INNOVACIÓN

“Nos preparan para el éxito y no para el fracaso”

Ari Messer, CEO de "Carmel – Gestores de éxitos", y experto en Start up, explica la importancia de las incubadoras para el desarrollo económico de un país basado en la innovación.

27 de enero de 2016

Para nadie es un secreto que Israel es una potencia mundial en innovación científica y tecnológica. El año pasado fue clasificado en el quinto puesto en el Bloomberg Innovation Index de2015, un ranking anual de países que mide el desempeño en investigación y desarrollo (I+D), educación tecnológica, patentes, y otras variables de I+D. Sus buenos resultados ponen al país hebreo por encima Francia, el Reino Unido y EE.UU, tres de las potencia más grandes del mundo.

El éxito de Israel en I+D se debe fundamentalmente a una política nacional de más de 67 años que basa su desarrollo económico en la innovación empresarial, científica y tecnológica. Entre las múltiples estrategias que tiene el gobierno y el pueblo israelí para promover la innovación, se encuentra apoyar la formación de start up (compañías emergentes sustentadas en la tecnología que innovan en el mercado) y de incubadoras (espacios físicos que buscan asegurar el éxito de las start up). Como parte de esta estrategia han surgido empresas tan importantes como Waze.

Ari Messer, CEO de "Carmel – Gestores de éxitos", experto en el tema de la innovación, visitó Colombia y habló con SEMANA.COM sobre la importancia de las incubadoras para el desarrollo económico de un país basado en la innovación y sobre las razones de su visita al país

SEMANA.COM: ¿Cuál es el motivo de su vista a Colombia?

Ari Messer: Esta es mi quinta visita al país. En esta ocasión fui invitado por el Colegio Hebreo de Bogotá para dictar un taller sobre innovación y emprendimiento cuyo resultado debe ser la formación de la primera incubadora estudiantil de Colombia.

SEMANA.COM: Explíquenos en qué consiste este proyecto…

A.M.: Nosotros somos una compañía de asesoramiento de start up e incubadoras en Israel. Desde hace algunos años nos hemos enfocado en realizar talleres que buscan romper el pensamiento fijo y fomentar la creatividad para que colegiales formen sus incubadoras y desarrollen sus oportunidades de negocios basados en la innovación.

SEMANA.COM: ¿Qué significa romper el pensamiento fijo y promover la creatividad?

A.M.: Los colegios del mundo todavía siguen educando con métodos bastante antiguos. Le pongo un ejemplo: todavía hoy tenemos el mismo método para aprender a leer de hace mil años y que no se corresponde con la velocidad y la cantidad con que se produce información en el mundo. Nosotros buscamos romper esos marcos fijos y así fomentar la creatividad de los jóvenes.

SEMANA.COM: Pero fomentar la creatividad en los niños y jóvenes, no solo es promovida por las escuelas sino por los gobiernos…

A.M.: Es cierto pero eso solo se queda en un slogan. A los niños y jóvenes se les dice que hay que pensar más allá de los marcos, que sean creativos, pero no se les proporcionan las herramientas ni la metodología para hacerlo.

SEMANA.COM: ¿Cómo es esa metodología?

A.M.: Primero les decimos a los jóvenes que la innovación y la creatividad son un camino largo y lleno de fracasos. Luego les proporcionamos una canasta de herramientas y habilidades para ser innovador. Les enseñamos a enfrentar los obstáculos que puedan aparecer en el desarrollo de las ideas, a prepararse para salir al mercado, a lidiar con problemas psicológicos, con adicciones… Esta metodología la hemos probado en países de Europa con muy buenos resultados. Vale la pena recalcar que nuestro resultado final es la creación de una incubadora.

SEMANA.COM: Usted hace mucho énfasis en el fracaso ¿Por qué?

A.M.: El fracaso es necesario y es la regla en la innovación. Nos han vendido el cuento del éxito de Mark Zuckerberg y Steve Jobs y nunca nos cuentan, por ejemplo, que el 99 por ciento de las start up en Israel fracasan, ni que los inversionistas pierden millones de dólares en esas aventuras. Pero lo importante es cómo manejamos el fracaso. En la actualidad nos venden la idea que la innovación es la receta para crecer económicamente, pero eso solo se queda en palabras. Nos preparan para el éxito y no para el fracaso.

SEMANA.COM: Se cree que la innovación es producto de una buena idea, de un chispazo que revoluciona algún aspecto de la vida ¿Qué tan cierto es eso?

A.M.: Nada más falso que eso. Las películas, libros de autoayuda y couching nos venden la idea de que la innovación y la creatividad son un simple cambio de actitud. Pero no nos enseñan que la innovación es un largo y difícil camino con una metodología específica como la tiene el método de investigación científica. Volviendo al caso Zuckerberg, los medios lo presentan como un genio, pero no muestran que para que Facebook existiera fue necesario el algoritmo ICQ. Una fórmula creada por tres jóvenes de 18 años y uno de ellos era hijo del dueño de la compañía más importante de alta tecnología en Israel. Esto nos demuestra que la innovación no es un chispazo.

SEMANA.COM: ¿Qué espera de las incubadoras creadas por los jóvenes que capacita?

A.M.: Esperamos que en estas incubadoras salgan patentes relacionadas con tecnologías como las apps. Pero también creemos que de esta experiencia pueden salir innovadores sociales que desde otros aspectos produzcan cambios en la sociedad.

SEMANA.COM: ¿Cree que las start up y las incubadoras son una fórmula que debe acoger Colombia para fomentar el desarrollo económico a partir de la innovación?

A.M.: No es mi papel decir que camino debería seguir Colombia. Solo puedo poner como ejemplo nuestro lo que ha hecho país en el campo de la innovación. En Israel el recurso número uno es la mente. Somos un territorio que no tiene agua ni recurso naturales, y en 67 años mire a donde hemos llegado. Y no es que los israelitas tengamos el gen de la innovación, simplemente, nuestros desarrollos en innovación hacen parte de un tema cultural profundamente arraigado.