Mark Zuckerberg, desafió este viernes una espesa niebla contaminante durante una sesión de jogging. | Foto: AFP

REDES

El trascendental viaje de Zuckerberg a China

El dueño de Facebook viajó para tratar de obtener un mayor acceso al gigantesco mercado del país asiático, donde su red social sigue estando prohibida.

18 de marzo de 2016

Mark Zuckerberg, desafió este viernes una espesa niebla contaminante durante una sesión de jogging sin mascarilla de protección por el centro de Pekín.

En una foto colgada en su cuenta de Facebook se puede ver a Zuckerberg corriendo al frente de un pequeño grupo en la plaza Tiananmén, bordeando la Ciudad Prohibida presidida por el emblemático retrato de Mao Tsé-tung, con el fondo sumido en un esmog grisáceo.

"¡Es fantástico estar de regreso en Pekín! Inicio mi visita corriendo en la plaza Tiananmén, desde la Ciudad Prohibida hasta el Templo del Cielo", precisa el fundador de Facebook, que aparece sonriendo y sin mascarilla a pesar del pico de polución.

La concentración de partículas de 2,5 micras de diámetro (PM 2,5), peligrosas porque pueden penetrar y alojarse en lo más profundo de los pulmones, superaba a esa hora los 300 microgramos/m3 en Pekín, según las cifras de la embajada estadounidense. Es decir, 12 veces el nivel máximo de exposición recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Con este grado de nocividad, los expertos aconsejan limitar cualquier actividad exterior.

Zuckerberg debe participar en los próximos días en la capital china en un prestigioso foro económico con los directivos de gigantes del internet local y altos dirigentes del régimen comunista.

Una oportunidad para que el fundador de Facebook continúe con su operación seducción, tras varias apariciones en universidades chinas donde sus discursos, en un mandarín balbuceante, causaron sensación.

Aunque Facebook está bloqueado desde hace años en el internet chino -que está sometido a una censura implacable-, la empresa californiana logró desarrollar sus actividades comerciales en el país mediante contratos con empresas y gobiernos locales.

Los internautas chinos se burlaron del cliché del estadounidense corriendo por la plaza Tiananmén: "A falta de ver su red social, lo vemos en persona", ironizó uno de ellos.

Y algunos usuarios de Facebook expresaron su indignación: "Los adoquines sobre los que corres están cubiertos de la sangre de los estudiantes que luchaban por la democracia", reaccionó uno de ellos refiriéndose a la represión de las manifestaciones prodemocráticas de 1989.

Los gestos de deferencia de Zuckerberg hacia los chinos ya fueron criticados en 2014 cuando Lu Wei, jefe de la autoridad china de regulación de internet, visitó la sede de Facebook en California.

En esa ocasión, el joven empresario dejó visible encima de su mesa una recopilación de discursos del presidente Xi Jinping, y ante la sorpresa de su visitante, aseguró que había recomendado la lectura a sus colegas.