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Hay que feminizar la sociedad

SEMANA.COM entrevistó a la politóloga española, Victoria Camps, acerca del papel del nuevo feminismo en el mundo.

10 de julio de 2000

Victoria Camps, filósofa y politóloga, es profesora de la universidad de Barcelona en España. Desde hace varios años viene trabajando el tema del nuevo feminismo en el mundo. Para ella el desafío más reciente de las mujeres no es parecerse a los hombres sino rescatar valores exclusivamente femeninos para contagiar a los hombres de eso. SEMANA habló con ella sobre el tema.



¿ Qué cree usted que caracteriza el feminismo de hoy en día a diferencia del siglo pasado?



Por una parte el feminismo está bastante desconcertado porque muchas cosas se han logrado sobre todo en países más avanzados. Yo creo que hay una igualdad jurídica más o menos conseguida y hay algunos temas que son en los que se está insistiendo más hoy, uno de ellos es lo que se llama el techo de cristal, que es que las mujeres están presentes en muchos sitios pero no acaban de acceder a los puestos de responsabilidad de empresas, de bancos o de política, se está intentando que haya lo que se llama una democracia paritaria bien por un sistema de cuotas que obligue por ley a que halla una representación del 50 por ciento, mujeres - hombres. Hay otro tema que es el tema de bella silagada, yo creo que ese no está resuelto, es un tema que las feministas no acaban de abordar del todo, yo creo que el discurso feminista se queja sobre esto pero no acaba de ofrecer vías, que las mujeres se encuentran por una parte liberadas y por otra parte con la carga de la vida familiar, los hijos, etc. Yo creo que son los dos temas fundamentales.



¿ Qué ha pasado en la relación de la mujer con su hogar?



En España la natalidad ha bajado muchísimo y parte se debe a eso. La mujer ha empezado a trabajar y piensa antes en su vida profesional que en tener hijos. La maternidad va mucho más tarde de lo que iba antes, claro ahora tienen menos hijos y en muchos casos no los tiene. Pero también es verdad que en el feminismo se está optando más por lo que se llama el feminismo de la diferencia y de la igualdad. Las mujeres nos hemos dado cuenta que tenemos algo que aportar a la sociedad que es distinto y eso tiene mucho que ver con el papel de la mujer como madre, como cuidadora de los demás, de los hijos de los padres, ancianos, enfermos y de la casa.

El primer feminismo, el de el siglo pasado (me refiero al siglo XX) relacionaba a la mujer con valores como la sumisión, la esclavitud y la dominación. Ahora nos damos cuenta que la mujer puede aportar a la sociedad unos valores distintos y eso hace que a las mujeres les parezca rico ir vestidas de mujeres y cultivar la maternidad, los sentimientos y todo aquello que parecía ser más femenino que masculino.



Antes era impensable que una mujer usara pantalón. Hoy en día hasta los hombres están empezando a usar falda. ¿Cómo ve usted esa tendencia de la moda?



Si es cierto, muchos hombres usan pendientes y pelos largos. La estética se ha mezclado más y lo unisex se ha venido generalizando. Me parece bien, es un muestra de que se ha conseguido una igualdad que trata de evitar prejuicios en ese sentido, entonces la mujer puede hacer lo que quiera y el hombre puede hacer también lo que quiera. Incluso en este ámbito de la estética yo diría que había más represión por parte de los hombres que de las mujeres. Las mujeres pueden vestirse como quieran, los hombres tienen un tipo de estética más uniforme y les ha costado más adaptar cosas que se han considerado siempre como femeninas, como los pendientes o como el pelo largo.



¿En la actualidad cuales son las diferencias entre hombres y mujeres en el ámbito laboral?



Todavía hay una injusticia marcada que porque básicamente las leyes no se cumplen. Hay diferencias de salarios por ejemplo, las mujeres cobran menos, y siempre tratan de pagarle menos. Hay estudios que comprueban que en cargos de exigencia laboral igual, son mejores pagados los hombres que las mujeres. Además hay una discriminación cuando las mujeres comienzan a ocultar que quieren tener hijos cuando buscan trabajo porque saben que hay algunos empleadores que prefieren no contratar una mujer que está planeando tener hijos. Ese tipo de discriminaciones todavía se dan. Igualdad hay formalmente no públicamente.



Hace poco en Colombia la Corte Constitucional decidió que por ley la mujer debe acceder al 30 por ciento de los altos cargos directivos. ¿Qué opina de eso?.



Yo tengo dudas, el que haya que forzar el que las mujeres estén en la política, aunque hay que hacerlo porque o sino no se consigue que las mujeres estén tan presentes como los hombres. Que haya que hacerlo por ley es otra cuestión. Tenemos un modelo que son los países del norte de Europa que han conseguido y han tenido una representación casi de un 50 por ciento y no lo han hecho por ley sino que lo han hecho por acuerdos internos de los partidos políticos de forzar sino el 50 por ciento por lo menos el 40 de mujeres en las listas. Y casi es mejor sistema el no hacerlo por ley.



¿Cree usted que forzar esto por ley, discrimina más a la mujer que no está alcanzando un cargo por sus méritos sino por obligación?



Eso es verdad, lo que pasa es que llevamos muchos siglos en que la mujer ha estado ausente de casi todo. Todavía le cuesta mucho trabajo a la mujer competir con el hombres en política y en altos cargos directivos. Para el hombre ir renunciando a esos cargos que son de bastante poder es difícil, entonces hay que forzarlos. Yo estoy de acuerdo en que la mujer debe acceder a los altos cargos por su inteligencia y no por ley, pero no creo que por el hecho de forzar un porcentaje de mujeres que accedan a esos cargos, signifique que las mujeres sean menos inteligentes.



