FAMILIA

Criar, peor que un divorcio

Nadie duda de que los hijos traigan felicidad. Sin embargo, la crianza puede ser una de las experiencias más duras de un individuo.

22 de agosto de 2015

Así lo afirma un estudio reciente publicado en la revista Demography, según el cual tener hijos podría tener un impacto negativo, incluso peor al del divorcio, el desempleo o la pérdida de un ser querido. Las sociólogas Rachel Margolis y Mikko Myrskylä, autoras del trabajo, siguieron a más de 2.000 alemanes desde antes de que esperaran su primer hijo hasta que se convirtieron en padres. A la pregunta de qué tan satisfechos estaban con sus vidas, solo el 30 por ciento de los encuestados contestaron que se sentían igual de felices a cuando no tenían hijos. El resto sintió que su felicidad disminuyó durante los dos primeros años de crianza. Los autores del estudio señalaron que varias parejas decidieron no tener más hijos por esas experiencias negativas y asociaron este hallazgo con la preocupación de algunos países desarrollados por las bajas tasas de fertilidad.