Caracol, el último día de septiembre (véase también infobae.com). El mensaje es contundente: mientras que en Alemania un kilómetro de carretera cuesta 116,000 dólares, en América Latina el total de costo promedio se eleva a un millón doscientos mil dólares.  

Esto es particularmente importante en una región que se ve asediada por dos factores que operan al respecto: (i) una urgente necesidad de contar con vías de acceso, con infraestructura física que posibilite mercadeo y  competitividad; y (ii) recursos públicos escasos; de lejos más escasos que los recursos con los cuales cuentan los países Europeos aún en medio de la recesión que enfrentan.

Desde luego que también dentro de Europa se presentan matices. Mientras que Alemania tiene un costo relativamente barato, como el ya señalado, en España el kilómetro de carretera es casi el doble de la cuota alemana: 215,000 dólares.  Uno de los aspectos que se señala como potencial causante, es que en la plaza germánica se tiene un acceso más abierto en la presentación de ofertas y –con calidades comparables- gana la oferta más económica. En España en cambio las empresas que participan deben contar con previas autorizaciones por parte del gobierno.  

Según el reporte, en Latinoamérica adquiere notoriedad cómo en México, un kilómetro de carretera llega a ser de dos millones de dólares, mientras que en Perú el costo sería de 900,000 dólares, y de un millón para el caso de Argentina y Bolivia.  Estarían influyendo normativas específicas, reglamentos de conformidad con nuevos sistemas de comunicaciones y de construcción; pero también es de puntualizar que la región tiene mano de obra más barata que la europea.

En todo caso el tema es muy importante dado que el contar con infraestructura física adecuada, permite la competitividad de un país en la atracción de capitales productivos en la economía real, esto es la economía que genera bienes, servicios y empleo.  Otros factores que también operan en el fortalecimiento de procesos de producción son: (i) estabilidad política; (ii) estabilidad macroeconómica; (iii) estado de derecho y fortalezas institucionales; (iv) cultura del trabajo; además de (v) capacitación de recursos humanos.

¿Se tiene en el caso español -de manera similar a las condicionantes latinoamericanas- contextos que se prestan a que en las transacciones públicas se deslicen elementos de ineficiencia del sistema, tales como favoritismo, resultados preestablecidos, sobornos, nepotismo, o abierta corrupción en el manejo de los recursos del Estado?  Es posible, el estudio hace ese tipo de señalamientos.  Cuando en los países se tienen culturas que -sin contar con sabidurías ancestrales- de manera genérica no fueron afectadas por la Ilustración, se tienden a hacer evidentes rostros de modernidad o post-modernidad distorsionada, progresos de fachada que se atascan en pantanos disfuncionales al momento de rendir resultados.  

Existen casos en que se impone la “lógica de la viveza”, el avivato, los logros que se alcanzan mediante atajos, cuidando escrupulosamente de que los esfuerzos sean mínimos, sin importar si con ello se violan o no reglamentos, descuidándose incluso, la ética del trabajo y del esfuerzo.

*Ph.D. University of Pittsburgh/Harvard. Profesor de la Escuela de Administración de la Universidad del Rosario.