Luis Guillermo Angel Restrepo: ¿Calidad en vivienda gratis?

Tanto en Colombia como en América Latina el déficit habitacional sigue creciendo aceleradamente. En América Latina, 120 millones de familias en el año 2010 carecían de una vivienda digna, en Colombia el déficit habitacional afecta a 4,1 millones de hogares, de los cuales el 68.25% son rurales y el 27% urbanos, (El Tiempo Abril 25 de 2012) “Los desafíos del Gobierno con las 100.000 viviendas”. Por ello, la posesión de una vivienda digna es todavía el principal objetivo de las familias Colombianas.
El anuncio del gobierno del Presidente Juan Manuel Santos, no debe constituirse en oportunidad para cuestionar o criticar la iniciativa, al margen de la lectura política, populista o demagógica, por el contrario, es una coyuntura que deben aprovechar los Alcaldes Municipales a través del diseño de un plan de urbanización adecuado para participar a partir del el 1 de julio en la subasta para la construcción de las 100.000 viviendas gratis para los más pobres de Colombia. Quedarse en la controversia sobre la insuficiencia de la oferta en comparación con la demanda es solo una obstinación que conlleva a la incertidumbre, aunque la oferta se encuentra por debajo de las 350 mil viviendas establecidas en el Plan de Desarrollo.
De acuerdo con Germán Vargas Lleras, jefe de la Cartera de Vivienda, el país tiene cerca 1’200.000 familias viviendo en una situación de extrema pobreza, con ingresos que no superan los 100.000 pesos mensuales, sin embargo, mantienen la ilusión. Teniendo en cuenta que en nuestro país los hogares situados en estado de pobreza están integrados entre 6 y 8 integrantes podemos acercarnos a una cifra escandalosa y precisa para certificar que la solución de vivienda para los hogares colombianos es apenas un eslabón de una escalera de problemas tradicionales.
El comportamiento económico de estas familias literalmente es preocupante, puede constituirse en un factor de una sana discusión en torno al sostenimiento de las viviendas y el cumplimiento oportuno de los servicios públicos domiciliarios. Asimismo, también es importante hacer claridad en las cuentas para evitar la apertura de contradicciones con los opositores del gobierno y la desilusión de la ciudadanía. De las 100.000 viviendas 45.000 están enfocadas para el sector rural y 55.000 para el área urbana; el acuerdo firmado con Bogotá supone 12.000, la subasta con Medellín alcanza las 10.000 soluciones por lo tanto restan hipotéticamente 33.000 para cada ciudad capital, lo cual indica que la distribución de este saldo dependería en gran manera de la gestión y organización de cada uno de los Alcaldes y de la categoría de cada Municipio.
De igual manera es necesaria la articulación interinstitucional en lo tendiente a los aspectos ambientales, la creación de elementos legales, el concurso del Ministerio de Medio Ambiente, La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Las Corporaciones Ambientales, Las Oficinas de Planeación, con el objeto de actuar conforme a los mandamientos que protegen el Medio Ambiente, porque no se trata de iniciar este macroproyecto en lugares inadecuados pues se gestaría una nueva fase de Colombia Humanitaria, en vez del objetivo primario de la locomotora para la construcción de viviendas.
A nuestro Alcalde Fredy Socarras y al honorable Concejo Municipal de Valledupar, les asiste la responsabilidad de configurar el proyecto de la mano con el Gobierno Nacional con la venia de los Ministerios de Vivienda y Ambiente, para que nuestra ciudad pueda aprovechar las oportunidades de un proyecto que, aparentemente, no vislumbra dificultades; sin embargo, no solo las tiene, sino que le sobran contradictores y mandatarios locales que la consideran un encarte.
Elquis0127@hotmail.com
Una oración por el descanso de nuestro amigo y colega Germán Piedrahita Rojas. Para Silvia Betancourt y su hija, Ángela, un abrazo fraternal, con una voz de fortaleza y respaldo.