LA REALIDAD DE UN SUEÑO

El centro Epcot, un complejo tecnológico ideado por Walt Disney, abrió sus puertas al mundo.

22 de noviembre de 1982

En la fantasía de Walt Disney "El aprendiz de brujo" (hábilmente representado por el Ratón Mickey) tiene un sueño. Está en la cima de una montaña, guiando las estrellas y los planetas como un Stokowski cósmico. En la mente de Disney esa era la misma imagen de lo que a él le hubiera gustado hacer una vez que hubiera adquirido completo control sobre la tierra y sus elementos. De ahí, de la necesidad de cristalizar un sueño, nacieron tres de sus grandes proyectos.
En 1955 Disney inauguró su primer parque, el famoso Disneylandia, en Aneheim, California. Y antes de su muerte en 1966 planeó dos parques más. Su hermano Roy terminó "El mundo de Disney" en Orlando, Florida, inaugurado en 1971. Y este mes, Card Walker, Director del Consejo que administra "Producciones Disney", presidió la apertura del último de los parques ideados por Walt Disney: el centro Epcot.
El reloj empezó a funcionar exactamente hace tres años en un pequeño claro de un pantano central de la Florida. Era el comienzo de un ambicioso y monumental proyecto, una de las construcciones privadas más grandes de toda la historia. Un lugar para mostrar tanto las tecnologías del presente y del futuro como la cultura de una diversidad de naciones. El centro Epcot que se convirtió en realidad este mes, 36 meses después de iniciados los trabajos, necesitó cuatro mil personas para adelantar las obras y una inversión de mil millones de dólares.
En él, algunos de los 1.800 artistas de Disney, ingenieros y creativos, junto con directores de construcción y 500 subcontratistas trabajaron de un lado para otro con el único objeto de edificar el millar de elementos físicos que los constituyen: 15 pabellones principales que totalizan 60 hectáreas; una laguna artificial de 624 mil metros cúbicos y 20 hectáreas, que fue excavada por una draga y luego llenada artificialmente; un sistema de monorriel que recorre cuatro kilómetros hasta "El Mundo de Disney"; miles de kilómetros de conductos para aire acondicionado, cables, conexiones para las computadoras.
El centro Epcot es el corazón de un Prototipo Experimental de una comunidad del mañana (de ahí las iniciales Epcot). Se transformó en un parque futurista dividido en dos partes: "El mundo del futuro" y "El mostrario del mundo" .
Para el primero, las grandes corporaciones unieron su pensamiento creativo a la habilidad de la organización Disney para entretener y así crearon pabellones como el de la Bell System, Planeta Tierra, en el que se presenta una dramatización de las diferentes formas como el hombre ha sobrevivido a través de los siglos, gracias a la comunicación con los demás miembros de la especie. Para llevar a cabo este trabajo y, en general, para transformar los fantásticos conceptos y diseños de Disney en realidad, se escogió a la firma Tishner, que tiene a su haber la construcción de las torres de 110 pisos del "World Trade Center" de Nueva York, en Chicago el centro "John Hancock", "Century City" en Los Angeles y "Renaissance Center" en Detroit. Dentro del Planeta Tierra hay una enorme esfera geodésica que es la estructura central de Epcot y la entrada a "El mundo del futuro". Allí, entre otras firmas, la Exxon presenta "El universo de la energía", una construcción con energía solar que tiene el tamaño de tres canchas de fútbol; la General Motors hizo "El mundo del movimiento" y Kraft construyó "La Tierra", un pabellón que explora la asociación entre la naturaleza y el hombre.
Por su parte, "El mostrario del mundo" abre con nueve pabellones nacionales, construidos alrededor de la laguna. Cada pabellón está patrocinado por diferentes compañías extranjeras y cada uno se centra en la cultura, tradición y aspectos turísticos de los países que actualmente están representados en Epcot: Francia, Gran Bretaña, Italia, Alemania, Japón, Estados Unidos, México, Canadá y China.
En Epcot, el Ratón Mickey y el Pato Donald han sido desterrados a las tiendas de los recuerdos y regalos. Porque el mundo de Epcot esta poblado por nuevas criaturas, animadas cuyo control se ejerce desde unas computadoras. "Esta nueva generación de figuras no sólo se moverá y hablará, Dice Hench, el jefe de los creativos, ellas mostrarán sus emociones por medio de ceños fruncidos, muecas, cejas levantadas y tensionamiento de la piel de la cara ".
Un mundo tecnológico convertido en parque de diversiones que se inauguró a comienzos del mes. Banderas izadas, toques de trompeta, palomas y globos de colores anunciaron la apertura de Epcot. Pero las ruedas funcionaron mal, las computadoras estaban fallando. Más de 25 mil espectadores sorprendidos ante ciertas fallas de la moderna tecnología y algunas libertades que se tomaron los diseñadores (como el Palacio de los Dogos de Venecia construido al otro lado de la Plaza de San Marcos, porque se mejoraba la vista), resolvieron ser tolerantes. La magia había hecho su efecto.
Pero Disney, el gestor del proyecto, que recorrió todo el centro de la Florida buscando el sitio ideal, murió antes de tener la oportunidad de ver convertida su fantasía en realidad y el sueño de una utopía tecnológica murió con él.