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Los puntos del memorial de agravios de Uribe que nadie ha publicado

El documento inicial contenía 100 puntos, pero que el exmandatario dejó 33 sin leer porque tuvo que irse a embolar los zapatos.

Daniel Samper Ospina, Daniel Samper Ospina
9 de mayo de 2015

Impresionante resultó el memorial con 77 puntos que el expresidente Uribe presentó ante la Corte Suprema de Justicia, pero más impresionante aún es la noticia de que se trataba de un documento truncado, casi como la aspiración a la Alcaldía de Pachito Santos.

Efectivamente, la Unidad Investigativa de esta columna estableció que el documento inicial contenía 100 puntos, pero que el exmandatario dejó 33 sin leer porque tuvo que irse a embolar los zapatos. Acá los presentamos de manera exclusiva:

78. Jamás pedí a Yidis que se pusiera de rodillas en baño o bidé. Yidis sí orinó en la matera, y eso constituye daño en propiedad ajena, pero Corte Suprema no hizo nada por estar permeada por terroristas FARC. (Al igual que la matera, que también resultó permeada).

79. He procedido con pulcritud. Jamás hice mis necesidades en uno solo de los ríos de la patria.

80. Jamás he dado trato de sirviente al doctor Francisco Santos, y eso lo puede certificar él mismo, una vez me suba el desayuno.

81.
Inducidos por enemigos del gobierno que necesitaban prefabricar un escándalo, mis hijos compraron lote a precio de huevo en terrenos que posteriormente fueron declarados como zona franca. Mis enemigos los volvieron multimillonarios para hacer daño a mi gobierno.

82.
He sido persona proba, siempre aplacé el gustico con la doctora Clara López y de eso puede dar fe ella misma o el doctor Romero.

83. A diferencia de este gobierno derrochón, en el nuestro hubo austeridad. Nuestra política de recortes alcanzó incluso al esmoquin que me puse para visitar a los reyes de España. Si ya posteriormente ordenamos gastos extras en creación de notarías o nuevos puestos estatales, fue en aras de los intereses superiores de la patria.

84. Durante nuestro gobierno los periodistas nunca fueron espiados en su intimidad, como falsamente decían algunos de ellos cuando conversaban en la cama con su esposa. Tenemos la prueba grabada de que lo hacían. Que no lo nieguen ahora. (El doctor José Obdulio Gaviria, intelectual respetable, ordenó grabar únicamente un concierto de Ray Conniff, porque adora la música clásica).

85.
Luis Carlos Restrepo, mente esclarecida de la patria, hizo montaje escénico que en cualquier otro país le habría valido un Globo de Oro. Pero acá, amigos de narcoguerrilla FARC, lo estigmatizaron por ser encarnación de la ternura uribista.

86. Jamás he estigmatizado como terroristas FARC a esos miembros de la social bacanería que trabajan para terroristas FARC, como el nobel Pérez Esquivel, o el periodista Coronell, o papa Francisco.

87.
Nunca le he dado en la cara a nadie de la comunidad LGTBI.

88.
Yo no desportillé orinales del aeropuerto de Vichada.

89.
En mi gobierno siempre se respetó la vida de los campesinos, estuvieran o no recogiendo café.

90. En trifulca reciente con rufián de barrio, saqué peinilla, empero se trataba de una peinilla de peinar, que quería prestarle a la senadora Paloma Valencia, mujer sobresaliente, porque soy hombre de paz.

91.
Senadora Valencia está en todo su derecho de retirar obstrucciones en sus conductos nasales durante las plenarias del Congreso.

92. Cuál mi asombro, la peinilla no sirvió después para peinar a alias la Mechuda, intelectual impoluto.

93.
El gobierno castrochavista de Barack Obama apoya diálogos de La Habana para que sus agentes se entreguen al turismo sexual allá, como lo hicieron en Cartagena con las prostitutas de la patria.

94.
Siempre he respetado carnitas y huesitos. Jamás visité ni recomendé página porno ‘Chicas lindas VIP’, de clara orientación comunista.

95.
A la doctora Lucero Cortés, personalidad pura de la patria, los magistrados, comprobados mitómanos, le cobraron que hubiera bailado conmigo al ritmo de una tuna. ¡Pero de qué puedo quejarme si enemigos me indujeron a bailar el Aserejé cuando yo no tengo oído ni para oír grabaciones del hacker!

96. Congresistas que introdujeron cambio de articulito lo hicieron a mis espaldas para dar la idea de que nuestro gobierno era una dictadura disfrazada de democracia.

97. La Seguridad Democrática tuvo entre sus fundamentos, de corazón y de alma, la protección de sindicalistas, por cuyas almas rezamos.

98. He sido hombre piadoso, creo en el padre Marianito y el santo Job.

El sótano es una vía de acceso como cualquier otra, no se comprende persecución a funcionarios correctos de mi gobierno por haber hecho discreto uso de ella.

99. Parapolítica ya existía antes de que yo llegara al poder. Al igual que costumbre de espiar opositores. O nombrar a gente como Salvador Arana, hombre probo, en el servicio exterior. O asignar subsidios a terratenientes millonarios. O tomar tinto sobre potros.

100. Por último, el doctor Óscar Hernán Zuluaga (sic) tenía sus propios votos, él no era ningún títere que repetía mis órdenes, como bien lo dijo en un debate. Tras recibir mi orden.

Eso es todo por ahora. Siempre he respetado la justicia. Volveré con nuevos puntos cuando requiera de nueva embetunada.