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En pocos desfiles del 20 de julio se habían visto tantas mujeres. | Foto: Guillermo Torres

CELEBRACIÓN DEL 20 DE JULIO

Tame celebró en calma

La conmemoración del 20 de julio, este año tuvo su epicentro en el golpeado municipio de Tame, Arauca. Crónica de Andrea Peña, enviada especial.

Andrea Peña de Semana.com
20 de julio de 2009

Con una celebración más sobria que la del año pasado, cuando Colombia festejó el rescate militar de 15 secuestrados por las Farc, este 20 de julio Tame se cubrió de banderas de Colombia para conmemorar este lunes el aniversario 199 de la Independencia de Colombia.

“A mí me da mucha alegría que el presidente (Álvaro Uribe Vélez) y toda esta gente venga aquí. Pero el problema es qué va pasar mañana, cuando todo esto se acabe”, dice Jota Mario Pabón, dueño de una panadería cerca de la plaza central de este municipio, ubicado en el suroccidente del Arauca.

En 1810, Tame fue la ciudad de donde Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander partieron para hacer la ruta libertadora que nos dio la independencia de los españoles. Hoy, casi 200 años después, este municipio asechado por las Farc, la violencia y la pobreza tardó casi un mes pintando sus casas de cemento, sembrando flores y matas en los andenes, arreglando las calles y levantando la Plaza del Encuentro, el único monumento en el país donde Bolívar y Santander están sentados y juntos. Todo para que este 20 de julio la ciudad estuviera bonita.

Pero la estética no era todo. Durante la última semana, unos 1200 miembros de las Fuerzas Militares y de la Policía se dieron a la tarea de blindar a la población de cualquier atentado terrorista, ya que durante el fin de semana, a hora y media de Tame, unos vehículos que viajaban por carretera fueron alcanzados pos disparos que desconocidos lanzaron desde una finca. Sin contar con los ataques constantes del frente Domingo Laín del Eln y el 10 de las Farc en esta región. 

Esta mañana, a las 10 y 30 como estaba previsto, llegó el presidente de la República Álvaro Uribe Vélez. Junto con él arribaron el canciller, Jaime Bermúdez, mandos militares y de policía, algunos presidentes de las Cortes, el procurador general, Alejandro Ordóñez, el defensor del pueblo Wolmar Pérez y autoridades locales. A esa hora, Tame comenzaba a hervir.

El desfile militar no tardó más de 40 minutos. Por primera vez, marcharon las cadetes del Ejército, jovencitas que aspiran a llegar a ser generalas dela República en unos 30 años.
 
“Pero yo pensé que el Presidente iba a pasar por aquí, ¡o que las calles de Tame las iban a sacar por televisión! Pero bueno, esto nunca en la vida sucedido en el pueblo…”, dice con tono resignado Araminta Gómez, dueña de una licorera que desde el sábado pasado tuvo que suspender sus ventas por cuenta de la ley seca.

Este lunes, además, partió la Ruta Libertadora 2009, un recorrido en el que participan 150 carabineros, 150 militares y los espontáneos que se vayan uniendo. Salieron desde Pore, en Casanare y tardarán 19 días en hacer la misma ruta que hizo Bolívar en 1810.

Gran Concierto

Aunque había mucha expectativa por la presencia del presidente Uribe en la fiesta de la Independencia, también había mucha ansiedad por el gran concierto nacional que organizaba el Ministerio de la Cultura. Los artistas: Fonseca, Andrés Cepeda, el ‘Cholo’ Toledo, el coro Cantaclaro y Semillas de Cubarro y bailarines profesionales de la región.

En la Villa Olímpica, se agolparon centenares de araucanos con camisetas en las que se leía “Tame, cuna de la libertad”. También llevaban banderas de Colombia, sombreros de cartón patrocinados por un banco y abanicos del mismo material con el emblema las Fuerzas Militares. El calor era sofocante.

A las 12 y 15 del mediodía sonó el Himno Nacional. De inmediato, arrancó el concierto. Minutos antes, Uribe tomó la palabra: “Este desfile no fue de ostentación militar. Fue más un homenaje a los héroes de la Patria y a los héroes de la Independencia (…) Hace dos años celebramos el 20 de julio en San Andrés. El año pasado, en Leticia. Hace dos años hubiera sido imposible hacer algo como esto en Tame.”, dijo el Presidente, en un discurso muy corto sin mayores novedades.

De ahí en adelante, todo fue parranda llanera. Afuera de la Villa quedaron las banderas nuevas, los pendones, algunas bombas desinfladas, y uno que otro policía o militar vigilando en las esquinas.
 
“Todo es positivo. El hecho de que no haya sucedido nada, es muy positivo”, dice el general Antonio Pinilla, comandante de la Brigada Logística de Bogotá, encargado de organizar parte del evento y quien sabía, como todos los araucanos, que celebrar el 20 de julio en Tame era una provocación para las Farc, pero también un desafío para los habitantes de este departamento que querían demostrarse a sí mismo y al país, que aunque sólo por un día, Arauca puede ser noticia por algo que no sea violencia.