AIDS: UN ESCANDALO CHIMBO

A pesar de las noticias sensacionalistas que anunciaban la presencia de la enfermedad en Colombia, ningún caso ha podido confirmarse

28 de noviembre de 1983

AIDS. La sola mención de su nombre ha desatado una ola de histeria en Colombia. La semana pasada, dos periódicos de características totalmente diferentes, "El Tiempo" y "El Espacio", acogieron en sus páginas con grandes titulares noticias al respecto: "Tres casos de Aids en Colombia", "El Aids cobra tres muertes". "Control de Aids en las cárceles", mientras, los noticieros radiales también hacían eco del asunto.
Lo que hasta hacía pocas semanas era apenas un exótico tema de moda importado de los Estados Unidos, parecía haberse convertido en la nueva amenaza de Andrómeda.
El polvorín se había prendido. Empezaron a circular toda clase de versiones que pusieron a "revolar en cuadro" no sólo a grupos de homosexuales y drogadictos, supuestamente las potenciales víctimas, sino también a médicos y científicos, que han tenido que responder consultas de toda índole incluyendo las del mismo ministerio de Salud que ordenó iniciar una investigación. Por su parte, el director nacional de prisiones, Bernardo Echeverry Ossa, anunciaba que se pondría en marcha un control sanitario en las cárceles del país, para prevenir los casos de la enfermedad, dada la alta incidencia de homosexualismo en las prisiones por las condiciones de hacinamiento en las que viven los presos.
Sin embargo, y a pesar de la alarma general que se produjo, todo parecía indicar que se trataba de una tempestad en un vaso de agua. SEMANA estuvo investigando en clínicas, hospitales y centros asistenciales de Bogotá, lugares donde supuestamente se habían registrado los tres casos que mencionaban los periódicos, y los resultados negativos permitían predecir que el escándalo era chimbo. Las noticias se habían producido sin verificación alguna y la opinión se había tragado el anzuelo, posiblemente al amparo de que aún ciertos temas son tabú en Colombia y de que por esta razón no era factible la identificación de las víctimas.
Un homosexual consultado por SEMANA, cuya identidad pidió no ser revelada, afirmó que "las siete plagas de Egipto se quedan en pañales frente a lo que está ocurriendo. No solamente somos perseguidos, segregados y criticados, sino que ahora todo el mundo nos huye peor que si fuéramos leprosos gracias a la enorme campaña que han orquestado los medios de comunicación sobre la supuesta llegada del Aids".
Corroborando esta afirmación, el doctor Jorge Alfredo León, director del Departamento de Inmunología del hospital San José, centro piloto para la detección del Aids en Bogotá, dijo que las noticias sensacionalistas que se han dado del problema "son gravisimas, porque la población de homosexuales, que se sabe que son las víctimas preferidas, está en una situación psicológica lamentable, lo mismo que los hemofilicos que requieren permanentes transfusiones de sangre y que saben que los principales donantes son homosexuales y drogadictos". Además, fue enfático en afirmar que los tres casos de Aids de que ha hablado la prensa nacional obedecen a puras especulaciones, ya que nadie puede dar información real al respecto, y dije que el único caso que se conoce es el de un colombiano que adquirió la enfermedad en los Estados Unidos y que "literalmente vino a morirse en el país". Sin embargo, aceptó que en Colombia los inmunólogos están con las antenas puestas y que se están adelantando estudios en la población de alto riesgo, especialmente los homosexuales. "Estamos muy preocupados en el caso de que se llegue a presentar el primer caso, porque las consecuencias serían muy graves. Por eso les pedimos prudencia a los medios de comunicación", dijo León.
Por otra parte, el doctor Manuel Elkin Patarroyo, director del Departamento de Inmunología del Hospital San Juan de Dios, confirmó las informaciones obtenidas por el reportero de la revista y además agregó: "Hay 400 mil casos de paludismo en el país 50 mil de tuberculósis, que cobra 5 mil victimas al año, miles de niños que mueren diariamente de infecciones gastrointestinales y de meningitis... asi que es absurdo que se le dé tanta importancia a una enfermedad que en tres años en los Estados Unidos ha cobrado un poco más de 2 mil víctimas y que en nuestro medio, donde la población homosexual, guardadas proporciones es considerablemente menor, se vería significativamente disminuida". A su vez, otros científicos que han terciado en el tema, aunque aceptan que como fenómeno patológico nuevo hay que ponerle atención, coinciden en afirmar que las circunstancias no son tan dramáticas, aún en los Estados Unidos, como lo hacen aparecer los medios de comunicación. Y señalan que si la situación fuese tan grave como se ha querido mostrar, el Servicio de Salud Pública de los Estados Unidos-el más riguroso y eficiente en cuanto al control de enfermedades transmisibles o infectocontagiosas habría tomado las medidas del caso, así fueran las más drásticas. Y esto no ha sido así, a pesar de que se han destinado considerables partidas para la investigación de este síndrome. Por lo pronto, son prioritarios planes de acción en otros campos que, como en el cáncer del pulmón, presentan 70 mil casos nuevos cada año en los Estados Unidos.
Estudios de epidemiología adelantados en los Estados Unidos-en Colombia no existe ninguno sobre el Aids-demuestran que es muy difícil la "transmisión" del "agente" causante de la enfermedad y que aún es muy difícil adquirirla. Ninguno de los médicos ni del personal paramédico que hasta el momento ha estado tratando pacientes con Aids en ese país han contraído la enfermedad.
