Home

Portada

Artículo

GRUPO ANTIOQUEÑO

Los conquistadores

El llamado Sindicato Antioqueño busca convertir sus empresas en multinacionales regionales. Se concentra en tres sectores: cemento, alimentos y financiero-seguros.

26 de abril de 2008

El famoso modelo de 'enroque' paisa mediante el cual se cruzaron las acciones de un conjunto de compañías, para proteger la propiedad antioqueña en las empresas, se acabó hace varios años y dio paso a un nuevo esquema.

Una vez desenredada la maraña de inversiones se conformaron tres holdings bajo los cuales se agruparon todas las compañías. Estos son Suramericana de Inversiones, Cementos Argos y Nacional de Chocolates, sociedades que se entrecruzan la propiedad accionaria y conservan el concepto de empresas públicas inscritas en la Bolsa de valores. Tienen más de 50.000 accionistas en todo el país.

Esta trilogía dio origen a lo que el país también ha llamado el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA), que, en estricto sentido, no es un grupo económico como otros en el país. Aquí no hay un dueño absoluto, ni una familia detrás que ostente el control.

David Bojanini, presidente de Suramericana de Inversiones, uno de los tres holdings que integran esta organización, cree que "el desenroque fue muy importante porque antes la participación cruzada entre las propias empresas era de niveles del 85 por ciento y para el público había muy poco. Hoy los accionistas en general de todo el país son dueños de casi el 50 por ciento de las empresas".

Precisamente, este fue el primer objetivo estratégico del nuevo modelo de organización: continuar como compañías públicas, pero sin perder el control de las empresas que se mantiene en los tres holdings bajo los cuales se agruparon las sociedades.

La segunda decisión estratégica que se adoptó hace cerca de cinco años fue mucho más ambiciosa: convertirse en auténticas multinacionales en la región.

Todo esto llevó precisamente a reorganizar las inversiones y concentrarse sólo en las que se definieron como estratégicas. En esta tarea de limpieza quedó claro cuáles no serán los sectores objetivos. Se decidió salir del negocio del comercio minorista, que llegó a tener gran preponderancia en el viejo Sindicato Antioqueño, bajo el liderazgo de Almacenes Éxito y Cadenalco. Estas dos empresas se fusionaron y el Grupo optó posteriormente por ceder el control de Éxito a la cadena francesa Casino. Hoy, en cabeza de Suramericana de Inversiones se conserva una participación reducida del 6,9 por ciento, pero con la opción hacia el año 2010 de venderla al socio francés.

En este mismo sector del comercio, se mantiene un 22,7 por ciento del capital accionario en la empresa Makro. En otras áreas hay pequeñas participaciones, entre ellas en la también francesa Sodexho Colombia y Sodexho Pass, firmas dedicadas al outsourcing en cafetería y mantenimiento de plantas de alimentos.

En el sector textil todavía quedan participaciones reducidas en Confecciones Colombia, Enka y Fabricato. No hay ningún propósito de crecerlas y es muy probable que estén en turno para cuando se presente un negocio con ellas.


1Banca a la conquista de Centroamérica

Los sectores bancario, de seguros y seguridad social son la primera carta para apostarle al futuro. Suramericana de Inversiones (Suraminv) es la compañía matriz que agrupa las inversiones en estos sectores.

Este holding es el mayor accionista de Bancolombia y Suramericana de Seguros, dos empresas líderes en sus respectivos campos y que tienen un reto inmenso: buscar más mercado acá o en el exterior.

Por ello, la mirada está puesta en Centroamérica y en algunos países de la región andina. Bancolombia compró el Banagrícola, el conglomerado financiero más importante de El Salvador, en una operación que costó 900 millones de dólares. Paralelamente, el grupo bancario abrió negocios de leasing en Brasil, renting en Perú y Bolsa en Panamá.

Jorge Londoño, presidente de Bancolombia, tiene la misión de convertir el banco en una entidad regional, después de haber demostrado que el modelo competitivo con el que opera en Colombia es perfectamente confrontable con la banca multinacional.

