Candidato: ¿Cuáles serán sus políticas tributaria y de inversión extranjera?

En la trigésimo primera entrega del cuestionario programático diseñado por la facultad de Ciencia Política y Gobierno de la Universidad del Rosario, seis candidatos a la Presidencia explican su política tributaria y su plan para favorecer la inversión extranjera.

Con estos interrogantes termina el séptimo capítulo del sondeo a los candidatos, denominado ‘Desarrollo económico’, con el cual se busca conocer propuestas “serias y viables” de los aspirantes para alcanzar el bienestar económico del país.

Afirma la Universidad del Rosario que en el país se obra como si se hubiese conseguido un consenso definitivo sobre el modelo de desarrollo económico y no persiste siquiera una discusión abierta y pública que exprese la existencia de puntos de vista diferentes sobre la materia.

Por eso, agrega, es necesario que los candidatos se manifiesten sobre esta temática, en la medida que las ideas que tengan en este campo repercutirán tanto en sus proyectos legislativos como en el adelanto de sus políticas tributaria, fiscal, de inversión pública, comercial, ambiental y de relaciones internacionales.

Seis de los candidatos, los que registran más del 1 por ciento en la mayoría de encuestas, accedieron a responder este cuestionario: Antanas Mockus, Rafael Pardo, Gustavo Petro, Noemí Sanín, Juan Manuel Santos y Germán Vargas Lleras.

Semana.com aclara que las respuestas de cada candidato no fueron sometidas a ninguna edición, ni en contenido ni en extensión, y son ofrecidas de forma íntegra. 

 
1. ¿Cuáles serían los fundamentos de su política de inversión extranjera? 

 
Antanas Mockus 
 
Atraeré la inversión extranjera con políticas de ampliación de mercados y extensión de competencias en áreas diferentes del conocimiento y bienes y servicios más atractivos para los grandes inversionistas internacionales, partiendo de criterios de seguridad jurídica. No impulsaremos inversión extranjera especulativa, que no genere empleo. 


 
Rafael Pardo 
 
El país está ad portas de convertirse en una economía minera y petrolera. Esto implica que la Inversión Extranjera Directa –IED- dirigida a estos sectores primarios va a cobrar importancia en los próximos años, en detrimento de la inversión hacia otros sectores. 

Mi política hacia la inversión extranjera se concentrará en fomentar la entrada de capitales hacia otros sectores productivos, como la agricultura y la industria manufacturera. Esto se hace mediante el establecimiento de reglas claras para los capitales foráneos y la promoción institucional de la economía del país, a través de agencias como ProExport o Invest in Bogotá. 

La idea es evitar el ingreso de capitales de corto plazo y facilitar que el capital externo contribuya al crecimiento de la economía colombiana en el largo plazo. 
 
 
Gustavo Petro 
 
La inversión extranjera será bienvenida al país, acogiéndose a tres directrices de política:

- Su estructura tributaria será equivalente a la que tiene un inversionista nacional, es decir, no habrá exenciones ni tratamiento diferencial.
- Serán aceptadas prioritariamente en áreas industriales relacionadas con el modelo de profundización sectorial a desarrollar en las áreas metalmecánica y de bienes de capital, incluyendo procesos de aprendizaje y asimilación tecnológica.
- Se procurará que esté dirigida a la creación de empresas nuevas y generación de mayor empleo, no a la compra de empresas existentes.

Mi gobierno revisará la política de inversión extranjera minera y la someterá a dos tipos de ajustes: 

1. La inversión en combustibles dependerá de las decisiones estratégicas de Ecopetrol y su política de asociación, algo similar se hará con la explotación del carbón.
 
2. Otros proyectos mineros, como oro, coltán y demás minerales se atendrán a las evaluaciones de impacto ambiental y a la concertación con las comunidades que habiten la región. 

 
Noemí Sanín 
 
Debemos facilitar la llegada de la inversión extranjera para lo cual debemos repensar las restricciones cambiarias que aún quedan. Sin embargo, la inversión que llega a la industria extractiva, minería y petróleos debe cumplir estrictamente con las normas ambientales. 

Ampliar la inversión extranjera a sectores que impliquen la introducción de nuevas tecnologías al país es la prioridad, para lo cual es necesario hacer inversiones en capital humano, infraestructura y en ciencia y tecnología. 

 
Juan Manuel Santos 
 
La regla de oro para atraer más inversiones de talla mundial son las “reglas de juego” que garanticen la estabilidad a largo plazo.

Se establecerán los principios que integren de una manera armónica la economía, el medio ambiente y la responsabilidad social, para garantizar la continuidad del desarrollo. 

Es importante anotar que la protección del empleo en Colombia exige una política agresiva de promoción y consolidación de las exportaciones en los sectores más competitivos de la economía, y la inversión extranjera juega un papel fundamental en este contexto. Es impulsar la llegada de inversión extranjera en sectores exportadores, buscando la generación de valor agregado nacional. 

 
Germán Vargas Lleras 
 
Colombia debe construir confianza, pero en el sentido estricto del término: ésta no se construye mediante gabelas y regalos, sino mediante la consolidación de condiciones propias para la inversión. 

Vamos a ofrecer seguridad e imperio de la ley. Nuestra profunda reforma judicial responderá a una de las más serias preocupaciones de los inversionistas extranjeros, a saber, la ineficacia de la justicia.

