Siguen preocupaciones por el dominio de Claro

No todo fueron aplausos al sector TIC por parte de la OCDE, que volvió a poner el dedo en la llaga al insistir que Colombia tiene una “fuerte” concentración de mercado en telefonía móvil. Para la entidad los mercados móviles están muy concentrados, “con el operador más grande (Claro) que tiene el 60 % del mercado, al igual que la mayoría de los mercados de telefonía fija local y regional”.

De acuerdo con el informe trimestral que publica el MinTIC, Claro tiene más de 29 millones de usuarios de telefonía móvil, que representan el 54,66 % del mercado. Por su parte, Movistar cuenta con más de 12 millones de usuarios, que representan el 23,48 % del mercado. Mientras que Tigo tiene más de 8 millones de usuarios, que representan el 16,22 %.

Para la OCDE, que ha sido insistente en este tema, “una mayor competencia en este sector sigue siendo necesaria para aumentar las tasas de adopción y para estimular la innovación en el sector”. En el informe más reciente le vuelve a solicitar al Gobierno darle más dientes y sobre todo independencia a la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC), para que tome medidas de fondo contra el monopolio.

En el informe publicado en enero de 2015, la OCDE entrega varias indicaciones de fondo para combatir la concentración del mercado. “Para lograr este objetivo, el regulador debe hacerse verdaderamente independiente del gobierno”, afirma. Sobre la legislación, asegura que el marco regulador de las telecomunicaciones de Colombia (Ley de TIC de 2009) “es relativamente avanzada, e incluye la mayoría de los instrumentos normativos necesarios para frenar situaciones de posición dominante en los mercados de telecomunicaciones”, estas herramientas no están siendo objeto de un uso completo debido a que la CRC “carece de independencia y la potestad sancionadora”, ya que dos de cada cinco comisionados pertenecen al Gobierno.

Ante la solicitud para emancipar la CRC el ministro de las TIC, Diego Molano ha sido claro al afirmar que darle mayor potestad a la entidad podría “engendrar un nuevo monstruo”, que la industria no necesita actualmente.

Analistas consultados por Semana.com coinciden en que la OCDE debe tener en cuenta que en Colombia fue Comcel (luego transformado en Claro) el primero en invertir en infraestructura, lo que le dio un alcance nacional y una amplia ventaja sobre sus competidores. Como en cualquier industria el que pegó primero, pegó dos veces.

Además, expertos del sector también insisten que el Gobierno actual despliega medidas de choque, porque las administraciones que debieron anticipar y parar la concentración que se tomaba sin más remedio el mercado.

Prueba de que las autoridades intentan enfrentar la concentración de usuarios fue la medida que se adoptó el 31 de diciembre de 2014, cuando la CRC decidió prorrogar la medida de cargos asimétricos, en la que Claro tendrá que pagar más por utilizar redes de sus competidores. La extensión llegará hasta 2017.

En su momento, Claro se pronunció sobre esta medida. Aseguró que “no hay ninguna justificación para que operadores establecidos en el mercado como Movistar y Tigo sigan siendo subsidiados”.

Por su parte ETB, uno de los nuevos jugadores del mercado móvil, expresó que “de no contar con este tipo de medidas y otras que ayuden a disminuir la concentración del mercado, se estaría entrando en una competencia desigual con consecuencias muy marcadas para empresas que como ETB deben rendir cuentas a sus accionistas”.

La concentración del mercado comienza a moverse paulatinamente y todo dependerá de las ofertas comerciales que propongan los operadores con infraestructura y virtuales para atraer a los usuarios. A fin de cuentas, son ellos los que terminan por determinar cómo se divide la torta del mercado en los próximos años.