CARLOS FUENTES

Otro de los grandes escritores  del boom que nos abandona. Su muerte me sorprendió, pues si algo impresionó fue la vitalidad que lució en el “Hay festival” de Cartagena tan solo hace tres meses, pese a su edad. Carlos Fuentes fue el escritor más cosmopolita, culto y lúcido de la pléyade de grandes novelistas latinoamericanos de los años 60 del siglo pasado. Su vida transcurrió entre embajadas y ciudades del mundo, gracias a la vida diplomática de su padre. Sus primeros años de vida no los vivió en México, aun así fue el más Mexicano de todos los escritores del siglo XX de su país.   

Su novela “La muerte de Artemio Cruz “revoluciono la estructura de la novela, pues incorpora la conciencia del protagonista en la narración, le permite entregarnos los hechos desde muchas ópticas en planos superpuestos. Este recurso le permitió jugar con el tiempo, trastocar los hechos lineales e interponer en un mismo texto muchas voces, lo que implica a la vez un esfuerzo para el lector.

Su obra es muy extensa, más de cuarenta libros. A través de la novela narró con absoluto encanto toda la problemática de México y los grandes temas latinoamericanos, sobre todo en sus últimas obras. Sus ensayos son prolíficos y en ellos busca comprender nuestra trágica realidad desde una perspectiva historicista. Al igual que Octavio Paz estaba siempre indagando sobre el proceso de formación de la identidad de su patria y las grandes contradicciones que le rodean. Su obra “El espejo enterrado”, es un buen ejemplo de esta búsqueda.

Pocas personas tenían una conversación tan agradable, en ellas se decantaba el cosmopolita y trashumante hombre de letras con una cultura inconmensurable. Hablaba como un gentleman,  era muy ingles. Su mejor cualidad, el don de la amistad. Gran amigo de Gabriel García Márquez, de Cortázar, Vargas Llosa, en fin de casi todos los escritores del Boom. Fue el primero que preconizo la grandeza de “cien años de soledad”.

Nos queda su obra. Tenía en el tintero varias novelas y estaba trabajando un extenso ensayo sobre la novela Latinoamérica.  El mejor homenaje, leerlo.