El memorial de agravios de Samper contra sus investigadores

Un memorial escrito por el expresidente Ernesto Samper llegó este lunes a la secretaría de la Comisión de Acusaciones. Ese organismo lo investiga dentro del proceso que adelanta por el magnicidio de Álvaro Gómez Hurtado.

En el escrito, el expresidente Samper pide a la Comisión trasladar a la Corte Suprema de Justicia todo lo actuado dentro de ese proceso, pues a su juicio la conducta de los representantes investigadores Augusto Posada (la U), Héctor Javier Vergara (la U) y Orlando Clavijo (P. Conservador), como jueces investigadores “estarían muy cercanas a infracciones penales como el prevaricato y el fraude procesal".

Samper conoció en detalle la declaración que el confeso narcotraficante Hernando Gómez Bustamante, alias ‘Rasguño’, entregó a los investigadores en Nueva York el pasado mes de junio.

“Destaco la particular perfidia con la que el parlamentario Augusto Posada condujo el cuestionario, favoreciendo sus amistades políticas, guardando silencios injustificados, cuando el testigo comprometía a varios de sus paisanos y copartidarios”.

Para Samper, Posada “buscaba, tozudamente, que el declarante involucrara a mi gobierno y al suscrito en el asesinato, al extremo tal, que el propio interrogado hubo de exigirle que no insistiera en sacarle respuesta para incriminarme como autor intelectual del asesinato de Álvaro Gómez Hurtado”.

El expresidente dice en su carta que "de lo que se trata aquí es de encontrar la verdad y no un chivo expiatorio político, como lo pretenden algunos familiares del dirigente sacrificado y, al parecer, ustedes mismos como se deduce de sus recientes actuaciones".
Samper también se refirió a la conducta del investigador Héctor Vergara, quien, según él, “le pregunta categóricamente al testigo –alias ‘Rasguño’- si tiene pruebas de las afirmaciones que ha venido haciendo, este le responde de manera clara y audible que no las tiene”.

El expresidente cuestiona la veracidad de las recientes amenazas denunciadas por los investigadores que adelantan el caso. Héctor Vergara, recientemente le reveló a SEMANA que fue abordado por un desconocido cuando adelantaba la diligencia en Nueva York.

Por eso Samper afirma que “lamentablemente, según me he enterado, (las amenazas) no fueron puestas en conocimiento de las autoridades norteamericanas, ni de la Cancillería y las demás autoridades colombianas”.

Finalmente, Samper dice que sus investigadores han convertido el proceso en "un juicio político y un espectáculo mediático para hacer señalamientos y valoraciones que están muy distantes de su condición de jueces investigadores".