| Foto: Arman Zhenikeyev / Corbis

PSICOLOGÍA

¿El secreto de la infelicidad?

Un hábito aparentemente inofensivo y muy recurrente puede ser una fuente de estrés. Conozca de qué se trata.

5 de enero de 2016

El secreto de la felicidad es un enigma. Pero una de las fuentes de infelicidad es mantener activa la aplicación del correo electrónico en el teléfono celular, dice Lucy Clarke-Billings en un artículo publicado en la sección de Salud del diario The Daily Telegraph. De acuerdo con la autora, algunos psicólogos afirman que las constantes actualizaciones del correo electrónico se han convertido en una fuente tóxica de estrés.

La tecnología, que pone a la gente continuamente al tanto de sus correos, ha creado una cultura en la que las personas sienten que deben estar siempre disponibles para trabajar. El resultado es que una “etiqueta organizacional no escrita” se ha integrado al sitio de trabajo, y los empleados han desarrollado hábitos que son perjudiciales para su bienestar emocional.

Según Clarke-Billings, diferentes estudios han encontrado que revisar constantemente el correo y leer los mensajes por la insistencia de las notificaciones, que empujan a los usuarios a leer incluso cuando no están dentro la aplicación, produce tensión y preocupación. Los expertos recomiendan entonces apagar la aplicación del correo en el celular, pues ello podría aliviar la ansiedad tanto dentro como fuera de la oficina.

Los autores del informe de la sede en Londres del Future Work Centre, que llevaron a cabo una investigación psicológica sobre la experiencia de los empleados en sus lugares de trabajo, afirman que los correos son un “arma de doble filo”: promueven una comunicación eficiente pero pueden ser también una fuente de estrés.
Se debe, entonces, animar a los usuarios a tener el control sobre su correo electrónico y no a que se dejen controlar por él: “Se puede considerar activar la aplicación del correo cuando se quiere usar el correo y cerrarla en los periodos en los que el sujeto no quiere ser interrumpido por nuevos mensajes. En otras palabras, de debería usar el correo electrónico cuando la persona pretende usarlo, y no usarlo simplemente porque el correo siempre esté funcionando y notificando”, dicen los investigadores.

El centro encuestó a casi 2,000 trabajadores de varias industrias y con diferentes ocupaciones en el Reino Unido para indagar sobre los pros y los contras de usar el correo electrónico. Se encontró que uno de los hábitos más exitosos es dejar de ver el correo durante todo el día y revisarlo sólo por la mañana y en la noche.

Se encontró también una relación estrecha entre las notificaciones y la presión que ejercerían los correos sobre los usuarios. El doctor Richard MacKinnon, jefe de investigación del informe, dijo: “La gente que más habla sobre la utilidad del correo es también la que presenta los mayores niveles de estrés en relación al correo. Pero los hábitos que desarrollamos, las reacciones emocionales que tenemos ante los mensajes y la etiqueta organizacional no escrita alrededor del correo se combinan en una fuente tóxica de estrés que podría impactar negativamente en nuestra productividad y bienestar”.

Los resultados presentados en el encuentro anual de British Psychological Society’s Division of Occupational Psychology muestran que la presión relacionada al correo electrónico es más alta entre los jóvenes y desciende de manera continua con el aumento de la edad. Por otro lado, aquellos que trabajan en los sectores de las tecnologías de información, mercadeo, relaciones públicas, internet y medios de comunicación son los más afectados.

Los expertos sugieren manejar este estrés limitando la frecuencia con que se revisa el correo, dejando de lado lo que llegue en tiempos de descanso y reconociendo que, si se trata de un asunto urgente, probablemente los empleados llamarán.