Ser una multinacional tiene además otro claro propósito: tener acceso a los mercados de capitales del mundo para conseguir recursos que permitan seguir creciendo. El Grupo Bancolombia finalizó 2007 con una utilidad neta consolidada de 1,1 billones de pesos, que representa un crecimiento del 31 por ciento respecto a 2006.

En la actividad aseguradora, Suramericana de Seguros, por donde arrancó la historia de este conglomerado, aumentó su participación en el mercado al 25 por ciento, gracias a la compra de Agrícola de Seguros, adquisición que costó 368.067 millones de pesos,

El interés no es tener el 50 por ciento del mercado asegurador colombiano, dice David Bojanini. "Lo que se busca es crecer el mercado para seguir con esta participación, pero el futuro crecimiento estará orientado al exterior". En este sentido, ya se tiene una participación en Panamá, en la Compañía Interoceánica de Seguros, en donde se ha venido ganando participación.

En Seguros se dio cabida hace ya varios años a un socio internacional. Munich Re Group tiene el 18 por ciento de Inversura

S. A (seguros y seguridad social). Las empresas de seguridad social son Suratep, Susalud y la Unidad Prestadora de Servicios de Salud. Aquí también se trabaja en la internacionalización. Durante 2007 Inversura adquirió el paquete accionario que pertenecía a la Mutual de Seguridad de la Cámara Chilena de la Construcción, equivalente al 15 por ciento.

El otro núcleo estratégico en esta área es la seguridad social, a través de la Administradora de Pensiones Obligatorias, Protección, que tiene una cuota de mercado del 26 por ciento.

Es decir, localmente no habría más para donde crecer en pensiones obligatorias y tampoco hay interés en comprar ningún fondo en el mercado nacional. Por ello la estrategia es buscar expandir el mercado interno, básicamente en el negocio de pensiones voluntarias, donde se cree que todavía hay un gran potencial de crecimiento. La meta es concentrarse en el exterior. De hecho, en Perú se tiene una inversión en dos compañías, AFP Profuturo, con una participación del 10 por ciento, y en La Positiva Seguros, con un 12 por ciento.

2La multinacional de alimentos

Si alguien dudó de que una compañía colombiana pudiera convertirse en una multinacional del sector de alimentos, hoy tendrá que reconocer que sí era posible. El Grupo Nacional de Chocolates es una corporación de talla internacional que conquistó varios mercados en seis tipos de negocios: cárnicos, galletas, chocolates, café, helados y pastas.

Desde hace varios años definió la región estratégica para guiar las inversiones futuras: los países andinos, Centroamérica, el Caribe, México y Estados Unidos. Todo lo que tenga que ver con la comunidad hispana, aclara Carlos Enrique Piedrahíta, presidente del Grupo de alimentos.

Esta meta que se fijó hace cuatro años es hoy una realidad. La tarea comenzó exportando, siguió con la distribución, hasta llegar al proceso de adquisiciones de compañías en el exterior.

Se llegó a Costa Rica, Panamá y Perú. Allí se adquirieron varias empresas: tres en Costa Rica (dos de galletas y una de chocolates); dos empresas de cárnicos en Panamá (Blue Ribbon y, a través de Ésta, se adquirió la sociedad Ernesto Berard), y una de chocolates en Perú. Ya hace 10 años, Nacional de Chocolates había hecho su primera incursión en el exterior, al comprar en Venezuela la empresa de cárnicos Hermo.

El Grupo Nacional de Chocolates tiene distribución en toda la región centroamericana. En Estados Unidos la compañía está en Texas, y en Puerto Rico con distribución propia. El Grupo exporta a 67 países de los cinco continentes.

Carlos Enrique Piedrahíta afirma que el año 2006 fue el más activo en adquisiciones y 2007 fue la integración de esas compañías. En 2008 seguirán las compras. Este año se cerró el negocio de cárnico en Panamá.

Las cifras hablan por sí solas de la dimensión que ha tenido esta compañía. En diciembre de 2000 el Grupo Nacional de Chocolates contaba con 500 empleados en el exterior. Hoy, de los 23.4000 empleados que tiene la organización de alimentos, 4.000 trabajan fuera de Colombia.

