Santiago García recibiendo la placa conmemorativa como embajador mundial del teatro. | Foto: Cortesía CCT

TEATRO

En Día internacional del Teatro, Santiago García recibe título de embajador mundial

En una celebración que tuvo lugar en la sede del teatro la Candelaria, Santiago García recibió este martes el nombramiento de embajador mundial del Teatro por la UNESCO.

27 de marzo de 2012

El director y fundador del teatro la Candelaria, Santiago García, recibió el martes 27 marzo el nombramiento como embajador mundial del teatro. Esta distinción se suma a la conmemoración de los 45 años del teatro y a toda una vida dedicada al oficio de las tablas.

Durante la conmemoración se mostraron las cinco obras más representativas del grupo entre ellas Guadalupe años sin cuenta.

La celebración contó con la participación de Mariana Garcés Córdoba, ministra de cultura; Clarisa Ruíz Correal, secretaria distrital de cultura, recreación y deporte (SCRD); Patricia Ariza, directora del Festival de Teatro Alternativo; Ana Marta de Pizarro, directora del Festival Iberoamericano de Teatro; Miguel Rubio, director del teatro Yuyashkani de Lima, Pepe Blablé, director del Festival Iberoamericano de Cadiz, y Patricia Moreno Linero representante del Instituto ITI.

En esta ocasión el día internacional del teatro tiene mayor significado en la ciudad. Se desarrollan en Bogotá dos festivales internacionales que se complementan con filosofías diferentes. El nombramiento de Santiago García es un premio a toda una generación de actores y a toda una forma de hacer y definir el oficio de la representación. 
 
Patricia Ariza nombrada por los presentadores del evento como la compañera, la hermana luchadora, habló sobre su experiencia con García y La Candelaria. "Santiago nos enseñó a ser actores compuestos, integrales", comentó Ariza quien además cerró sus palabras dándole un abrazo a Santiago.

Para Ana Marta de Pizarro, el nombramiento tiene un significado tanto político como personal. Recordó con amor esa primera obra que vio cuando era estudiante de la Unversidad Nacional. "Guadalupe años sin cuenta me marcó y me siento muy honrrada de estar aqui en este homenaje", afirmó de Pizarro.

Manuel JoséAlvarez, miembro del ministerio habló sobre el significado de un personaje como García. "El embajador es quien nos enseñó muchas cosas de lo que somos hoy, por su forma de ser y vivir como gestor del teatro y como actor". Es el irreverente, el jugador empedernido del teatro en el mejor de los sentidos, con ese juego y esa picardía con que siempre nos acompaña es maravilloso. Colombia nunca tendrá suficiente tiempo para agradecerle a usted", mencionó Alvarez. 
 
En representacion del gobierno de la ciudad la SCRD se refirió a Santiago García como él padre del teatro colombiano: “todos somos hijos de Santiago, la Candelaria es nuestra cuna, es un templo donde nació nuestra identidad”,  afirmó Ruíz Correal. 
 
Definido como un compañero de lucha por el grupo de La Candelaria, habló en la ceremonia Miguel Rubio, director de teatro en Lima, Perú.  Para él García también es su maestro. Resaltó además que el aporte del ahora embajador no es solo para el teatro sino en la television latinoamericana, "toda su filosofia y su forma de pensar el oficio de la representación. Gracias a él todos nos sentimos una familia en latinoamerica", recalcó Rubio.
 
Pepe Bablé, quien fue invitado a la mesa cuando él pensaba en ser un asistente más del evento conmemorativo, recalcó la enseñanza de García y lo que significa para el festival que él dirige. "Hablar de Santiago es recordar cuando tenía 20 años y se veía la necesidad de mirar hacia afuera", recordó Bablé. 
 
Palabras del embajador
 
Santiago García es un hombre mayor que conserva la vitalidad y juventud de un hombre de 20 años. Con él se han formado generaciones de actores nacionales y extranjeros. Ahora es reconocido con la distinción de ser el embajador mundial del teatro, que no espera viajar mucho, sino que el mundo venga a conocer el arte en Colombia.
 
Su discurso fue leido por cada uno de los integrantes del grupo La Candelaria, que se apropió de cada párrafo del documento.
 
Ya al final cuando recibió la placa que lo acredita como embajador, le regaló al público ya su grupo de Teatro la Candelaria estas palabras:

"Todos se han dedicado de manera sistematica a crear todos los días de la vida. Algunos camaradas se han ido porque el voltaje de estar acá es muy alto. No somos un coro de angeles, es dificil pero muy apasionante este grupo, porque es la posibilidad de tramitar las divergencias desde la creación artistica y de conocerse entre nosotros más incluso que a nuestras propias familias.
 
Por eso nos peleamos tanto porque estamos juntos muchos años, muchos meses, muchos días. A ustedes queridos candelarios todos mis homenajes. Espero que no abandonen la nave del ensueño".
 
Tambien a la familia teatral extendida, es decir a todos los grupos actores y actrices de este país que han elegido como modo de vida presentarse y representar los conflictos del mundo, de los paises de las comunidades y de las personas.
 
Somos todos y todas, como se dice gente de la vida alegre. Que toca, como en numerosos momentos reirnos a carcajadas de las pompas del poder. Y lo hacemos porque nos hemos reido, en primer lugar de nosotros mismos. Hoy somos ministros y mañana mendigos, pasado mañana ñeros de la calle o travestis o inclusive gerentes de banco.
 
Hemos sido capaces de representarnos a nosotros mismos y por eso es que no lo tomamos tan en serio. Tengo muchas medallas en mi casa y en el teatro, tenemos trofeos y pergaminos; pero nada remplaza la sonrisa de los espectadores, su atención y su entrega. En esto llevo 57 años de hacer teatro en este país y en los 45 años de la Candelaria creo que solo esa cálida recepción de la gente ha valido la pena todo esto.
 
Ha valida la pena vivir para crear, hemos vivido grandes alegrias y también muchos dolores, propios y ajenos. Nos duele que sabiendo que las artes son necesarias para la gente, no se puedan hacer porque la guerra es uno de los más grandes negocios.
 
Nos duele que la cultura no sea importante porque también se esta volviendo un negocio. Que los políticos no hablen de arte porque la política dejo de ser un arte y se volvio un cargo. Los políticos ya no hablan de arte y no es necesario porque nosotros los artistas si hablamos de política. 
 
Gracias por la nominacion como embajador. Acepto pero les quiero decir, con todo el respeto que me merece la diplomacia del mundo y de la ITI, que yo no creo que a estas alturas pueda aprender a ser un buen diplomático. Que pena si los hago quedar mal en el exterior pero me he caracterizado por ser imprudente, ese es mi modo de ser.
 
Mas que viajar a un país a saludar a la gente lo que me gustaría, como embajador, es que vinieran aqui de todos los paises del mundo a ver cómo es el teatro que se hace en Colombia, ver los festivales que hacemos aqui, incluyendo el alternativo.
 
Apoyar los actos de paz y festejar con nosotros la celebracion de la vida. Es que nadie puede quitarnos la celebración de la vida.  Muchas Gracias".

 Este día se celebra desde hace 50 años por el Instituto Internacional de Teatro,  para reconocer la condición de los artistas de teatro.