¡Día internacional de la mujer!

Colombia es uno de los países con mayores índices de feminicidios, abandono y maltrato a la mujer; la mayoría de los casos cometidos en las áreas rurales no son denunciados por ignorancia o por temor.

Desgraciado y cobarde el hombre, que utiliza su fuerza bruta, para deshojar los pétalos y  encantos femeninos, maltratando o asesinando al ser más hermoso y sublime, como es la mujer. 

En el día en que se rinde homenaje a la mujer y dada la ola de feminicidios y maltratos que se están cometiendo contra ellas en diferentes regiones del país, es válido entrar en estado de reflexión, para saber qué es lo que está pasando y dónde están las fallas de orden social, moral y legal, para tratar de corregirlas.

Lamentablemente los casos de feminicidios, abusos y maltrato a la mujer,  ocurren en todos los estratos sociales de las regiones urbanas y rurales; hay hechos tan aberrantes que las mujeres callan por temor a sus esposos o compañeros y otros porque tienen que permanecer atadas al yugo de un hogar por amor a sus hijos.   

La mujer es la razón de nuestra existencia, generadora de vida y precursora del género humano desde los inicios de la humanidad, solamente a ellas que son la imagen de nuestras madres, esposas o hijas, les debemos admiración y gratitud, por ser las protagonistas de nuestra existencia y la estabilidad moral y emocional de nuestro diario convivir.

A ellas, les debemos la vida y el estado de ser, como personas pensantes y útiles a la sociedad, si no fuera por la mujer todo giraría en torno a la sinrazón y nuestros ideales se perderían en el ostracismo de las banalidades, puesto que en ellas cuando joviales, está el perfume de la bella flor, y en su madurez la satisfacción del deber cumplido. 

Ad portas de las elecciones presidenciales, los candidatos de las diferentes vertientes políticas, deberían fijar posiciones claras y coherentes, para el ser que todos los días desde que amanece, hasta que anochece, es protagonista de la construcción de las nuevas sociedades y los procesos de desarrollo en las regiones, pero, que lamentablemente en los últimos tiempos viene siendo víctima del machismo ignorante y violento.

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