entrevista

La danza de las neuronas

¿Qué es la conciencia? ¿A dónde va el yo durante el sueño? ¿Qué es lo característico del cerebro humano? SEMANA habló con uno de los neurocientíficos más importantes del mundo, el colombiano Rodolfo Llinás, para tratar de resolver estas y otras dudas.

4 de marzo de 2006

SEMANA: ¿Qué es la conciencia para Llinás?
Rodolfo Llinás: Yo la definiría como un proceso fisiológico, que le permite al individuo moverse de modo inteligente.

S: Eso sería una definición básica...
R. Ll. Eso sería una definición absolutamente básica. Se requiere un cerebro para poder moverse inteligentemente. Si no se tiene cerebro, no se puede tener intencionalidad motriz. Un buen ejemplo son las plantas, que no tienen cerebro porque no se desplazan activamente sobre la superficie de la tierra (no huyen de los incendios).
El cerebro nunca se puede abordar como una exclusividad humana. Hay que pensarlo como un proceso evolutivo. A medida que el cerebro se hizo más complejo, ese evento creó ambientes social más complejos. En otras palabras, paralelamente y como consecuencia de la evolución cerebral, evoluciona también la estructura social de los animales, hasta llegar al hombre, que vive en un alto de grado de complejidad no sólo por la modificación física que tiene sobre el medio ambiente (ciudades etc.) sino por la estructura social que su enorme cerebro engendra (literatura, religión, arte, leyes, ciencia).

S: ¿Dónde ocurre la conciencia?
R. Ll. No ocurre en un lugar específico: es una propiedad distribuida. El problema fundamental que hay que reconocer para poder entender el sistema nervioso es realizar que no esta organizado como lo pensaba Descartes. Él supuso que la conciencia podría ubicarse en un punto, en el cual estaría localizado el individuo. Pero la conciencia es una propiedad distribuida: la visión ocurre en ciertas partes del cerebro, el sonido en otras, el tacto en otras. Luego se juntan, temporalmente, para formar una “imagen” del mundo externo (como se juntan los sonidos de los diferentes instrumentos musicales de una orquesta para formar una estructura musical).

S: ¿Pero la autoconciencia, la experiencia de sí mismo, ocurre en algún lugar del cerebro, así como la visión ocurre en un lugar y el sonido en otro?
R. Ll. No. Por la misma razón que no hay un solo lugar para la visión o para la audición. Explico: si usted piensa en su propia existencia, puede dice: “yo soy, mi imagen corporal, mi tacto”, o “yo soy mi olfato”. Puedo cerrar los ojos e imaginarme como huele una manzana. En ese momento estoy no solamente teniendo la percepción del olor, sino también la percepción de que yo estoy oliendo una manzana. La parte del yo, que parece que fuera uno solo, es en realidad muchos ‘yoes’. La autoconciencia estaría tan distribuida como las demás funciones del cerebro.

S: ¿A eso se refiere usted cuando habla de la danza de las neuronas?
R. Ll. Exacto. Imagínese qué pasa cuando uno levanta una pesa. Los músculos se contraen, porque muchas fibras musculares se acortan al mismo tiempo, porque si funcionaran separadamente no engendrarían suficiente fuerza (como los caballos cuando halan, la fuerza muscular total es la suma temporal de cantidad de esfuerzo de cada fibra). Lo mismo ocurre con la percepción. Para que ésta exista, se requiere que muchas neuronas se activen al mismo tiempo. En el caso del músculo es fácil ver cómo se suma la fuerza, porque todas están unidas a un tendón. Cómo se suma la percepción es algo que no está muy bien definido todavía. Pero sabemos que mientras más células activas, hay una percepción mayor o mas especifica.

S: ¿Qué sería lo característico del cerebro humano?
R. Ll.El lenguaje y la capacidad de percibir de modo muy completo el mundo externo. El animal humano tiene buena visión, buena audición, no tan buen
olfato... pero los tres receptores importantes –vista, oído y tacto están muy bien desarrollados. Además, está bien desarrollado el sistema muscular y de organización de movimiento. Así, la ventaja enorme que tiene el animal humano es su destreza manual y la capacidad para generar movimientos nuevos, basados en percepciones. La capacidad manual es increíble –la capacidad de tocar un instrumento musical, de construir objetos y herramientas es simplemente inigualada por los otros animales.

