Harry Potter y el primer año de Uribe

Más grAfico no podIa ser el 'fotomontaje' del último número de SEMANA, en el que el novato ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, aparece disfrazado de Harry Potter, y el presidente del Banco de la República, Miguel Urrutia, de profesor Dumbledore. El tema: la magia utilizada por el actual gobierno para hacer aparecer un hueco fiscal, luego para hacerlo desaparecer, y ahora para obligar al Banco de la República a que produzca plata sin que incurra en la palabra fucú: emisión.

También a la magia le atribuye el periódico Portafolio, en un excelente análisis, la explicación de la misma cadena de sucesos, que podrían resumirse de la siguiente manera:

A comienzos de julio el subdirector de Planeación, Alejandro Gaviria, revela la aparición de un hueco fiscal de 2,5 billones de pesos.

Con sorpresa entendimos que a pesar de la dura reforma tributaria que el nuevo gobierno nos 'clavó', además del impuesto sobre el patrimonio, estábamos igual de mal que hace un año.

El Contralor fue el más sorprendido: públicamente dijo que no tenía las cifras para medir el tamaño del hueco.

A todas estas, el ministro Carrasquilla guardaba silencio, mientras iba y venía de Washington a Bogotá.

El presidente Uribe no sólo salió a confirmar el oscuro panorama, sino que anunció que habría que anticipar el IVA y aumentar su tarifa, e imponerle nuevos bonos al sector privado. También anunció un impuesto a las pensiones. Se alcanzaron a escuchar pasos grandes de una nueva reforma tributaria.

Y por fin habló el Ministro de Hacienda, anunciando una nueva sorpresa: el hueco ya no era de 2,5 billones sino de 3,3.

A los pocos días se había vuelto de 3,7.

Fue tal el desconcierto general, que el Presidente tomó la decisión de bajarle el tono a la crisis. Desmontó su propuesta de adelantar el IVA y de incrementar su tarifa. Mantuvo la propuesta de gravar las pensiones.

Y el ministro Carrasquilla fue el encargado de anunciar que tampoco habría reforma tributaria.

Para el día del Consejo televisado de Ministros, mágicamente el hueco había descendido de 3,7 billones a un billón de pesos, sin que el gobierno hubiera movido un dedo para remediarlo.

¿Y entonces, por qué tanta 'alharaca'?

El ex ministro de Hacienda Ruddy Hommes, no le atribuye a la magia la aparición y desaparición del hueco fiscal. Según él, el problema principal proviene del gasto militar. Entre 2002 y 2003 hubo un aumento de 1,8 billones de pesos y en 2004 se le darán otros 800.000 millones a Defensa. Pero a alguien (?) se le olvidó incluir, en el programa acordado con el FMI, el aumento del gasto de Defensa de 2003. Eso explicaría la existencia de 1,9 billones del tamaño del hueco, y el resto provendría del desfase del Seguro Social, agravado por el hecho de que el Banco de la República no podrá cederle al gobierno utilidades tan jugosas como las del año pasado.

Si hubiera que calificar en este primer año las acciones del presidente Uribe, yo le daría la peor calificación al manejo económico, porque a este respecto el actual gobierno -como lo demuestra el episodio del hueco- ha sido errático, confuso, poco sincero e incapaz de generar el elemento que el propio Presidente ha señalado para salir de esta crisis: confianza.

Pero lo que queda claro, además, es que la aparición y desaparición del hueco fiscal tiene una relación íntima con el gasto militar. Los colombianos generosa y pacientemente nos hemos echado la mano al dril, y a la Ministra de Defensa la ha premiado la opinión con altos índices de popularidad.

Pero los sacrificios se hacen a cambio de efectividad. El analista de temas de orden público, Alfredo Rangel, acaba de revelar un dato muy preocupante sobre el tema. Según un análisis de su Fundación Seguridad y Democracia, si bien reconoce una disminución en la tasa de secuestros y de homicidios, denuncia que no se compagina el aumento de la actividad de nuestras Fuerzas Militares con el aumento de su efectividad. En otras palabras, el Ejército tiene más plata, se mueve más, pero funciona menos.

Por eso, mientras al manejo económico del gobierno lo rajaría, al manejo del orden público lo dejaría bajo intensa observación. Durante el primer año de Uribe le hemos dado un gran apoyo a su estrategia de seguridad. Pero en el segundo año el país no será tan paciente.

Al Ministro de Hacienda le funcionó la magia de Harry Potter para hacer desaparecer el hueco. ¿Le servirá un poco de esa magia a la ministra de Defensa, Marta Lucía Ramírez, para hacer aparecer resultados?