Nuestra reforma tributaria nos hará atractivos a nivel mundial, por la simplificación del sistema. 

Continuaremos y fortaleceremos la labor de entidades del Gobierno dedicadas a promover la inversión, y a mostrar las ventajas de invertir en Colombia. 


2. ¿Cuáles serán los rasgos de su política tributaria? 


Antanas Mockus 
 
Es una reforma tributaria estructural, que ordene los impuestos nacionales y regionales, que recupere la eficiencia, asegure la equidad, y frene la evasión y que se estructure siguiendo el principio de progresividad. La reforma simplificará el régimen tarifario del IVA y el impuesto a la renta, y eliminará exenciones tributarias regresivas. 


 
Rafael Pardo 

Nuestra política tributaria se concentrará en un recaudo y gasto eficiente y equitativo. Se buscará que este último este bien focalizado y contenga los incentivos adecuados para que genere los impactos sociales positivos que tanto necesita nuestra Nación. 
 
Mi política fiscal contribuirá a la estabilidad macroeconómica, evitando el impulso a la reevaluación que ha ocasionado el desbalance del gobierno y garantizando la sostenibilidad de la deuda. 

Impulsaré una regla fiscal que evite el desperdicio de las rentas mineras y petroleras del país, y una reforma tributaria estructural que ajuste el código tributario a los principios constitucionales de eficiencia, equidad y progresividad. 

Eliminaremos las exenciones en el impuesto de renta, reduciremos la tasa que se cobra a las empresas, impondremos un impuesto a los dividendos, y remplazaremos los estímulos al capital por los estímulos a la generación de trabajo. 

Además de esto, bajaré el 4 por mil al 1 por mil y unificaré el IVA en una sola tarifa que esté entre el 12% y 13% de todos los productos, exceptuando los bienes de canasta familiar, para que la diferencia entre ese porcentaje y el actual, de 16%, sea definida por los departamentos y sea parte de los recursos para inversión regional. 

Esto es una cesión real de recurso que les permitirá implementar mecanismos de endeudamiento autónomos para hacer grandes proyectos regionales 

 
Gustavo Petro 
 
El que tiene más, contribuye más. No hay otra manera de lograr las metas sociales, reactivar la economía nacional y remplazar el actual sistema regresivo. 

Para eso hemos propuesto un nuevo Pacto Fiscal que se hará en diálogo con los principales actores de la economía. Este Pacto Fiscal incluye las siguientes medidas:
 
- Eliminación de las exenciones al capital (reinversión de utilidades, contratos de seguridad jurídica y de zonas francas uniempresariales).
- Gravámenes a la riqueza, a los dividendos percibidos, a los salarios más altos y al patrimonio de personas naturales, modificando hacia arriba la estructura de tasas efectivas.
-El reforzamiento de la progresividad del impuesto a la renta para avanzar en la sustitución de impuestos indirectos.
- La eliminación del IVA para todos los productos de la cadena alimentaria y la revisión de la legitimidad de la deuda pública. 

 
Noemí Sanín 
 
El manejo de la tributación y la política fiscal constituyen lo que he denominado el sendero a la modernidad. Hay que decirlo sin ambages: hubo un momento histórico donde la falta de confianza en la viabilidad del país pudo haber hecho necesario otorgar una serie de incentivos y beneficios extraordinarios a los empresarios. 

Pero hoy, la decisión de invertir no puede depender o estar condicionada a beneficios fiscales sino por la bondad económica de los proyectos porque esos beneficios son muy costosos para el conglomerado social. 

Los descuentos fiscales se han unido a la revaluación y las bajas tasas de interés creando una brecha entre el costo del capital y el costo del empleo. Hay que restablecer el equilibrio. 

Respetando los compromisos adquiridos, es necesario eliminar la gran mayoría de los beneficios fiscales y ofrecer en cambio seguridad absoluta en las reglas: no imposición de tributo adicional alguno en los cuatro años de gobierno, eliminación de tributos antitécnicos como el 4 por mil y no castigar la formación de capital y la inversión, propósito para el cual garantizo que desaparecerá la renta presuntiva y empezaremos a movernos en el camino de la eliminación del impuesto al patrimonio. 

Debemos ampliar la base, simplificar el Estatuto tributario y fortalecer el control a los evasores para lo cual vamos a utilizar modelos ejemplarizantes de fiscalización sectorial. 

Debemos entender que contribuir al fondo común es un imperativo moral para construir una sociedad más justa. 
 
 
Juan Manuel Santos 
 
Adoptaremos una regla fiscal de largo plazo, que promueva el equilibrio de las finanzas públicas, la austeridad y la probidad en el manejo de los recursos de todos. 

Se separará la aprobación de los ingresos y los gastos del Gobierno Nacional en dos leyes anuales distintas. Por lo tanto, en la discusión de los gastos, los congresistas no podrán incluir pagos excesivos y ‘micos’ amparados en ingresos no definidos. 

 
Germán Vargas Lleras 
 
Buscamos dos objetivos: simplificación y eficiencia. Ambos se complementan. La simplificación permitirá unificar tarifas y regímenes, eliminar impuestos antitécnicos como el gravamen a los movimientos financieros, y reducir a la mitad el Estatuto tributario. 

Cuando esto se acompaña de la necesaria eliminación selectiva de exenciones, el recaudo tributario aumenta, y así se benefician la sociedad, los empresarios y el Estado.