ENTREVISTA

"El interés en la energía nuclear puede haber recibido un golpe mortal": José Antonio Ocampo

La tragedia japonesa puede incluso ayudar a acelerar el crecimiento en ese país, dice José Antonio Ocampo, exministro de Hacienda y actualmente profesor de la Universidad de Columbia. Así ve la situación que vive el país nipón.

19 de marzo de 2011

SEMANA: Lo que sucedió en Japón obviamente nadie se lo habría imaginado hace unas semanas. ¿Esto qué cambiará para la economía global que todavía está en recuperación?

JOSÉ ANTONIO OCAMPO:
El efecto sobre la economía mundial, por muchos motivos, no creo que sea muy fuerte, más allá de la coyuntura crítica inicial que creo que será superada en forma relativamente rápida. Aparte de la tragedia de las poblaciones afectadas, que es un tema que llevará más tiempo en solucionar, el problema sobre la economía mundial no veo que vaya a ser muy grave. Obviamente, Japón va a estar afectado en el corto plazo, en forma negativa, básicamente por el suministro de energía, pero en la medida en que ese problema se supere, la situación se normalizará e incluso, curiosamente, los desastres generan unas actividades de inversión que son positivas para la economía.

SEMANA: Vemos caída en todas las bolsas, incluidas las asiáticas. Asia fue la región que hizo contrapeso en la reciente recesión mundial. ¿Será que ahora esto afectará esta región, entre otras razones, porque algunas compañías tendrán problemas con el suministro de partes que hace Japón? ¿Eso no tendrá un impacto en la recuperación de la economía global?

J.A.O.:
Yo, sinceramente, no creo. Obviamente Japón juega un papel esencial en la cadena de suministros de bienes industriales para toda el Asia oriental, pero no creo francamente que esto suceda más allá de una coyuntura inicialmente crítica. Yo veo el problema de Japón es dos partes. Una, el lado de las áreas afectadas. Lo que el terremoto y el tsunami generaron a nivel de daños, que no creo que tenga un costo demasiado alto. El segundo problema que sí me parece un poco más importante, pero creo que será solucionado, es que la escasez de fluido eléctrico puede llegar a afectar la producción industrial. Aunque por experiencia sabemos que el racionamiento eléctrico no tiene tanto impacto sobre la producción, quizás en Japón si tendrá un poco más, debido al alto grado de desarrollo industrial. Pero ese es el impacto que veo. Ahora, si los suministros no se producen en Japón, se pueden producir en otros países.

SEMANA: Frente al tema de la energía nuclear y su futuro, ¿cómo ve esto?

J.A.O.: Creo que va a tener un impacto de largo plazo sobre la energía nuclear como opción deseable de generación de energía, inclinando la balanza en contra de ella. Ello traerá también consecuencias sobre la mezcla de energías necesarias para combatir el cambio climático. Creo, en otras palabras, que el resurgimiento de interés en la energía nuclear puede haber recibido un golpe mortal. Estamos viendo que el gobierno chino suspendió los planes de expansión basados en energía nuclear. En Alemania, donde el tema de la energía nuclear ha sido muy delicado durante mucho tiempo, creo que van a volver a los planes de desmonte gradual de la energía nuclear.

SEMANA: ¿Por supuesto esto afectará las otras fuentes de energía, petróleo y carbón, para bien y para mal de muchos?

J.A.O.:
Quiere decir que la expansión de los sistema eléctricos va a tener menor componente de energía nuclear que hasta hace poco tiempo. Eso puede ser petróleo, o puede ser carbón, o también biocombustibles o energía eólica. La mezcla va a depender mucho menos de lo que se esperaba hasta hace poco de la energía nuclear.

SEMANA: Algunos ven con preocupación en el tema fiscal de Japón. Ellos tienen el 9 por ciento de la deuda estadounidense. ¿Qué pasará si repatrian su deuda para atender los costos de la reconstrucción?

J.A.O.: De pronto tienen que hacerlo. Pero teniendo en cuenta los impactos cuantitativos, si se trata del 4 por ciento del PIB, no es algo tan grande como para que afecte los otros países.

SEMANA: Frente a las tareas de reconstrucción, así se tome su tiempo, esta será la oportunidad para que Japón retome el crecimiento después de años de letargo?

J.A.O.: La tragedia japonesa es dolorosa, pero, de alguna manera, puede incluso ayudar a acelerar el crecimiento en ese país, a través de las obras públicas que exige la recuperación del desastre. Los años 90 fueron los más difíciles para Japón, pero el crecimiento per cápita de Japón en la primera década del siglo XXI, que fue como del 0,9 por ciento en términos del PIB per cápita, es similar al que tuvo Estados Unidos y está muy por encima de muchos países industrializados. Japón no es una economía estancada, obviamente, el crecimiento es un poco lento por el cambio demográfico, por el envejecimiento de la población que viene experimentando y por lo tanto no hay un crecimiento importante de la fuerza de trabajo. Pero no es un crecimiento inferior al de muchos otros. Eso demuestra que Japón, por estar integrado a la región más dinámica del mundo, tiene unas posibilidades de seguir creciendo como parte del crecimiento de Asia oriental.