¿Se puede competir en alimentos con los grandes pulpos del sector? Claro que se puede, dice Piedrahíta. "Se ha mostrado que somos compañías competitivas en la región. El modelo que seguimos es autóctono colombiano. No tenemos pretensiones de ir a otro continente. No tenemos planes de hacer alianzas". Este año se esperan ventas externas por 500 millones de dólares.

Las ventas consolidadas del Grupo para 2007 ascendieron a 3,5 billones de pesos, que representan un crecimiento de 20,1 por ciento con respecto al mismo período del año anterior. Las ventas externas del Grupo fueron de 419 millones de dólares, con un aumento de 58,1 por ciento frente a 2006.

La participación de mercado en Colombia pasó del 49,8 por ciento al 51,4 por ciento. La utilidad neta consolidada del Grupo Nacional de Chocolates fue de 247.313 millones de pesos, 40,1 por ciento superior a la alcanzada el año anterior. Y sus activos ascendieron a 4,2 billones de pesos.

3Cementos a Estados Unidos

Hace ya bastante tiempo que Argos rompió la creencia de que exportar cemento no era posible, o por lo menos que no era un negocio rentable. Ahora no sólo lo exporta, sino que lo produce en otros países.

Aunque en 2000, el Grupo Argos decidió de manera muy tímida incursionar en el mercado externo, al comprar una planta cementera en Venezuela, inversión a la que no le ha ido bien, pues afronta un conflicto en ese país, la verdadera internacionalización comenzó a finales de 2005 y comienzos de 2006, cuando se lanzó con fuerza a conquistar Estados Unidos.

Esos años se invirtieron cerca de 900 millones de dólares para la compra de tres empresas concreteras: en Texas, Georgia y Carolina del Norte. Al mismo tiempo se decidió invertir en puertos marítimos en esos mismos lugares.

A partir de ese momento, casi la mitad del negocio de cementos de Argos quedó en Estados Unidos, con un 42 por ciento. Para José Alberto Vélez, presidente del Grupo Argos, salir del país era una decisión impostergable porque la participación en el mercado colombiano ya era cercana al 50 por ciento y hay competidores muy fuertes que también están 'peleando' por el mismo mercado.

La meta está trazada. Las próximas inversiones se harán en el exterior. La idea es invertir en minas de agregados, de donde se obtiene materia prima importante para la producción de concreto. Ya en 2006 se había comprado una reserva de agregados y arenas 'Dawnix' en el sur de Dallas (Texas).

El plan estratégico se circunscribe a los estados del sureste de Estados Unidos, entre otras razones, porque han sido lo sitios que han permitido mantener una operación de exportación desde las plantas ubicadas en Cartagena, Barranquilla y Tolú.

Pese a la crisis hipotecaria, Argos está disfrutando las mieles del boom de la construcción de vivienda que se vive en Texas.

Además de Estados Unidos, los países del Caribe y Panamá están en la mira. Argos tiene actualmente inversiones en Panamá, en una alianza con la multinacional suiza Holcim, y algo similar en República Dominicana, con Cementos Colón y Cina en Haití.

En el panorama se ven más nubes claras que negras. Como dice Vélez, en el mundo compiten las grandes, medianas y pequeñas compañías cementeras. Cuatro o cinco multinacionales tienen el 20 por ciento del mercado, es decir, todavía queda un 80 por ciento para el resto de fabricantes.

Así China produzca el 45 por ciento del cemento que consume, en la medida en que los fletes sean baratos, pueden exportar los excedentes fácilmente, pero la ventaja para Argos es que venderle a Estados Unidos significa cinco días de navegación, mientras que para China son 35 días. Eso sí que hace la diferencia.

Cementos Argos tuvo ingresos operacionales el año pasado por 3,8 billones de pesos, de los cuales cerca del 42 por ciento provinieron de ventas en Colombia; 40 por ciento, en Estados Unidos, 6 por ciento, en Latinoamérica, y el saldo diferencial fue el resultado de ingresos que aún posee la compañía en negocios no cementeros.