Jubilados, pero activos

7 de noviembre de 2009

Aunque la mayoría de las personas sueña con pensionarse cuanto antes para dedicarse a descansar y llevar una vejez saludable, un grupo de investigadores acaba de demostrar que la mejor forma para mantener una buena salud es no desvincularse del todo de la vida laboral. Así lo reveló un estudio de la Universidad de Maryland, en Estados Unidos, al examinar los datos de más de 12.000 jubilados entre los 51 y 61 años, y encontraron que aquellos que continuaron con empleos temporales después de su retiro padecen menos enfermedades que quienes se quedan todo el día en casa. Desde 1992, los científicos han realizado cuestionarios a los pensionados cada dos años y han observado que presentan menos enfermedades graves como hipertensión, cáncer, afecciones pulmonares y de corazón, así como mayores grados de funcionalidad y mejor estado síquico, comparado con los que están completamente retirados. El asunto no es que las personas mayores renuncien a su pensión sino que eviten el sedentarismo. El estudio fue publicado en el Journal of Occupational Health Psychology.