ENTREVISTA

“Debemos democratizar la ciencia”

César Ocampo, director de Colciencias, explica en qué consiste el libro verde y su propuesta de incluir a toda la ciudadanía en la construcción de una política nacional de ciencia e innovación.

2 de diciembre de 2017

SEMANA: ¿Qué es el libro verde?

CÉSAR OCAMPO: Es un documento que estamos escribiendo, que contiene la propuesta de política en ciencia e innovación que el país debería seguir en los próximos años para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) propuestos por la ONU. Se llama libro verde siguiendo la tradición de varios países alrededor del mundo de poner a discusión de la ciudadanía documentos de política pública, los cuales son llamados de esta manera o green papers.

SEMANA: ¿Cómo participaría la gente en el diseño de la política nacional de ciencia e innovación?

C.O.: Quizás esa sea la mayor fortaleza del libro verde, que la política nacional de ciencia sea un proceso democrático de discusión con los ciudadanos. La ciencia no es un asunto de elites pues nos concierne a todos. Por eso vamos a preguntarle a la ciudadanía cuáles deberían ser los objetivos de esta política. Por supuesto que contaremos con la opinión de los académicos y científicos, de los empresarios y de las instituciones estatales. Esos aportes se recogerán en unas entrevistas y una encuesta disponible en www.quecaminocogemos.com. Allí los ciudadanos nos podrán decir cuáles ODS son más importantes para ellos y sus regiones. Esta información nos servirá de insumo para guiar la política nacional de ciencia.

SEMANA: ¿Por qué la política nacional de ciencia del país debe basarse en los ODS de la ONU?

C.O.: Los ODS son una serie de grandes propósitos sociales, económicos y medioambientales que 193 países acordaron para mejorar las condiciones sociales de vida y para solucionar los problemas que enfrenta nuestro planeta. El mundo y Colombia afrontan graves problemas, está más que demostrado que el calentamiento global es un hecho y hay que entender sus consecuencias. En específico, nuestro país tiene que satisfacer muchas necesidades básicas y construir una sociedad incluyente y en paz. En solucionar estos problemas que afectan a todos los ciudadanos, la ciencia juega un papel fundamental. De ahí que la política nacional de ciencia deba sincronizarse con los ODS.

SEMANA: ¿Su propuesta no se sale de los marcos de lo que debería ser una política nacional de ciencia que financie la investigación y favorezca el desarrollo tecnológico?

C.O.: Por supuesto que no. Desde antes de llegar a la dirección de Colciencias, siempre he tenido la firme convicción de que la ciencia tiene que resolver los problemas apremiantes de la sociedad: acceso a salud, crecimiento económico sostenible, etcétera. Por lo general, el país siempre se ha puesto metas técnicas como ser uno de los más innovadores de la región, pero eso no es una visión de sociedad, sino un objetivo. Además, esos objetivos se pueden cumplir sin solucionar los grandes problemas. En el mundo hay países innovadores y avanzados tecnológicamente, como India, que todavía tienen a la mayoría de su población en pobreza extrema sin acceso a la salud, a una alimentación digna… La innovación no está necesariamente ligada con el desarrollo humano sostenible.

SEMANA: Entonces, ¿qué pasará con la inversión en ciencia básica o dura?

C.O.: Esto no significa que no se deba financiar la ciencia básica, de hecho yo soy producto de inversión pública en ciencia básica. El dinero de mis becas en la Nasa provino del gobierno norteamericano. Nosotros, como entidad que financia la investigación y que da la política nacional en el sector, tenemos que hacer un balance entre la ciencia básica, que es fundamental para una sociedad, y la ciencia aplicada y sincronizada con la política de Estado, ¿cómo se balancea esa inversión? Es la gran pregunta. Pero no quepa la menor duda que, como director de Colciencias, le vamos a dar importancia a la investigación básica.

SEMANA: Usted hace mucho énfasis en los ciudadanos, ¿por qué realizar una política nacional de ciencia con la ciudadanía y no con un grupo de expertos sobre el tema?

C.O.: Ante todo porque es un ejercicio democrático. Y porque los ciudadanos eligen a sus representantes y pagan los impuestos con los que se financiará la política pública en ciencia de este país. En ese sentido, ellos tienen que participar y exigir que una política en ciencia busque solucionar sus problemas más apremiantes. Aquí radica el espíritu del libro verde: democratizar la ciencia.

SEMANA: Finalmente, ¿hasta qué día los colombianos pueden participar en la construcción del libro verde?

C.O.: El portal estará abierto hasta el 20 de diciembre y esperamos que más de un millón de empresarios, científicos y personas del común participen.