¿En igualdad de preparación laboral se sigue prefiriendo al hombre ?



Yo creo que incluso aveces cuando las eliges, una mujer tiende a preferir al hombre. Y es por la ‘inercia’, siempre hemos buscado a hombres y entonces en principio se piensa más en el hombre que en la mujer. Eso hay que sacarlo, para que se piense en la mujer y por eso hay que obligarlos a olvidar para acostumbrarnos a que sea así.



¿Cree usted que en el ámbito sexual la mujer sigue siendo reprimida?



Sin duda. La represión de la mujer ha sido en gran parte represión sexual y aunque la mujer se ha liberado de muchos tabúes, sigue mintiéndose en ese sentido. La relación sexual no creo que esté equiparada todavía, los tiempos son distintos y yo creo que falta una capacidad de comprensión, de no entender que en el caso de la relación sexual la mujer siempre es violada de algún modo, de ahí esa concepción del acto sexual como la penetración básicamente y no nada más. Muchas mujeres tienden a fingir los orgasmos por esa razón. Hay una necesidad de comprenderse mejor mutuamente y de adaptarse mejor el uno al otro.



¿ Usted cree que la mujer aún sigue sintiendo la necesidad de satisfacer los placeres del hombre?



Sí pero quizás el hombre va sintiendo también la necesidad de satisfacer a la mujer.



¿ Usted cree que a los hombres les atrae mucho las mujeres parecidas a sus madres, más de la casa, al momento de casarse?



Lo que ocurre es que esas mamás ya están desapareciendo. Las mamás de mi generación ya hemos sido bastante liberadas, entonces ese modelo de la mujer de su casa es un modelo que va desapareciendo como algo que la mujer hace exclusivamente. Cada vez son menos las mujeres que solo son mujeres de su casa. Al hombre le gusta más una mujer que sea ejecutiva, sexy y que también se ocupe de la casa.



La mujer tiene una tendencia a hacer feliz a los demás. Al marido, a los hijos, etc. La felicidad de la mujer es la felicidad de la gente que la rodea. ¿Qué opina?



Eso lo siente la mayoría de las mujeres porque han sido educadas para esto. Pero es necesario que la gente se siente feliz haciendo felices a los demás y eso es lo que yo decía que es un valor más femenino que masculino que no habría que perder y no solo las mujeres, hay que contagiar al hombre de este valor. La felicidad de los demás también nos hace felices a nosotros, entonces es bueno que la gente sea un poco altruista, lo que pasa es que se tiene una cara negativa por que piensa que los demás son infelices por su culpa, la mujer tiene más sentimiento de culpabilidad que el hombre. Eso es negativo, por que en cuanto empezamos a tener una vida propia liberada, nos sentimos culpables por que no podemos atender al hombre o a los hijos.



Usted afirma que la vida privada de las mujeres debe tener un tratamiento político. ¿Por qué ?



Hay una frase que se usa mucho en el discurso que dice que lo privado no es político, quiere decir que la política no entra en los conflictos de la vida privada. La desigualdad de la mujer en la vida privada no se va a resolver nunca, y si no se resuelve la vida privada, la mujer seguirá siendo igual en el mundo laboral y en la vida pública. La mujer no quiere renunciar a la vida familiar o a tener hijos, está más apegada a todas esas cosas que el hombre. Para que la mujer pueda seguir haciendo eso hay que ayudarla, con permisos de maternidad más largos de los que hay para que la mujer quiera tener hijos y vea que el tener hijos no significa perder el puesto de trabajo ni perder oportunidades profesionales. Eso quiere decir que lo privado es político, y que los políticos no se pueden lavar las manos.



¿ Qué falta por conseguir ?



Falta por conseguir igualdad en la vida privada y llegar a ocupar los puestos más importantes donde se toman decisiones. Por ejemplo hay cantidad de mujeres periodistas, pero cuantas mujeres son directoras de medios de comunicación importantes.



¿ Ese cambio tiene que ser más cultural que legal?



Legal también pero es que hay muy pocas cosas legales. Hay países que todavía están muy atrasados y hay muchas cosas que construir. Es muy difícil cambiar las costumbres, cambiar las mentalidades es muy difícil, vemos que a través de la televisión o de la publicidad, el modelo de mujer que llega es bastante anacrónico, las mujeres que se asocia con detergentes, que se ocupa de la casa, eso todavía la publicidad lo está defendiendo mucho, eso entra. Entonces son las mismas mujeres las que no llegan a cambiar.



¿Hacia dónde se dirige el nuevo feminismo?



El feminismo de los primeros años pretendía de alguna forma masculinizar a la mujer, esa era la forma de igualarla, querían ser como hombres, y la figura de la mujer feminista de los primeros tiempos era hombruna. Hoy las feministas están por lo otro, vamos a conservar lo que nosotros tenemos para exportarlo, para contagiarlo a la sociedad. Hay que feminizar a la sociedad, se puede decir que todo lo que ha sido exclusivo de la mujer durante muchos siglos debe salir afuera y la sociedad debe ser más femenina.



¿Cuales son esos valores femeninos?



Esos sentimientos de compasión, de estar más cerca del otro, incluso también un sentimiento más sagaz a los detalles de delicadeza, de saber escuchar, se consideran valores más desarrollados por la mujer que por el hombre, porque por el tipo de trabajo le obligaban a desarrollar esos valores. Esos valores son fundamentales, no deben desaparecer por que la mujer se libere, lo que hay que hacer es que los hombres sean más femeninos.