EN BUSCA DE COLEGIO

A la hora de escoger plantel los padres deben tener primero claro qué es lo que quieren para sus <BR>hijos.

5 de julio de 1999

Independientemente de las congestiones en los cupos y de los elevados bonos que, aunque
prohibidos por el Estado, siguen siendo en la práctica un requisito indispensable en la mayoría de los
planteles privados, quizás el mayor problema que enfrentan los padres cuando se llega el momento de buscar
colegio a los hijos es el de decidir cuál de ellos puede ser el más apropiado para su desarrollo.A fin de cuentas
las libertades otorgadas por la Ley General de Educación son tan amplias en materia de orientación moral
y currículos académicos que la elección ya no se limita simplemente a la reputación de un plantel
determinado o a su ubicación preferencial en los resultados de las pruebas del Icfes. El proceso de
selección es mucho más complejo y según los especialistas está relacionado _o por lo menos debería
estarlo_ con lo que los padres esperan de sus hijos, dependiendo de las características del niño y, por
supuesto, de lo que el colegio esté en disposición de ofrecer.La referencia generalizada es la de intentar que
los hijos estudien en la institución en la que los padres se educaron. Pero esta posición, aunque
respetable si se tiene en cuenta que es lógico pensar que si los padres estuvieron cómodos en su
colegio también sus hijos lo estarán, no es suficiente a la hora de evaluar los posibles candidatos. ¿Será mejor
mixto o de un solo sexo?, ¿tradicional o nuevo?, ¿con énfasis en formación de valores o con preponderancia en
lo académico?, ¿libertario o riguroso?, ¿religioso o indiferente a los cultos?, ¿grande o pequeño? ¿bilingüe o
en un solo idioma? Para cada una de estas preguntas los colegios ofrecen sus propias respuestas,
dependiendo de lo que quieran para sus alumnos. En este sentido las instituciones tienen la obligación de
advertirles a los padres sobre el tipo de educación que buscan impartir.Sin embargo, en última instancia lo
más efectivo suele ser poner a funcionar el sentido común. "Los padres con alguna frecuencia tienden a
escoger el colegio sin conocerlo realmente", comenta Juana Morales de Vargas, directora del jardín infantil
Vueltacanela. "Y aunque resulte un mecanismo totalmente subjetivo, lo más aconsejable es visitar el
colegio a cabalidad, sentirlo en su actividad cotidiana, en sus propios salones y patios, de manera que
puedan llevarse una idea real de lo que es la institución. Después de todo son los padres los que más conocen
a sus hijos y se pueden dar cuenta de si es posible que se sientan a gusto o no en determinado plantel.
Ese sexto sentido suele ser definitivo".nLa excelencia académica es apenas uno de los factores por
analizarPara tener en cuentaA la hora de escoger colegio los padres deben responderse, por lo menos, las
siguientes preguntas:. ¿Mixto o de un solo sexo?. ¿Tradicional o nuevo?. ¿Grande o pequeño?. ¿Religioso o
indiferente a los cultos?. ¿Bilingüe o de una sola lengua?. ¿Con énfasis en valores o en la academia?Un niño
está preparado para entrar al colegio cuando:. Puede ir al baño solo.. Soluciona problemas simples como pedir
que le indiquen dónde queda el baño o que le amarren el zapato.. Toma decisiones simples, como elegir con
quién jugar y escoger entre dos prendas de ropa o entre un alimento y otro.. Es capaz de formular preguntas
a adultos nuevos.