S: ¿Eso quiere decir que los animales no tienen lenguaje?
R. Ll.Tienen lenguaje, pero no con la profundidad semántica del nuestro.
Pero quizás lo más profundo de la capacidad cerebral humana es la imaginación. es decir la capacidad de inventar, de crear cosa que no existían antes. Esa es muy interesante por que tiene que ver con las cortezas cerebrales y los sistemas de asociación. Allí se toman pedazos de la realidad y se forjan sueños, ideas, imágenes, que luego se construyen y aparecen como objetos, conceptos o comportamientos, nuevos en el mundo externo. Uno puede imaginarse en la cabeza un pinocho que no existe, imaginarse cómo va a cortar la madera para hacerlo, cómo va a colocar los brazos y las piernas, incluso imaginar cómo va a sonar cuando se cae. Se puede tener una imagen casi completa de las cualidades de un sistema que aún no existe. Esa capacidad de alta originalidad la tenemos solamente los humanos.

S: ¿Qué pasa con el yo cuando estamos dormidos?
R. Ll.No existe, porque el yo no es un objeto, es un estado funcional.

S. ¿Y cuando soñamos?
Ll. Cuando soñamos puede haber la presencia del yo, o puede no haberla. Hay estados del sueño en el que el ‘yo soy’ aparece, y uno es el centro del sistema, como cuando se está despierto. O uno puede ser un sistema que observa el mundo externo. En ese momento otro objeto, u otros objetos, u otras personas pueden ser el punto central de la percepción, y uno simplemente un espectador viendo una película o una obra de teatro, donde otros son los protagonistas.

S. ¿Por qué dice usted que vivimos en una especie de realidad virtual?
Ll. Imagínese que los sonidos no existen afuera, son tan solo una interpretación que hace el cerebro. Los colores tampoco existen afuera. La sensación que tenemos de tacto o de dolor no existe fuera de nuestra cabeza. El sistema nervioso ha desarrollado un sistema propio para caracterizar el mundo externo con propiedades que no existen afuera. La ‘realidad’ es tan solo un constructo que nos permite movernos inteligentemente, interactuar, etc.

S. ¿O sea que no tenemos posibilidad de saber qué es exactamente lo que existe afuera?
Ll. No. Que hay una realidad no lo dudo, que tan “real” es esa realidad que observamos es el problema. Son simplemente trucos de la evolución del cerebro para “distinguir” propiedades externas, pero que como tales no tienen que existir afuera, como los colores o los sonidos.

S. Usted se define como un monista. ¿Qué quiere decir eso?
Ll. Quiere decir lo siguiente. En ciencia, el objetivo es siempre tratar de reducir todo lo que sabemos a principios más simples y más generales. Es decir, tratar de generalizar la complejidad del mundo a principios sencillos en el sentido de ser medibles. Un buen ejemplo es Newton, quien viendo la complejidad del universo planteó una sola ley: la ley de la gravitación que con una sola tajada explica la estructura microscópica del universo y permite predecir su comportamiento futuro. El método científico tiene como fin el reducir detalles en función de principios, ideas puras, sencillas y poderosas. Es decir, el reducir los fenómenos complejos a la suma de varios fenómenos más simples. y éstos aún a fenómenos más simples... La ciencia trata de reconstruir la historia del universo desde su principio, que fue muy sencillo, para entender los procesos de combinación de tales principios para general el todo que nos rodea, incluyendo a nosotros mismos. El principio es uno: se puede simplificar todo si se conocen sus leyes fundamentales que lo organizo. La vida es simplemente el producto de un cierto número de leyes que son finitas en número y que permiten que todo exista. Así, todos los millones de colores que percibimos son simplemente la mezcla de tres colores básicos (rojo azul y verde).
Cuando digo que soy monista, estoy diciendo que pienso que la cognición humana es una propiedad del cerebro. Nada más que eso, y nada menos. Estoy diciendo que tales propiedades se puede reducir los elementos fundamentales, de materia y física. Para las personas religiosas eso no debe ser un problema, la materia y la física es para ellos obra de Dios.

S. ¿Eso no tiene unas implicaciones morales?
Ll. No. ¿Cómo morales?

S. Es decir, si usted es monista, no es dualista.
Ll. Pues claro, por definición.

S. Es decir que no haría una distinción esencial entre el cuerpo y el alma
Ll. Para mi no hay tal diferencia. El otro problema es que no se puede definir el alma sino como un articulo de fe. Para mi cuerpo y el pensamiento corresponden a procesos físico-químicos que se pueden definir en el campo científico. Pero, ¿de qué me está hablando cuando menciona moral?

S. Digamos que el dualismo es una filosofía que sustentaría muchas creencias religiosas del catolicismo, por ejemplo.
Ll. ¿Y eso qué tiene que ver con la moral?

