LA PILDORA DEL DESEO

EN ESTE MOMENTO NO HAY NADIE MAS feliz sobre el planeta que las parejas noruegas. ¿La causa? Ese es el único país del mundo donde se está comercializando un nuevo fármaco que promete el éxtasis sexual. La semana anterior los medios dieron a conocer los sorprendentes resultados de las pruebas realizadas entre hombres "con deseos sexuales inferiores al promedio". El 83 por ciento de los pacientes respondieron al tratamiento, aunque los efectos variaron de un "leve aumento" del deseo sexual a un "aumento muy pronunciado". Algunos señalaron incluso que su impulso sexual era difícilmente controlable.
Aunque por siglos la gente ha atribuido a los alimentos poderes afrodisíacos -ostras, caviar, higos, trufas, espárragos, entre otros- nadie se había imaginado que el secreto para fortalecer y revivir la pasión estaba en uno de los alimentos más sencillos y antiguos: la pastilla -llamada Libido- es fabricada con extractos de huevo de gallina, incubado durante nueve días y enriquecido con ingredientes medicinales. El fármaco se ha comercializado en Noruega desde 1994 como un suplemento dietético. Unas 100 cápsulas, que duran tres semanas, cuestan el equivalente a 150 dólares.
Pero el costo no parece ser un problema para quien anda con la libido apagada. El afrodisíaco químico que la humanidad ha esperado para aumentar la libido está causando furor y, se dice, que desde que empezó a comercializarse en Noruega los índices de divorcios han disminuido. Las parejas que han recuperado el deseo sexual no paran de comentar sobre las bondades del fármaco.
Sin embargo no es necesario ir a Noruega para recuperar el deseo sexual. Durante una conferencia de prensa realizada la semana anterior en la Academia de Ciencias de Nueva York, el organismo informó que el nuevo fármaco será sometido a pruebas durante los próximos tres años en hospitales de Estados Unidos y Canadá. "El mundo ha vivido con la ilusión de afrodisíacos químucos durante varios siglos -dijo el doctor Gerald Bain, endocrinólogo de la Universidad de Toronto-. El estudio inicial promete sorprendentes resultados, pero si el fármaco es el afrodisíaco ideal es algo que debe demostrarse de una forma científica", agregó el especialista.
En los próximos tres años un total de 500 hombres y 500 mujeres en 20 hospitales de Estados Unidos y Canadá participarán en el experimento con las cápsulas. Durante este lapso los endocrinólogos analizarán periódicamente los efectos en los participantes para detectar los daños y beneficios. Por lo pronto, una empresa con sede en Barbados, MPS International, ya tiene los derechos para comercializar Libido en Estados Unidos, México y Canadá.
Los investigadores afirman que una de cada cinco personas sufre de un deseo sexual disminuido, y esta es la causa más frecuente de consulta a los sexólogos. El adormecimiento de la libido puede ser devastadora tanto para los hombres como para las mujeres. La pregunta es: ¿se puede mejorar el sexo a través de la química? La respuesta la tienen los noruegos que la han tomado. Según los testimonios de los consumidores de la pastilla, no sólo mejoró su sexualidad sino su humor y talante en general. Aquellas mujeres que tenían frente al televisor un plácido paquidermo han visto despertar al león del cual se enamoraron. Hasta el momento tanto hombres como mujeres aseguran que el efecto es inmediato y sorprendente. Al parecer Libido les aporta a ellos erecciones más duras y prolongadas, lo cual aumenta la intensidad del orgasmo. Las mujeres aseguran que al aumentar la sensibilidad y la lubricación vaginal les revive el placer erótico. Y en ambos casos refuerza tanto el deseo como el impulso sexual.
La cautela con que las autoridades de salud de Estados Unidos han asumido el tema obedece a las fuertes críticas que en los últimos años han surgido contra los afrodisíacos químicos. Una cosa es mejorar el desempeño sexual de las personas que tienen problemas y otra es una pastilla que pueda aumentar el deseo sexual más allá de lo normal. De otra parte, hay una controversia de dos bandos. De un lado están los defensores de la química como restauradora del sexo y de otro los que sostienen que el adormecimiento de la libido más que un problema biológico es un problema sicológico.
Pero detrás de la 'cura química' para abrir el apetito sexual hay una industria multimillonaria. La pérdida de interés en el sexo es algo que sucede en algún punto de la vida de cualquier persona, hombre o mujer, y pocos medicamentos tienen como mercado potencial a 'todo el mundo'. Esto ha llevado a que en la primera mitad de esta década las investigaciones sobre el tema se hayan intensificado. Y todo parece indicar que ha llegado la era en que el deseo sexual se puede comprar en la droguería de la esquina.-