Eso permitiría deducir que su "contagio" no se produce ni por contacto casual, ni a través del aire como la peste, ni a través de la saliva, sino probablemente a través del semen o de la sangre, y especialmente en sujetos homosexuales y en drogadictos que comparten jeringas.
CALDO DE CULTIVO
EL SIDA, síndrome de insuficiencia inmunológica adquirida, como se tendría que llamar el Aids en español, aparece principalmente en hombres homosexuales menores de 50 años en los cuales se presenta el sarcoma de Kaposi (especles de ronchas rojizas o violáceas en los brazos, la cara y el tronco) o infecciones causadas por gérmenes llamados "oportunistas" (gérmenes extremadamente raros), y que se caracterizan por un alto índice de promiscuidad y sobre-exposición al semen (los pacientes tratados por Aids presentan un cuadro con un promedio de contactos sexuales con 1.100 hombres diferentes). Se ha podido establecer, además, que algunos de estos pacientes combinan comúnmente con sus prácticas sexuales, el uso de nitrato de isobutilo o de amilo, popularmente conocido como "poppers", aún inhalante o "droga recreacional" que produce una hiperexitación momentánea con una relajación del esfínter anal y que baja momentáneamente las defensas del organismo. Esto explicaría, en cierta forma, y de ser cierta la tesis de que el "contagio" puede darse a través del semen, el hecho de que sean los homosexuales un caldo de cultivo para la enfermedad cuyo origen aún se desconoce.
Otro caldo de cultivo, se ha dicho, son los hemofílicos. Sin embargo, se ha podido averiguar que hay investigaciones al respecto que señalan que antes de 1979, cuando empiezan a conocerse casos de Aids en los Estados Unidos, ya se daban muertes con cuadros clínicos similares a los que hoy se identifican con los del síndrome en cuestión. Actualmente se siguen muriendo los hemofílicos en la misma proporción y el hecho de que presenten inmunodeficiencia y mueran de infecciones por gérmenes "oportunistas", ha determinado que algunos los asimilen a las víctimas de Aids. Sin embargo, todavía no existen los datos suficientes para poder afirmarlo con certeza y es de anotar que no se conocen casos en los que el sarcoma de Kaposi haya estado presente.
Otro de los grupos supuestamente más atacados por el síndrome es el de los drogadictos que acostumbran inyectarse por vía intravenosa. Esto dio fuerza a la teoría de que la enfermedad también se transmitía por la sangre. Sin embargo, aún no está bien establecido cómo y porqué es que se produce el desmesurado desequilibrio de los anticuerpos de los pacientes de Aids Mientras hay quienes sostienen que se produce por un agente específico, probablemente un virus, otros sostienen que el sistema inmunitario de las víctimas se deteriora precisamente por la acción de una variedad de infecciones hasta tal punto que lo que sucede es que se ve tan alterado que literalmente "explota".
Las especulaciones no terminan y todavía habrá de correr mucha agua por debajo del puente. Lo cierto es que aún se desconoce su origen, aun que hay algunos síntomas que pudieran indicar que en un paciente se está configurando un cuadro clínico que pudiera hacer pensar a los médicos que tiene Aids. El 70% de los casos presentan síntomas tales como afecciones respiratorias prolongadas, inflación de los ganglios, pérdida considerable de peso, fiebre inexplicable y el sarcoma de Kaposi. Pero para diagnosticarlo es necesario realizar una serie de exámenes, entre ellos el de la medición de los linfocitos T, cuya función es atacar virus, hongos y parásitos, y cuya presencia casi nula es característica en los enfermos de Aids. Pero este examen no se realiza en Colombia y aún en los Estados Unidos su costo, 600 dólares, no es accesible a todo el mundo.
Es mucho aún lo que hay por investigar sobre la enfermedad y hay quienes sostienen que el hecho de que cobre sus principales víctimas entre -los homosexuales es lo que ha determinado el carácter sensacionalista que se le ha dado a la información sobre el tema. No sería raro, aseguran algunos, que sea una forma de llamar la atención sobre grupos minoritarios ya suficientemente golpeados por la segregación y el marginamiento, para producir nuevos motivos de rechazo hacia ellos.
UN CASO
Aids, esa misteriosa enfermedad que se caracteriza por el deterioro definitivo del sistema inmunitario, se ha convertido en la nueva amenaza de Andrómeda, en la peste moderna, para la cual no se ha descubierto aún cura alguna. Un caso comentado por la prensa internacional fue el de Kenny Ramsaur, quien integraba una pareja homosexual con Jim Bridges. En junio del año pasado Kenny comenzó a sentirse mal y a experimentar serios síntomas de fatiga, fiebre y náuseas. Mononucleosis fue el primer diagnóstico y reposo la primera recomendación. Pero Kenny se agravó.
Posteriormente se le descubrió un cáncer extraño y poco a poco se fue deformando. Los médicos se declararon impotentes para sanarlo. Viendo llegar su fin Kenny aceptó aparecer en TV y cinco días después murió.
Las fotografiís que se reproducen son impresionantes, Pero las deformaciones que presenta Kenny no son necesariamente exclusivas del Aids. Médicos consultados por SEMANA aseguraron que ese tipo de deformación también la experimentan al final de sus días muchos pacientes atacados por enfermedades de muy diversa Indole.-