S. Tiene que ver con la moral católica...
Ll. Moral católica? Yo pensé que la moral era universal. Los diez mandamientos son mandamientos para todas las sociedades. No robar, no matar, eso no tiene nada qué ver con religión, tiene que ver con la estructura social.

S. ¿Es decir que usted no vería distinciones entre la moral de una religión y la moral de otra?
Ll. Hay muchas religiones y la gente o es buena (es decir, tiene capacidad de apreciar y respetar la existencia de los demás), o no lo es. Pero eso no tiene nada que ver con las religiones, porque según entiendo, los humanos nos matamos, independiente de qué religión tengamos. Para mí me la religión y la moral están relacionadas, pero muy tenuemente. El hombre bueno quiere y respeta al prójimo porque es prójimo es humano no porque prójimo pertenezca a una cierta religión.

S. O sea que usted abogaría por una moral universal, más allá de las religiones.
Ll. Es que es la única que existe. Claro, si usted fuera Mahometano diría que la única moral es la Mahometana. Entonces yo, suponiendo que soy protestante, le preguntaría: ¿pero es diferente a la mía? La respuesta es no: es igual. ¿Cuál es a diferencia? Tan solo el nombre que le da el contenido es el mismo.

S. Recientemente leí sobre un proyecto en el que interviene la IBM, y en el cual están tratando de simular el funcionamiento del cerebro con computadores. ¿Cuál es su opinión de esos esfuerzos por entender el cerebro humano a partir de una reconstrucción artificial? ¿Se puede entender mejor al cerebro por esa vía?
Ll. Yo creo que no, y lo he dicho ya públicamente muchas veces. La parte importante de hacer un modelo del cerebro, como está tratando de hacerlo la IBM, es que vamos a entender mucho respecto a las propiedades de las redes neuronales artificiales. Ahora, el problema es que esas redes artificiales, cuando estén terminadas, no van a hacer nada especial . Son apenas modelos que permiten hacer “contabilidad”. Es la diferencia entre la descripción y el objeto descrito . Los modelos está hecho de partes “muertas”, es decir de partes que no tienen propiedades muy profundas. Son apenas una caricatura del cerebro. No tendrá propiedades interesantes. La estructura del cerebro real tiene otras propiedades (como la subjetividad) que no se pueden simular con circuitos electrónicos.
Imagínese: las células de las cuales está hecho el cerebro evolucionaron por casi 3.000 millones de años. Eso no es un tiempo astronómico, es un tiempo galáctico. El universo tiene 13.000 millones de años. Las células tendrían casi una tercera parte de toda la edad del universo. Son elementos profundamente antiguos, y por lo tanto increíblemente complejos. Que se puede esperar, pues, de un sistema de células artificiales una encima de otra “a ver qué pasa”. Los resultados no nos van a dar las propiedades realmente interesantes del cerebro.

S. ¿Para qué podrían servir entonces estos experimentos?
Ll. Sirven porque van a dar una idea de la conectividad de las células o de su número... Es casi como hacer una buena lista de los elementos del cerebro. Pura contabilidad.

S. ¿Cuáles son objetivos principales de la neurociencia a mediano plazo?
Ll. La neurociencia tiene dos direcciones principales. Una es de ciencia básica y consiste en entender la naturaleza de lo que somos. Al fin y al cabo, entre todos los animales, nosotros somos quienes más dependemos del cerebro. No tenemos gran fuerza, ni cuernos o dientes enormes. Nacemos perfectamente incapacitados. Nuestra capacidad de sobrevivir tiene que ver con nuestra capacidad de aprendizaje de la cultura humana. Somos animales perfectamente cerebrales. Por lo tanto, aprender cómo funciona el cerebro es aprender la naturaleza de lo que somos. No solamente por razones filosóficas y artísticas sino por la sencilla razón de entender mejor lo que es la vida, se requiere que la neurociencia nos explique lo más claramente posible qué es el cerebro y cómo funciona.
El otro aspecto es el de la ciencia médica. A medida que la vida se prolonga, muchos de lo problemas que tenemos se hacen más y más neurológicos. Los riñones se pueden remplazar, el hígado se puede remplazar, pero el cerebro no. Por eso es muy importante entender cómo malfunciona el cerebro y cómo corregirlo.
Ahora bien, la primera dirección, la de la ciencia básica, es muy importante también desde el punto de vista social. A medida que entendamos mas nuestra naturaleza nos vamos a dar cuenta que las pequeñas diferencias en la anatomía externa no son tan importantes como pensamos hoy. En realidad no son para nada importantes. En un momento dado a la gente se la juzga por su anatomía externa (si son altos, si son bajitos, negros, amarillos, etc.). A medida que entendamos mejor cómo funciona al sistema nervioso vamos a entender mejor cuán similares somos todos entre nosotros. Y esto es muy importante porque muchas de las injusticias sociales se deben al desconocimiento, o mal conocimiento, de las propiedades de los humanos. A la gente se la maltrata, se la desprecia por razones que no tienen nada que ver con la realidad, sino por una mala percepción de ésta. Los avances de la neurociencia van a repercutir muy profundamente en la estructura social, en el modo como entendemos, por ejemplo, la justicia.

