Caldas por fuera de proyectos Zomac

Todo parece indicar que tal determinación tiene revancha de tintes politiqueros, puesto que el 11 de marzo, día de las elecciones para Congreso y consultas interpartidistas, los municipios caldenses que habían presentado proyectos Zomac obtuvieron mayoría por el Centro Democrático.

Los Zomac fueron creados por decreto 1650 del 2017, con el fin de incentivar proyectos productivos en 344 municipios del país -zonas afectadas por la violencia-. Para el departamento de Caldas se incluyeron nueve municipios, un día antes del cierre -14 de marzo-, después de agotar todos los recursos y requisitos exigidos por los organismos competentes, injustificadamente fueron descalificados por funcionarios y delegados departamentales de Planeación Nacional, D.N.P.    

El municipio  que más dinámica puso para lograr los objetivos prometidos con el Decreto Zomac fue Pensilvania. Con su alcalde a la cabeza desplegó toda una actividad logística, técnica y programática, tanto con la empresa pública como privada, generando 10 proyectos de  innovación dentro del sector rural y manufacturero; posteriormente en reunión con los agentes del Departamento Nacional de Planeación y Delegados Departamentales, se optó reducirlos a cinco, siendo viabilizados, con asignación  del PIN. 

Es de anotar que los proyectos estaban soportados por las normas jurídicas, legales y medioambientales que deben regir sobre el particular, con las posibles metas de desarrollo calculadas de conformidad con los nueve eslabones de cadenas productivas y alianzas estratégicas, lo mismo que con los canales de comercialización para efectos de proyectos agroindustriales.

Los caldenses necesitamos saber con prontitud y exactitud qué fue lo que realmente pasó con los proyectos Zomac, para los nueve municipios caldenses: Anserma, Belalcázar, Marulanda, Norcasia, Palestina, Pensilvania, Riosucio, Risaralda y Samaná; que aunque no todos presentaron iniciativas el caso de Pensilvania es emblemático, puesto que a través de algunos medios de comunicación hemos hecho seguimiento a varios de ellos y no encontramos justificación alguna para que, después de estar viabilizados, con asignación: PIN, la víspera del cierre salgan con la peregrina respuesta de que fueron descalificados.

Casos como estos causan indignación y frustración en las comunidades. Se tiene la clara tendencia de que algo anómalo ocurrió, por lo tanto, los organismos de control deben iniciar de inmediato exhaustiva investigación para saber toda la verdad sobre lo ocurrido y que los funcionarios responsables sean sancionados.

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