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El ministro del interior en su época de jefe político de Cambio Radical. En la imagen con los actuales senadores Bernabé Celis, Juan Carlos Restrepo y Antonio Guerra de la Espriella, estos dos últimos, los nuevos codirectores del partido. | Foto: Paola Castaño

CONGRESO

Cambio Radical, ¿en rebeldía con Vargas Lleras?

Tres votos le hicieron falta al ministro del Interior para conseguir del Congreso plenas facultades para hacer reformas al Estado. Paradójicamente, los siete senadores de su partido se ausentaron o se opusieron al proyecto.

3 de marzo de 2011

A Germán Vargas Lleras le está causando más de un dolor de cabeza convertir en ley de la República el primer proyecto que radicó en el Congreso y con el que se estrenó como ministro del Interior.
 
Se trata del proyecto que, además de revivir tres ministerios (fusionados en la era Álvaro Uribe: justicia, trabajo y ambiente), busca que el Congreso le entregue al presidente Juan Manuel Santos “plenas facultades” para que, en un plazo de seis meses, haga reformas a las entidades del Estado que considere convenientes.
 
Entre ese paquete de reformas se habla de las reestructuraciones al DAS, la Dirección Nacional Estupefacientes, la Superintendencia de Notariado y Registro, Ingeominas y hasta el Seguro Social. Un tema que no deja de ser controvertido. Incluso, sectores de oposición han calificado como “peligrosa” la concesión de esas facultades.
 
En la noche del pasado miércoles, luego de dos fallidos intentos, el proyecto parecía conseguir su plena aprobación en la plenaria del Senado, la última estación para convertirse en ley.
 
Sin embargo, en vez de conseguir un triunfo político, Vargas Lleras sumó un nuevo traspié en ese propósito. Cuando se estaba votando el polémico artículo 17, precisamente el que pide plenas facultades, Vargas Lleras se quedó sin votos.
 
Y no fue culpa del mal tradicional del Congreso, la falta de quórum. En el recinto del Senado había los votos suficientes. De los 101 senadores, al momento de la votación, estaban presentes 64. El proyecto necesitaba el visto bueno de 51 parlamentarios para que fuera aprobado. Pero tras casi treinta minutos de votación sólo alcanzó 48.
 
Cambio Radical, en oposición
 
Vargas Lleras, con la mirada fija en el registro de votación y mirando cómo el tiempo para cerrar la votación expiraba, decidió, con el presidente del Senado Armando Benedetti, aplazar la votación. Si el tiempo se cumplía y no conseguía los votos, el proyecto, que ya había superado tres debates en algo más de seis meses, se hundía de forma definitiva.
 
Pero lo particular de la votación es que el único partido de la coalición que se opuso a este artículo fue Cambio Radical. Allí, en la entraña de su propio partido, Germán Vargas Lleras podría contar con los tres votos que le hacían falta. Pero ninguno de ellos apareció.
 
Todo lo contrario. Semana.com revisó las actas de votación de la plenaria del 2 de marzo y encontró que seis de los siete senadores de Cambio Radical asistieron a la sesión (solo faltó Antonio Guerra de la Espriella).
 
Pero a la hora de la votación del controvertido artículo 17 sólo permanecieron en el recinto Daira Galvis y Juan Carlos Restrepo, pero su votación fue negativa. Ellos fueron los únicos de la coalición de Gobierno que se opusieron e hicieron parte de los 15 votos que sumaron el Polo, el Mira y hasta el PIN (vea las actas de votación).
 
En una lectura simple, Cambio Radical se apartó de la coalición en uno de los proyectos clave de quien es considerado su jefe natural, Germán Vargas Lleras. ¿Hay rebeldía?
 
¿Postura política o malestar con el Gobierno?

La lógica política indicaría que si algún partido de la coalición debería ser incondicional con Germán Vargas Lleras sería Cambio Radical. Por eso causó sorpresa que fuera el único de la coalición que se opusiera a las facultades extraordinarias que tanto ha promovido el ministro del Interior en el Congreso.
 
Varios de los comprometidos en esta novela política le dijeron a Semana.com que la postura asumida en este proyecto no significa una rebeldía contra su jefe natural.
 
El senador Carlos Fernando Motoa, quien asistió a la plenaria pero se ausentó al momento de la votación, dijo que la decisión de la bancada es “apoyar todos los proyectos” de la agenda con la que el Gobierno convocó a sesiones extraordinarias. Y así quedó expresado el martes pasado, en la reunión de bancada, en la que se escogió el sustituto de Fuad Char como codirector nacional del partido.
 
La senadora Daira Galvis, que votó negativamente las facultades, dijo que Cambio Radical es incondicional con Vargas Lleras, pero que “tenemos el derecho, como congresistas, a disentir”.
 
Galvis dijo que votó negativamente el artículo 17 porque “es necesario revisar los verdaderos alcances de las facultades”. “No creo que merezca mayor controversia. Simplemente habíamos dos senadores de Cambio Radical que adoptamos una posición lógica, independiente de ser parte de la coalición de Gobierno. Es nuestra responsabilidad como legisladores”, explicó.
 
Una postura que coincide con la del codirector del partido, Antonio Guerra, quien, a título personal, le dijo a Semana.com que no votará las facultades. “Al Congreso lo convocaron para escindir tres ministerios, pero le agregaron facultades para reformar todo el Estado. Nos deben decir qué va a pasar con el DAS, con la Dirección Nacional de Estupefacientes. ¿Qué pasará con todas las organizaciones del Estado”.
 
Guerra además calificó este proyecto como “un cheque en blanco para firmar con los ojos vendados. Si el Gobierno acierta, también acierta el Congreso. Pero si se equivoca, el que se equivoca es el Gobierno”.
 
El nuevo codirector del partido dijo que la prueba que están acompañando al Gobierno es que se votaron favorablemente todos los artículos concernientes a la separación de los ministerios.
 
De momento, las voces oficiales indican una postura política frente a un proyecto que ha sido muy controvertido.

Sin embargo, en voz baja, hay congresistas de Cambio Radical que no se sienten bien tratados por el actual Gobierno. Incluso, dicen que era más fácil ser recibidos por los funcionarios del Gobierno Uribe, y eso que Cambio Radical se apartó de la coalición en los últimos años. “Pedimos cita para tratar temas y pueden pasar quince días sin recibir respuesta”, dice un parlamentario. ¿Será una forma de presión? Estará por verse.

El ministro Germán Vargas Lleras no ha querido entrar en controversias políticas y aseguró que el proyecto de facultades será aprobado la próxima semana. Asegura que si no ha sido así es por una fuerte presión de los sindicatos de las entidades que serán objeto de reestructuración. “Veo mucho cabildeo y mucha gente de entidades”.

Lo cierto es que además de esa presión, originada en entidades del Estado, Vargas Lleras tendrá que promover un impulso adicional en los partidos de la coalición, pero sobretodo en las filas de su propia casa, Cambio Radical.