S. Y su trabajo, ¿en este momento hacia dónde está enfocado?
Ll. Mi trabajo nunca ha estado enfocado. ¿En qué parte del horizonte me encuentro? Sigo trabajando en las propiedades celulares en diferentes partes del sistema nervioso; en las bases físicas de la percepción; trabajo en enfermedades del sistema nervioso; en la evolución del sistema nervioso. Siempre he trabajando en varios frentes al mismo tiempo.

S. En cuánto a la parte médica de la neurociencia, ¿uno podría decir qué tan lejos estamos de curarlas?
Ll. Hay una enorme posibilidad de ayudar a la gente con drogas o con cirugías. Se está trabajando mucho en eso en este momento. El Sistema nacional de salud de Estados Unidos acaba de decidir que la estimulación profunda del cerebro es el tratamiento más importante del siglo XX, en cuanto a los problemas del sistema nervioso se refiere. Eso ayudará mucho en el avance de la cura de las enfermedades neurológicas.

S. ¿Qué opina de las investigaciones del doctor Richard Davidson sobre los efectos de la meditación en el cerebro?
Ll. Ese tipo de entrenamiento cerebral, sirve sin duda para varios fines. Pero a mí no me parecen tan diferentes de lo que uno hace todos los días cuando estudia o cuando se piensa. Yo los critico un poco, porque si bien el tipo de vida que uno puede tener si hace ese tipo de ejercicios, resulta mejor desde el punto de vista, de “paz intelectual”, no es un buen fin per se . Si me gasto la vida haciendo meditación, no voy a escribir música o a hacer estudios científicos o sociales que mejor la calidad de vida de los demás. Tal obsesión con la meditación es profundamente egocéntrica solo le sirve al que la hace, me parece profundamente egoísta. Las sociedades dadas a la meditación tiene pequeños aportes al bienestar humano comparados con el desarrollo tecnológico e higiénico de un grupo social.
Mi pregunta es, ¿cómo es posible que en países especializados en meditación no haya matemáticas o física, o arte que valga la pena? Pienso que es un poco raro utilizar el cerebro simplemente para sentirse bien. Me parece que esa forma de continuo masaje cerebral como la razón de ser de nuestra existencia es una forma triste de malgastar el cerebro.

S. ¿En qué cosiste la creatividad desde la perspectiva de la neurociencia?
R. Ll.Tiene que ver con las propiedades intrínsecas del cerebro. La creatividad se puede aprender si a uno le enseñan a pensar. La creatividad esta relacionada con la capacidad de crítica. Pero esto no es algo obvio. Piénselo: dada una realidad, uno puede aceptarla (en cuyo caso no hay creatividad de ninguna especie), o puede no aceptarla. Si no la acepta, requiere entonces de otras posibles soluciones o perspectivas para entender lo que está viendo. El pensamiento crítico y la creatividad son primos hermanos. La creatividad sale de aprender a pensar críticamente.
Ahora, la creatividad nunca es automática. Las ideas brillantes raramente se originan en completa ignorancia.. En algunas situaciones puede ocurrir. Por ejemplo en personas como Mozart, quien a los 3 años ya tenía ideas originales. Pero esa son propiedades de genios o en algunas casos lo que se llama un idiota sabio, un idiot savant, en quien la estructura intelectual es congénitas pero muy especializadas. En la mayoría de los casos, sin embargo, se requiere esfuerzo para ver las cosas desde otro punto de vista. Se es creativo porque se trabaja para tener una perspectiva diferente. Y finalmente una respuesta corta para el maestro Gabo, amigo entrañable quien me preguntara que es el amor. Respuesta: “El amor en un patrón de acción fijo, emocional” .


Esta entrevista fue realizada vía telefónica por Rodrigo Restrepo Ángel, periodista de Semana. Tuvo lugar en la tarde del martes 28 de febrero de 2006.
Muchas gracias al Profesor Llinás por la generosidad con su tiempo y sus explicaciones.