Hacer oficio, ¡qué estrés!

Ser ama de casa resulta malo para ambos sexos, según un estudio publicado en el Journal of Family Psychology. La razón es que hacer oficio después de una jornada de trabajo evita que el cuerpo reduzca sus niveles de la hormona cortisol, responsable del estrés. Los investigadores siguieron a 30 parejas trabajadoras con hijos, y encontraron curiosamente que, cuando ellos ayudan, las mujeres se relajan. Pero ellos solo reducen su nivel de estrés cuando ellas asumen el trabajo del hogar. El cortisol es necesario, pero tenerlo siempre alto no es recomendable para la salud, por lo cual los hombres deberían compartir con sus parejas las labores hogareñas.