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¿Dónde están los niños de la guerrilla?

El temor de los comandantes de las FARC y del ELN de liberar a los pocos niños que se encuentran en sus filas es que cientos de ellos han sido asesinados.

Uriel Ortiz Soto, Uriel Ortiz Soto
9 de febrero de 2017

Los señores comandantes, principalmente de las FARC, deberían entrar en razón y, ya que firmaron el acuerdo de paz sin su entrega, deben reunir a los familiares de los que han sido asesinados, pedirles perdón e indicarles el sitio donde se encuentran sus cadáveres, para ser rescatados y darles cristiana sepultura.

Varios los desmovilizados testifican cómo niños y niñas, aun menores de 12 años, al ingresar a las filas guerrilleras se convierten en instrumentos sexuales de los “comandantes” o sirven de carne de cañón para combatir contra las fuerzas del orden que, por lo regular pasan inadvertidos, pero cuando se enteran, los rescatan para entregarlos a Bienestar Familiar.

Como es de público conocimiento, los niños que han sido reclutados contra su voluntad son hijos de humildes campesinos que para salvar su vida y la de su familia han aceptado semejante infamia, so pretexto de que si no lo hacen, sufrirán las consecuencias del desplazamiento de sus parcelas, el asesinato de sus seres queridos y muchas veces la violación de sus madres y hermanas.

Los consejos verbales de guerra contra menores de edad en las filas de la guerrilla son el pan de cada día, siempre terminan con el veredicto de fusilamiento o ahorcamiento, “sentencia” que debe ser ejecutada obligatoriamente por sus compañeros de infortunio.

Por esta razón, los comandantes guerrilleros cobardemente se niegan a hacer entrega de los pocos niños que les quedan en sus filas, puesto que al hacerlo, vendrán los estados de alerta de sus familiares y demás organizaciones nacionales y extranjeras, que los reclaman a todos con insistencia y justificada razón; son varios los movimientos que se están gestando con el fin de esclarecer tan dolorosa situación, que no da más espera.

Una buena fuente para conocer la vida de los niños en la guerrilla son los exsecuestrados; quienes han publicado sus memorias siempre dedican capítulos de horror, terror y muerte, de los menores de edad en las filas de la guerrilla, por eso, considero que también deberían ser una fuerza de presión para exigir a los “comandantes” guerrilleros que los liberen cuanto antes, o informen a sus familiares el lugar donde se encuentran sus cadáveres.

urielos@telmex.net.co

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