Los planes de datos dominarán el mundo en 2020

Las previsiones que hacen las empresas de tecnología para los próximos cinco años son más que ambiciosas. La consultora Gartner predice que en el planeta vamos a pasar de 4,9 mil millones de cosas conectadas a la red (lo que se conoce como internet de las cosas) hoy en día a 25.000 millones de cosas en 2020.

En unos cinco años, además del teléfono móvil, una tableta y un computador, usted seguramente llevará consigo decenas de sensores que a través de la tecnología wearable (vestible) transmitirán millones de datos a centrales de información. La empresa Alcatel-Lucent se atreve a pronosticar que los  usuarios “se transportarán en carros conectados que no necesitan conductor y llegarán a un hogar en el que los electrodomésticos se comunicarán entre ellos para hacerle la vida más fácil”.

De acuerdo con los pronósticos de varias empresas del sector informático, en el 2020 estaremos en un ‘nuevo mundo’ en el que cada persona en promedio usará 10 dispositivos diferentes y en el que habrá 100.000 millones de aparatos conectados.

Los expertos han bautizado estas previsiones como el ‘tsunami mundial de datos’. En los próximos cinco años seremos testigos de la forma en que los objetos entregarán todo tipo de información. Las neveras informarán cuando sacar las frutas y verduras, las lavadoras le avisarán la cantidad de blanqueador que debe utilizar y los televisores lo conectarán con sus programas favoritos en cualquier hora del día.

No es una exageración. Se trata de una tendencia cada vez más palpable y sobre todo cada vez más práctica. Las costumbres de cada persona resultan ser un cúmulo de datos que pueden ser aprovechados para mejorar su día a día. Lo que hará el tsunami de datos es que el celular inteligente se convertirá paulatinamente en un centro de información mediante el cual cada usuario podrá controlar hasta el último detalle de su vida.

De acuerdo con la empresa IDC, se espera que para el 2020 el volumen de datos llegue a más de 44 billones de terabytes alrededor del mundo. Para que dimensione está cifra debe imaginar un galpón del tamaño de una ciudad intermedia de Colombia en el cual haya cientos y cientos de contenedores. Tanta información tendrá que ser almacenada y cuidada por cada empresa a la cual los usuarios le entreguen la confianza de proteger información sensible.

Infraestructura: la gran incertidumbre

La pregunta de fondo es ¿el ‘tsunami de datos’ está muy lejos de la realidad colombiana? Los expertos consultados aseguran que no. De hecho, para varios de ellos es una realidad que ya vive una buena porción del mercado que tiene servicios de banda ancha y de datos de cuarta generación que acuden a tecnologías como la domótica para controlar buena parte de su vida cotidiana por internet.

Pero es cierto, también, que la infraestructura nacional tendrá que seguir a la vanguardia para poder soportar la demanda de datos que tendrán los usuarios en los próximos cinco años. Faltaría precisar quién pagará por todo esto. Por un lado están los usuarios, que siempre quieren y querrán más pero no están dispuestos a pagar mucho más por ello; al otro, los operadores, dispuestos a invertir en nuevas infraestructuras, pero siempre que se asegure un retorno de inversión.

Para los expertos de Alcatel-Lucent, serán redes en las que la virtualización y el uso común de infraestructura de centros de datos llevarán a evolucionar de recursos dedicados a soluciones que reutilizan una infraestructura común, bajo la cual conviven muchas funciones y que se reconfiguran de forma automática de acuerdo a la demanda.