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Fals Borda: entre ciencia y política

Semana
12 de agosto de 2008

 

Ha muerto el padre moderno de la sociología en Colombia: Orlando Fals Borda. El padre fundador hemos convenido en que es Salvador Camacho Roldán (1882).
 
Todos los egresados de sociología de la Universidad Nacional llegaremos este miércoles al Virginia Gutiérrez, de cuerpo presente o en espíritu, a rendir un adiós al anciano de la tribu.
 
Para algunos, sin embargo, Fals Borda era un anciano ajeno. Respetado y querido, pero no seguido.
 
Si la sociología colombiana extravió un tanto su vocación científica por los imperativos de la política, su padre moderno es el paradigma, aunque no el responsable principal.
 
Ajeno porque en 50 años no se produjo un anciano científico "contemplativo", desligado de la acción, que habría sido el símbolo de la tradición minoritaria, insular, en la sociología nacional.  
 
Yo tendré un pensamiento ante su féretro:
 
"Si hubiéramos continuado el espíritu internacional y la producción de investigación de los primeros 10 años de la facultad de sociología, todo habría sido distinto.
 
Lo derrotaron y lo sacaron en 1969, y entonces comenzó la larga etapa de la ideología y la política por encima de la ciencia, que terminó representando"
 
 El profesor Fals Borda era un mito viviente. El discurso espontáneo y romántico de homenaje de un estudiante en el congreso de sociología de 2007, y los aplausos de sus compañeros, mostraron la huella profunda que dejaba en una comunidad que, en general, no lo lee.
 
No era necesario leerlo. El profesor Fals Borda más que una función de influencia intelectual y académica, cumplía una función totémica.
 
Entonces nuestro vacío es enorme, "en todo caso".