Las Autodefensas

Con la renuncia de Carlos Castaño y el nombramiento de una nueva cúpula militar al interior de las Autodefensas unidas de Colombia, me confirman que aquí lo que hay es un proceso de fortalecimiento de la unidad de las AUC, que hoy son una realidad, ya que hay muchos colombianos que ven en las Autodefensas como la única esperanza de salvación de un país amenazado por el terrorismo, secuestro y extorsión subversiva.



Yo pienso, que es fundamental y vital para el proceso de paz que se mantenga la unidad al interior de las Autodefensas, ya que no me quiero imaginar unas autodefensas totalmente descarriadas y sin control alguno. Ellos han evolucionado mucho frente a las diferentes problemáticas del país, hay muchos sectores de las Autodefensas que se han capacitado y se han profesionalizado mucho para contribuir a la solución de los problemas del país y sobre todo para disminuir sus propios errores. Para mi, ellos han llegado a un alto grado de madures política, militar y social. Dicen que de los errores también se aprende, pero si siguen con las masacres y matando inocentes van a terminar igual o peor que la guerrilla, desprestigiados y despreciados por el pueblo colombiano y nunca se acercarían a ese lugar privilegiado en el país y en la historia de Colombia.



Ellos representan un riesgo político y militar para las guerrillas, acelerando el fin de la guerra y el principio de la paz. Yo tampoco me quiero imaginar un país sin Autodefensas (no estoy haciendo apología de ellas). Para nadie es un secreto que ellos han recuperado muchas regiones y territorios, han normalizado socialmente y han impulsado el desarrollo económico y social de estas zonas, donde la guerrilla había destruido el tejido social y arruinado la economía.



Mi experiencia como ex intermediario entre los grupos de Autodefensa y los gobiernos pasados, me han convencido totalmente de que el Gobierno que quiera conseguir una verdadera reconciliación entre nosotros los colombianos debe llamar a las Autodefensas Unidas de Colombia en el momento indicado a una futura mesa de negociación.



* Dirigente liberal del Magdalena Medio.