INVESTIGACÓN

¿Carne mortal?

Un nuevo estudio reveló que comer carnes rojas habitualmente está asociado a un mayor riesgo de muerte.

28 de marzo de 2009

Una mala noticia recibieron la semana pasada los amantes de las carnes rojas y procesadas. Una investigación aparecida en la prestigiosa revista Archives of Internal Medicine concluyó que los consumidores asiduos de estos productos tienen tres veces más riesgo de morir por cáncer, problemas cardiovasculares y otras enfermedades, que aquellos que las comen menos y prefieren las carnes blancas y los vegetales. Los resultados se dieron a conocer después de analizar los datos de 10 años de rastreo a 545.000 estadounidenses entre los 50 y los 71 años. Durante el período comprendido entre 1995 y 2005, 70.000 personas del grupo murieron y se encontró que el 11 por ciento de las muertes en hombres y el 16 por ciento en mujeres se habrían prevenido si se hubiera reducido la ingesta de estos alimentos.

Entre los argumentos están que las carnes rojas y procesadas son la principal fuente de grasas saturadas y que durante su cocción a altas temperaturas se forman compuestos cancerígenos. Y como los comerciantes de carne ya pusieron el grito en el cielo, los científicos aseguran que no pretenden que se elimine de las dietas, sino limitarla, ya que también aportan otros beneficios si se come con moderación. Ed Young, de la organización Cancer Research del Reino Unido, les dijo a los medios que "nadie está diciendo que la gente debe evitar comer tocino y hamburguesas completamente. Pero la evidencia de amplios estudios nos dice que reducir este tipo de alimentos puede disminuir el riesgo de morir de cáncer y otras enfermedades".