No basta con el retiro de generales ...
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Estuvo muy bien que el Ministro de Defensa creara una comisión de militares para que realizara rápidamente una investigación administrativa y operacional sobre las denuncias de ejecuciones ‘extrajudiciales’.
Y también que el Presidente de la República tomara la decisión de retirar a los oficiales y suboficiales comprometidos por las evidencias halladas por dicha comisión.
Pero tal vez este sea el momento para hacer algo más de fondo: evolucionar todavía más la Doctrina Lleras sobre las relaciones entre el gobierno (civil) y las fuerzas militares.
En 1958, Alberto Lleras, con una claridad admirable, resolvió un problema muy serio del que veníamos, más o menos con estas sencillas palabras: “Que las Fuerzas Armadas no se metan en política y que los políticos no se metan en el manejo de las Fuerzas Armadas”.
En 1991 volvieron los ministros de Defensa civiles y se nombran viceministros y secretarios generales civiles, pero parecería que todavía falta mayor participación de los civiles en el “manejo” de las Fuerzas Armadas, especialmente en diseños estratégicos.
El Ministro Santos, hasta donde se sabe, ha llevado herramientas de administración y liderazgo de ‘última generación’ y los resultados se han notado.
Sin embargo, es probable que i) no haya los civiles necesarios con la debida preparación en asuntos militares, y ii) existan asuntos militares ‘intocables’ para los civiles.
Vincular a algunos civiles independientes, eminentes y confiables (no políticos, para usar la terminología de Lleras Camargo) a la comisión ya creada para que profundicen en el sistema de “obtención de premios y bonificaciones por resultados operaciones”, puede ser una oportunidad para sumar más inteligencia a la elaboración de soluciones para las Fuerzas Armadas.
El general Cortés afirmó que en su División “sus hombres son premiados no sólo por muertos en combates, sino por la disciplina, por la obtención de caletas, por las detenciones, por la destrucción de laboratorios, y los incentivos son días de descanso con su familia que es lo que necesita un soldado”.
No basta con retirar generales ni con los procesos disciplinarios y penales; hay que examinar el entramado formal e informal de incentivos que los hizo caer ...
"No hay felicidad completa". Las Fuerzas Armadas nos han dado un avance sustancial en seguridad y la certeza de no estar indefensos ante el chantaje de la violencia, pero nos producen este vértigo de imaginar a jóvenes asesinados para mostrar resultados operacionales.
El Presidente Uribe y el Ministro Santos tienen suficiente autoridad para introducir un mayor ajuste a la Doctrina Lleras, que sigue siendo poderosa y 'bella', como muchas ideas expresadas por Alberto Lleras.
